martes, 1 de enero de 2013

Duvel Tripel Hop 2012 (Citra)

MARCA: Duvel
MODELO: Duvel Tripel Hop 2012 (Citra)
ESTILO: Ale Dorada Fuerte (9'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Que una fábrica tan reputada como Duvel Moortgat saque una nueva cerveza siempre es una buena noticia, y si encima es dentro de una marca con un solo modelo (sin contar con Duvel Groen, que me dejó algo frío), por otra parte de altísima calidad, la expectación que se llega a crear es verdaderamente importante. Pues bien, el año pasado salió a la venta Duvel Tripel Hop, una versión de la Duvel original que pone más énfasis en el lúpulo, con una primera tirada elaborada con Saaz, Styrian Goldings y Amarillo. No tuve oportunidad de probarla entonces, pero por suerte este año ha vuelto, sustituyendo Amarillo por el lúpulo americano Citra, y he podido hacerme con un par de botellas en Cervezorama y en La Vinoteca.

Es de color dorado apagado, pajizo, ligeramente turbia, recubierta con una espuma blanca jabonosa que es alimentado por una columna de burbujas que ascienden como continuando al cuello de la copa. El lúpulo no pasa desapercibido en el aroma, y aporta intensas notas de limón, naranja, pino, resina y hierba fresca, aderezados con una ajustada ración de pimienta y clavo. Quedan así en segundo plano frutas tropicales, levaduras, un suave recuerdo lácteo y mínima malta. Es un perfume muy completo puesto que, a pesar de que la acidez y el picante son sin duda fundamentales, permite que se exprese también el dulzor de base. 

En boca se acentúa el lácteo antes mencionado, y combinado con los cítricos recuerda con claridad al yogur de limón, siendo lo que predomina al principio del trago. No obstante, este carácter dulce pronto sufre el acoso de intensas notas de especias, hierba, piña, albaricoque, y más tenues mango y levadura belga. Este hostigamiento consigue finalmente neutralizar al dulce por completo en los últimos instantes del sabor, convirtiéndolo en una pugna entre acidez y amargor que no se consigue resolver, mientras se desprenden potentes recuerdos de cítricos, hierba, pino y picante que conforman un final áspero, arisco, para desembocar en un regusto seco, cargado de lúpulo. Al echar los posos de la botella se suaviza un poco, no obstante sigue siendo bastante dura. Una cerveza muy interesante en mi opinión, arriesgada por su agresividad pero no me da la impresión de que esté descompensada, aunque sí que es cierto que fuerzan algo la cuerda. Parece como si fuese una reinterpretación de Duvel por De Ranke, además con una calidad digna de esta segunda fábrica.

NOTA:

sábado, 29 de diciembre de 2012

Joseph Holt Sixex

MARCA: Joseph Holt
MODELO: Joseph Holt Sixex
ESTILO: Strong Ale (6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Joseph Holt fundó en 1849 en Oak Street, Manchester la cervecera que todavía hoy lleva su nombr; aunque evidentemente no es él quien la dirige ahora, sino su bisnieto, quien tomó el mando tras la muerte de su padre en el año 2000. Tampoco sigue la fábrica en el mismo lugar, sino que en 1860 se trasladó a Empire Street. Sin embargo, lo que sí que se mantiene es la utilización de barriles de 54 galones, o lo que es lo mismo 250 litros, siendo una de las pocas cerveceras inglesas que todavía comercializan sus elaboraciones en estos recipientes. 

Esta Strong Ale llamada Sixex, primera Ale de la fábrica que salió a la venta en botella, vino escondida en el equipaje de Alberto hace unos meses, como esa forma de cortesía que ya hemos establecido de forma oficial entre los dos ante cualquier visita que incluya alojamiento. Es muy oscura, casi negra, protegida por una cremosa espuma beige, bastante abundante para una pinta inglesa. Se agradece el frescor natural de su aroma, con notas herbales y minerales, bajo el cual se combinan malta tostada, cereales y café solo con en dulzor de las frutas oscuras, sirope de caramelo, más secundario ciruelas pasas y leves recuerdos de salsa de soja. 

En boca mandan los tostados, envueltos en notas de café negro, regaliz, nueces y suave torrefacto. Al principio están modulados por frutas oscuras, que rozan el dátil, pasas y caramelo, pero a medida que nos acercamos al final su hegemonía es más clara. Termina con un amargor contundente pero bien controlado, cargado de hierba, minerales y suaves recuerdos de cítricos y tostados. No se complican la vida con esta cerveza, parece buscar cumplir con un estilo manteniendo las formas clásicas, y lo consiguen sin dificultad. No es el tipo de cerveza que te hace caer de culo, pero ni mucho menos defrauda. ¡Mil gracias, Sir Asf!

NOTA:

domingo, 23 de diciembre de 2012

Tienda en Pamplona: Kalinka

NOTA IMPORTANTE: Esta tienda cerró en el año 2013

A pesar de haberme trasladado recientemente a la bella Pamplona, ciudad que no conocía demasiado antes, entre tiendas online y físicas no ha habido un solo momento en que mis relativamente exigentes necesidades cerveciles no hayan estado satisfechas. No obstante, sí que echaba en falta una tienda de alimentación rusa como la que abrió cerca de mi anterior domicilio en Zaragoza, Kozak, donde poder encontrar de cuando en cuando botellas exóticas venidas del Este de Europa para compartir con amigos cualquier fin de semana.

Pues bien, tras tres semanas viviendo en la capital Navarra, una tarde, mientras paseaba por los alrededores de Plaza del Castillo, me topé de bruces con un modesto local que exhibía unas cuantas botellas de medio litro con carácteres cirílicos en su escaparate. Sin dudarlo un segundo entré con los ojos fijos en los dos frigoríficos situados a la izquierda de la puerta, y tras mucho pensarlo, mientras el dependiente me hablaba de algunas de las marcas, me decidí por la Dunkel bielorrusa Lidskoe, aunque deje otras fichadas para una visita más adelante.

Bastó con que el dueño me dijese el precio de la botella, 1'5 euros, para que decidiese que no necesitaba buscar más tiendas de este tipo, y desde ese día no he acudido a otra cuando me apetece aventurarme con alguna cerveza de etiqueta indescifrable. Además, he podido comprobar que las Baltika 3, 6 y 9 son las únicas fijas, mientras que todas las demás van rotando, pudiéndose ver con frecuencia otras marcas rusas, polacas, ucranianas, e incluso alguna lituana puntualmente. 

Por supuesto, también hay comida típica de estas regiones pero he de reconocer que por el momento no le he hecho mucho caso... ya habrá tiempo, más adelante. Por ahora dejémoslo con que es un lugar estupendo en Pamplona para adquirir cervezas del Este de Europa, lo cual no es poco.




TIENDA: Kalinka
DIRECCIÓN: Calle San Agustín, 28
LOCALIDAD: Pamplona
PROVINCIA: Navarra

sábado, 22 de diciembre de 2012

La Gwilh

MARCA: Diaouligs
MODELO: La Gwilh
ESTILO: Blonde (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: La otra cerveza de la Brasserie des Diaouligs que me regaló Pau no era, ni de lejos, tan peculiar como la ya comentada "La Diaoul", elaborada con hidromiel. No obstante, y pese a en principio no ser más que una cerveza rubia, antes de abrirla ya despertaba en mí la fascinación que habitualmente experimento por las cervezas bretonas, me temo que en parte gracias a su misteriosa etiqueta. Su nombre, Gwilh, es el que dieron los habitantes al lobo que rondaba por sus tierras, y que en las noches de Luna llena bajaba a las poblaciones a comer ovejas, gallinas, congresistas, solomillo a la trufa y oporto, o lo que demonios coman los lobos.

El aspecto es muy limpio, de color dorado brillante, apenas turbia, con una esponjosa crema que surge con ímpetu, dejando apenas medio dedo de espuma. Igual que "La Diaoul", desprende en nariz mucha manzana, en este caso mezcla de Golden y Reineta, quedando más secundarios malta dulce, limón y hierba, salpicados de levadura salvaje, miel y especias. La verdad es que, al igual que la otra cerveza de esta fábrica, recuerda mucho a la sidra... no sé si será una característica intrínseca a esta marca, pero también debo decir que mientras conserve un perfil tan cuidado a mí no me parece un inconveniente.

De trago muy refrescante, en parte gracias a su acidez, aunque sin renunciar ni por asomo al sabor. Sorprende que sea capaz de mantener esta cualidad a pesar del claro ahumado que posee, que se mantiene en todo momento tras malta, manzana y limón que forman el núcleo. Una buena ración de clavo, pimienta y levadura adornan un final de amargor y acidez contundentes pero compensados, donde entre notas de cítricos y manzana verde surge un punto de humo y tabaco, que queda en el regusto junto a suaves recuerdos de cuero y madera. Muy distinta de "La Diaoul", pero ambas tienen unas características tan particulares que a casi nadie se le escaparía que ésta también ha salido de la Brasserie des Diaouligs. Sin duda estos bretones tienen una forma peculiar de hacer cerveza que entendería que no fuese del gusto de todo el mundo, pero a mí por lo menos me encanta. Nuevamente, gracias Rosana y Pau.

NOTA:

domingo, 16 de diciembre de 2012

La Diaoul Bier An Ankou

MARCA: Diaouligs
MODELO: La Diaoul Bier An Ankou
ESTILO: Cervoise de chouchen (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Pese a las confusiones que pueda haber, el término francés "cervoise" no quiere decir "cerveza", sino que se refiere a un tipo de cerveza rudimentaria que se elaboraba en la antigüedad sin emplear para ello lúpulo, ya que esta planta no se empezó a utilizar hasta la baja Edad Media, sino otras plantas aromáticas. Como si esto no fuese suficiente originalidad, la Brasserie des Diaouligs decidió complicar más todavía una cerveza de este estilo con la ayuda del chouchen que elaboran también en sus instalaciones, un tipo de hidromiel típica de la Bretaña francesa que tiene la peculiaridad de haber potenciado la fermentación con la adición de manzanas frescas prensadas, habiendo creado así una bebida que se podría calificar como única sin miedo a equivocarse.

Esta tentadora rareza bretona llegó a mi despensa hace unos meses por cortesía de Pau y Rosana, a quienes les agradezco enormemente el detalle, y desde entonces he estado tentado de abrirla, aunque sin saber muy bien a qué atenerme poruqe nunca he probado nada parecido. Gracias a la botella transparente se puede ver antes de abrirla que es de un color rojo cristalino, con destellos anaranjados y marrones, que una vez servida se cubre por una importante cantidad de espuma beige. Inunda las fosas nasales un aroma potente que recuerda con claridad a la sidra, al presentarse un dulzor contrarrestado por una importante acidez, de donde se surgen malta tostada y manzana verde, siendo los matices más evidentes. Más de fondo quedan notas de miel, naranja, algún cítrico, y suaves recuerdos florales y herbales, adornados de canela y clavo. 

Resulta mucho menos delicada en boca, irrumpe con rotundidad la malta tostada, que se rodea de pan, cereales, caramelo, y más tenues miel y frutos rojos. El inicio es dulce, pero por poco tiempo, puesto que en escasos segundos impregna todo el conjunto un fuerte ahumado que al principio me costó identificar, aunque sí distinguía notas de madera y cuero que le acompañan, que aporta al trago una sensación áspera y algo seca. Termina derivando en un amargor claro, algo salado, lleno de hierbas que no sabría especificar, recuerdos asidrados, cítricos y especias picantes, quedando estas junto con un punto de humo en el largo regusto. Esta ha sido una de mis grandes sorpresas del año, de una cerveza de la que tampoco esperaba maravillas me he encontrado un sabor potente, un cuerpo robusto y una complejidad apabullante. Bretaña es fantástica.

NOTA:


domingo, 9 de diciembre de 2012

La Guernoillette Blonde Au Safran

MARCA: La Guernouillette
MODELO: La Guernoullitte Blonde Au Safran
ESTILO: Blonde con azafrán (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Cuando Pau y Rosana visitaron Pamplona al final del verano tras un viaje por tierras bretonas, tuvieron el genial detalle de traerme unas cuantas rarezas francesas, que han estado almacenadas esperando su turno hasta hace pocas semanas, cuando empecé a abrirlas. La primera en circular fue de la Brasserie La Guernouillete, una microcervecera emplazada en el garaje de un domicilio de Saint Brieuc, que en el año 2011 comenzó la actividad que le ha llevado a tener en su repertorio 9 modelos distintos, varios de ellos que se podrían calificar de experimentales sin miedo a equivocarse. Es el caso de la Blonde que voy a comentar hoy, en cuya elaboración se ha empleado un ingrediente tan poco común como es el azafrán, para cuyo manejo hace falta sin duda bastante habilidad.

Es de color amarillo limón, bastante más turbia de lo esperado y muy brillante, con una espuma blanca de la que no queda el menor resquicio en apenas 10 segundos. Queda así un aspecto similar al de un refresco, con una superficie impoluta a la acuden pequeñas burbujas a morir sin dejar huella. Supongo que nadie se extrañará si dijese que el aroma es rarísimo, con el olor algo dulzón y picante de lo que supongo que es el azafrán predominando sobre el resto, que quizá resulta un poco estridente aunque no llega a molestar. Deja cierto espacio para malta dulce, manzana, piña, y afilados recuerdos de limón, probablemente lo más llamativo aparte del azafrán.

En boca, por desgracia, no solo resulta rara sino también poco agradable. El primer problema con el que uno se topa es que falta carbonatación, por no decir que no hay ninguna, y lo mismo sucede con el cuerpo. En cuanto al sabor, es simplón y bastante plano, monopolizado por el azafrán y sin apenas otros matices perceptibles. Poco a poco deja entrar a los cítricos hasta terminar en un final áspero, incluso asidrado, con notas de hoja de limón, uva blanca poco madura, suaves especias y  leve pomelo. Dudo que alguien discuta la originalidad, pero a nivel de calidad no creo que de la talla ni de lejos. No obstante, como regalo es genial, no todos los días se prueba una cerveza de una micro oculta en el corazón de la Bretaña francesa... ¡muchísimas gracias, Lupuloadictos!

 NOTA:

jueves, 6 de diciembre de 2012

DouGall's Leyenda

MARCA: DouGall's
MODELO: DouGall's Leyenda
ESTILO: Extra Special Bitter (5'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Hasta que sea algo más fácil conseguir la nueva botella de esta marca, Raquera, termino con Leyenda este repaso a las tres DouGall's más recientes con una satisfacción plena, puesto que tanto a nivel de calidad como de precio a esta marca no se le puede exigir mucho más. Esta pertenece además a un estilo, las ESB, en el que no soy fácil de complacer porque la mayoría de las pocas marcas distintas que he podido beber lo he hecho en Londres, y siempre que he podido de cask. Ante estas condiciones, que solo se puede calificar de idóneas, cualquier cerveza de este tipo embotellada se presenta en clara desventaja, que por supuesto tiene que remontar.

DouGall's Leyenda se enfrenta a esta tarea sin miedo, y pese a que los lúpulos Warrior, Cascade y Styrian Celeia no son ingleses. Es de color oro anaranjado, ligeramente turbia, y al servirla genera una fina capa de espuma grisácea, imagen típica de una Ale británica salvo porque no es capaz de llenar el "nonic". (malditas botellas de 33 cl, cuánto daño han hecho) En nariz tampoco es demasiado florida y se presenta con intensidad moderada, exhibiendo un perfume compuesto por una base de malta dulce, naranja y albaricoque, que deja más de fondo suaves recuerdos de caramelo y melocotón, aderezado con tenues notas de hierba, cítricos y picante. Sin resultar simplona ni aburrida, parece no se complican la vida y van a por una cerveza efectiva.

En boca sigue la sobriedad británica, conserva esa aspereza que tanto me gusta de las cervezas de este país, salida de los tostados, nuez, almendra y suave caramelo. El dulzor está muy limitado por notas minerales, hierba y naranja, responsabilidad del lúpulo, e incluso poco a poco se apaga más para dejar paso a más cítricos y recuerdos medicinales, suavemente especiados. Termina la cerveza con un amargor firme y seco, no obstante nada excesivo, donde no se puede ignorar la presencia del lúpulo herbal y cítrico. Parece seguir una línea más clásica que sus otras dos compañeras, 942 y Tres Mares, supongo que debido al empleo del Celeia, y eso la convierte en una cerveza de diario estupenda; de hecho, tomar una pinta tanto de barril como de botella tiene que ser una maravilla. ¿Para cuando botella de medio litro o cask de Leyenda?

PD: Me había olvidado, un millón de gracias a los Rodríguez (nada que ver con Calamaro y Rot) que fueron quienes me regalaron las 3 botellas. 

NOTA: