domingo, 22 de septiembre de 2019

Held-Bräu Altfränkisches Bauernbier Dunkel

MARCA: Held-Bräu
MODELO: Held-Bräu Altfränkisches Bauernbier Dunkel
ESTILO: Dunkel (5'3% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Seleccioné a ciegas una gran parte de las botellas del pedido de Landbierparadies que he exhibido durante los últimos meses en el blog, sin embargo no fue el caso de esta Dunkel de Held-Bräu, ya que por pura casualidad la había visto en un par de listas de las cervezas más interesantes de esta región. En el caso de las Dunkel tampoco habría tenido problema en arriesgar un poco y buscar sorpresas, es un estilo que me gusta mucho y en Franconia son todas (muy) buenas, pero ya que tenía la recomendación... pues eso.

Como podéis imaginar es de color marrón muy oscuro, aunque en periferia y al trasluz se aclara hasta un pardo anaranjado. Casi tan opaca como una Porter, está coronada por una espuma abundante y cremosa, espesa como el merengue, teñida de beige. El aroma es delicioso, combina toneladas de malta y caramelo con mucha fruta madura, destacando ciruelas, pasas y suaves recuerdos de higos. La parte más áspera queda en un segundo plano, en forma de nueces caramelizadas, pan negro, suave café molido, cacao y mínimas avellanas. Aunque el conjunto es principalmente dulce, estos últimos matices lo modulan, y a esto también ayudan delicadas notas cítricas, minerales y levemente herbales del lúpulo, consiguiendo un frescor muy agradable.

Nada más dar el primer trago no pude sino coincidir con los listados que ensalzan las virtudes de esta cerveza, no falla en nada. Se presenta con cuerpo medio, llena la boca pero el paso es ligero. Al comienzo ataca malta tostada y suave caramelo, con un dulzor muy medido, detrás del cual van creciendo tostados como pan negro, cereal y un toque de café, que pasan a ocupar una  posición protagonista. De fondo van las frutas oscuras, completando el espectro de sabores. Hacia el final sale el lúpulo noble, herbal, cítrico y levemente terroso, en un amargor medio en el que se marcan los tostados incluso con un punto de humo. Regusto con tostados, grano de café y mineral, dura hasta el siguiente trago. Compleja, sabrosa y fácil de beber, tiene todo lo que se le puede pedir a una Dunkel. La otra que he bebido de esta fábrica me pareció buena, pero esto son palabras mayores.

NOTA:

domingo, 8 de septiembre de 2019

Jandrain-Jandrenouille IV Saison

MARCA: Jandrain-Jandrenouille
MODELO: Jandrain-Jandrenouille IV Saison
ESTILO: Saison (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: La altísima calidad de los productos de Jandrain-Jandrenouille ha conseguido un fenómeno extraño, que es que se tenga la sensación de que esta cervecera es una de las clásicas belgas, cuando en realidad fue fundada tan solo en el 2007 por dos compañeros de universidad. En el momento actual es Alexandre Dumont de Chassard el que lleva el proyecto en solitario, empleando sólo ingredientes locales en la elaboración de las cervezas (excepto una pequeña cantidad de lúpulo americano). La cerveza que comento hoy fue de hecho la primera cerveza que salió al mercado, una Saison que sigue fielmente la Reinheitsgebot, y combina además 4 lúpulos distintos.

Su color es dorado brillante, ligeramente rojiza y con una mínima turbidez. La potente carbonatación asciende en columna hasta una capa de espuma blanca de pocos milímetros de grosor pero compacta y con buena retención. En nariz es fantástica, se presenta con un inicio dulce dirigido por malta, cereal, mucho melocotón, manzana fresca y algo de albaricoque. Hay también mucha levadura en el aroma, salpica recuerdos lácteos, plátano no demasiado maduro, algo de clavo, y el lúpulo da un toque de frescor con notas cítricas, hierba y suave pimienta. Tiene un poco de todo, y además en su justa cantidad.

En boca es sobria, aunque manteniendo la ligereza que dicta el estilo. Se combinan malta de dulzor moderado, cereal crudo y masa de pan con frutas como uva blanca, manzana verde, más suave lima y cáscara de limón. Al final los cítricos se acentúan, y salen hierba, heno, minerales, un leve deje de cuero, levadura y pimienta. Cierra con un regusto largo cargado de minerales, cítricos y especia picante, que llama a seguir apurando la copa. Equilibrada y muy compleja, un ejemplo excepcional del estilo que se mantiene dentro de la tradición a pesar de emplear lúpulo americano. 

NOTA:

miércoles, 4 de septiembre de 2019

Meister Vollbier

MARCA: Meister
MODELO: Meister Vollbier
ESTILO: Dunkel Lager (4'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Últimamente siento como si estuviese contando una y otra vez el mismo breve relato sobre la historia de la cervecera, porque ya llevo unas cuantas que son idénticas: fábrica de propiedad familiar, fundada en pequeña localidad de Franconia, elaboran varias cervezas de estilos clásicos... En este caso sigo el patrón y nos vamos hasta Unterzaunsbach, parte de Pretzfeld, al Norte de Núremberg, donde se encuentra la cervecera Meister, fundada en 1865. Esta fábrica tan solo elabora dos cervezas distintas, una estacional para la Oktoberfest y la que voy a comentar hoy.

El término Vollbier es un poco impreciso, y uno puede encontrar elaboraciones muy dispares con este nombre. En este caso se trata de una cerveza de color marrón oscuro, pardo rojizo si hay bastante luz, con escasa espuma beige de burbuja fina que protege la superficie. En nariz es intensa y fresca, con potentes notas de de malta tostada, nueces caramelizadas, más suave toffee, frutas oscuras maduras, recuerdos de pan de centeno y mínimo café. El conjunto es predominantemente dulce, aunque lo aligera un agradable punto cítrico del lúpulo, con un deje herbal. 

El paso por boca es ligero, pero sabor no falta. Se combinan malta tostada, mucho cereal, pan negro y algo de galleta integral, con un dulzor muy limitado apoyado por leves recuerdos de ciruelas e higos. Hacia el final sale una acidez cítrica, intensas notas minerales, algo de hierba y un punto acaramelado y mantequilloso bastante inesperado, antes de concluir en un amargor medio, con minerales, hierba y medida especia picante. Es una cerveza sobria, bien cargada de cereal y forzando un poco con los tostados, casi como una versión británica de una Dunkel. La verdad es que la disfruté mucho y se me acabó en seguida y, si bien no me parece tan brillante como otras referencias franconas que han pasado por aquí últimamente, creo que merece la pena. Y sospecho que en la propia fábrica será mucho más redonda.

NOTA:

lunes, 26 de agosto de 2019

Ballast Point Sculpin IPA

MARCA: Ballast Point
MODELO: Ballast Point Sculpin IPA
ESTILO: India Pale Ale americana (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Ballast Point Brewing Company es un clásico moderno dentro de las cerveceras norteamericanas. Fue fundada en San Diego en 1996 por un grupo de elaboradores caseros, y en ese mismo año lanzaron a la venta su primera referencia: Ballast Point Special. Dentro de su amplio repertorio, su cerveza más popular es la que comento hoy, una IPA de 70 IBUs que vio la luz en el año 2005. Durante un tiempo fue considerada una de las mejores representantes de este estilo a nivel mundial, aunque desde que la cervecera fue absorbida por Constellation Brand (a la que pertenecen Corona, Modelo o Pacífico, entre otras) en el 2015 no son pocos los que afirman que el nivel ha disminuido de forma significativa. Yo no la pude disfrutar antes del cambio de dirección, pero debo decir que me ha parecido una cerveza razonablemente buena aunque no espectacular.

Su color es naranja bronceado, con una leve turbidez. A través del líquido se ve una carbonatación fugaz, que genera una espuma cremosa de burbuja microscópica de aspecto bastante apetecible. El aroma es de intensidad media, y en él destaca sobretodo el mango, aunque también son evidentes otras frutas como maracuyá, melocotón en almíbar o naranja. De fondo queda malta, y algo de galleta y caramelo, creando un soporte dulce en armonía con la fruta tropical. Además, notas de cítricos definidas por cáscara de naranja y pomelo, junto con un punto de hierba, dan un frescor al conjunto que evita que sea plano o demasiado empalagoso.

En boca, como pasa con muchas IPA, es mucho más seca de lo que sugería el olfato. Comienza con malta, cereal, pan, y pronto se libera el lúpulo con intensas notas de cáscara de limón, pomelo, hierba y pino. Poco a poco surgen frutas tropicales, similares a las descritas en el aroma, que quedan en un segundo plano. Termina con un final de amargor áspero, ligeramente astringente, con hierba, pino y especia picante, quedando de fondo recuerdos de naranja y mango. Al principio estaba bastante satisfecho, me pareció una IPA muy entretenida, con fruta tropical pero también afilada. Sin embargo, y como me ha pasado con otras cervezas de este estilo, si no te la terminas en 15 minutos el lúpulo se pierde en su mayor parte y queda bastante apagada, no parece la misma cerveza. De todas formas disfrutable, y más al precio al que la cogí, alrededor de 2'5 euros.

NOTA:

jueves, 15 de agosto de 2019

Griess Naturtrübes Kellerbier

MARCA: Griess
MODELO: Griess Naturtrübes Kellerbier
ESTILO: Kellerbier (5'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: La cervecera Griess fue fundada en el año 1872, y está en manos de la 3º generación de esta familia desde 1983, cuando Peter Griess pasó a ser el maestro cervecero y se convirtió así en el más joven de Alemania en llevar a cabo este trabajo. Se encuentra en Franconia, como casi todas las cervezas que he comentado en los últimos meses en este blog, concretamente en Geisfeld, una aldea de alrededor de 900 habitantes perteneciente al municipio de Strullendorf, a menos de 10 km de Bamberg. La botella la conseguí también a través de Landbierparadies.

Esta cerveza tiene ni más ni menos que el aspecto que debería por su estilo, de un color dorado ambarino, brillante, con una turbidez media que hace que permite que las burbujas se intuyan a través del líquido. Tiene una espuma muy cremosa, ligeramente teñida de beige, de la que persiste medio dedo prácticamente todo el tiempo que la cerveza está en la jarra. En nariz es muy aromática, predomina el dulce, con toneladas de malta, galleta, masa de pan y ligeros recuerdos de bollo de mantequilla, que se mezclan con fruta madura, principalmente pera y más suave manzana. El lúpulo está bastante presente, con un carácter herbal, y se suma un punto de miel y suavísimas notas de clavo.

El paso por boca es especialmente redondo, a lo que ayuda una carbonatación perfectamente ajustada. En la entrada dominan de nuevo malta dulce y galleta, también notas de pan blanco y aparece algo de cereal crudo, con un dulzor algo más limitado. Están presentes las mismas frutas mencionadas en el aroma, aunque con un papel más importante. Al final se desarrolla un amargor bastante contundente, muy mineral y herbal, y con algún recuerdo de flores, miel y especia picante. Cada trago es una delicia, es totalmente redonda. A diferencia de lo que pasa con alguna Kellerbier no es nada lineal, sino que la generosidad en el uso del lúpulo la hace bastante compleja, pero manteniendo el equilibrio con la habilidad de los maestros cerveceros alemanes. La mejor Kellerbier que he probado hasta la fecha, creo.

NOTA:

domingo, 11 de agosto de 2019

Hebendanz Posthalter Lager

MARCA: Hebendanz
MODELO: Hebendanz Posthalter Lager
ESTILO: Münchner Hell (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: De Forchheim hablé hace casi dos años, cuando comenté la Kellerbier de Neder, la cervecera más antigua de esta ciudad. Sin embargo, y a pesar de contar con apenas 30.000 habitantes, cuenta con 3 fábricas independientes más, todas ellas con muy buenas cervezas. Hebendanz es la segunda más antigua, se fundó tan solo 25 años después de Neder, en 1579. Es posiblemente la fábrica con mejor reputación, y de entre sus más de 10 elaboraciones elegí la críptica Posthalter Lager, de estilo indefinido (a priori, aunque os juro que nada tiene que ver con una Kellerbier que mencionan en Ratebeer).

Es de color dorado muy brillante y limpio. Genera una espuma blanca, en cantidad moderada y que se reduce en seguida, siendo incapaz de cubrir toda la superficie. El aroma es muy intenso y goloso, con claras notas de malta, mantequilla y dulce de membrillo, más suave manzana golden, toffee y algo de pera. Como soporte queda masa de pan, con un punto de miel, mientras el lúpulo aporta un perfume floral, ligeramente especiado, que encaja a la perfección con el resto del conjunto. 

En boca sin embargo es algo más rebelde de lo que esperaba, lo que no quita que me parezca francamente buena. En la entrada se juntan otra vez malta y mantequilla, aunque esta vez con más presencia de cereal y masa de pan, limitando el dulzor, y notas de manzana golden poco madura. Al final se seca bastante, sale cáscara de limón, notas minerales y florales, un intenso punto de miel y suave especia picante. A pesar de tener sólo 5º de alcohol se nota un calor ligeramente dulce en la garganta que resulta muy reconfortante. Muy buena elección para el verano, me imagino tomándola en jarra con tapa en un Biergarten en mitad del monte. Sigo engordando la lista de referencias franconas que merecen la pena, esta región es El Dorado de las cervezas.

NOTA:

miércoles, 7 de agosto de 2019

Huppendorfer Zwickel

MARCA: Huppendorfer
MODELO: Huppendorfer Zwickel
ESTILO: Kellerbier (4'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: La cervecera Grasser es otra de los cientos de cerveceras familiares que se pueden encontrar en la Alta Franconia. Fue fundada en Huppendorf en el año 1750 por Gastwirt Pankraz Grasser, y sigue bajo el control de esta misma familia. En el momento actual es una de las fábricas con mayor volumen de producción del distrito de Bamberg, y cuenta con un repertorio de 6 cervezas permanentes y 8 estacionales.

Siempre que tengo una Keller a mano procuro comentarla en el blog, porque es un estilo que me gusta mucho, aunque llegan a España muy pocas representantes, principalmente la de St. Georgen-Bräu, la de Hacker-Pschorr y la de Kaiserdom. Esta es de color amarillo pálido, y al trasluz se presenta velada y de más pajiza. La espuma es blanca, cremosa y muy consistente, queda un dedo en superficie. El aroma es muy interesante. La carga de especia picante despunta desde el principio, con notas de pimienta blanca, jengibre y clavo, apoyada sobre una base de malta de dulzor moderado, cereal crudo, manzana golden, y un punto de limón. De fondo quedan el perfume del lúpulo floral, recuerdos de miel y algo de minerales, que emergen a medida que el picante se asienta. 

En boca llama la atención la carbonatación, potente pero sin pasarse, que consigue una entrada fresca muy agradable. Es sobria, con un núcleo de malta fresca, pan blanco, grano crudo, manzana golden madura y más suave limón. Queda, como en el aroma, un fondo con miel y minerales. El final tiene un amargor algo más seco de lo habitual en este estilo, con marcadas notas cítricas y de lúpulo herbal, especia picante, y más suave flores y notas minerales. Una Kellerbier especialmente refrescante por ser algo más amarga de lo habitual, pero de todas formas bien proporcionada. Me ha gustado mucho, como todas las cervezas franconas que han pasado por aquí últimamente.

NOTA: