domingo, 20 de mayo de 2012

Coopers Extra Strong Vintage Ale 2010

MARCA: Coopers
MODELO: Coopers Extra Strong Vintage Ale 2010
ESTILO: Strong Ale (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Australia

CARACTERÍSTICAS: Gracias la gentil generosidad del amigo Lupuloadicto, que se acordó de mí en una visita a Cervezalandia y por ello le quiero dar las gracias, a principios de año me llegó esta Ale elaborada por la Coopers Brewing Limited, una cervecera fundada en 1862 en el sur de Australia por Thomas Cooper, quien por error produjo su primer lote de cerveza intentando crear una tónica para paliar la enfermedad de su mujer. Es gracioso como algunos accidentes pueden provocar de forma involuntaria eventos muy positivos, y este sería el ejemplo perfecto, puesto que ha supuesto que en el año 2012 la Coopers Brewing Limited pueda celebrar su 150 aniversario, ocasión que, como no podía ser de otra manera, han aprovechado para sacar una cerveza de edición limitada.        

He de aclarar que, por especial que parezca la que hoy voy a comentar, no es la conmemorativa de la fundación sino una Strong Ale idónea para añejarla un par de años, más o menos el tiempo que ha pasado desde que se embotelló. Servida en vaso de pinta es muy turbia, de color marrón algo anaranjado al trasluz, con una discreta pero persistente espuma beige grisácea muy apetitosa. El aroma es de intensidad moderada, rebosante de dulce malta de herencia británica y mucha fruta madura, naranja y melocotón dominando, y más en segundo plano recuerdos tropicales y melosos, que se acaban juntando con suave caramelo, levadura, especias y un punto floral. En este momento lo cierto es que la cerveza parece que va a resultar ligera, frutal, y por lo tanto fácil de beber, nada que ver con lo que espera cuando se da el primer sorbo.

Al hacerlo se puede comprobar como la malta y el caramelo se definen más todavía y ganan suficiente fuerza como para ponerse por encima de todos los demás matices e incluso consiguen arrastrar hasta la boca notas de cacao y regaliz negro, que quedan algo más secundarias, y se ensamblan con la acidez frutal de naranja y albaricoque. A mitad de camino irrumpe un soplo de alcohol, que toma el control de la cerveza y conduce, incorporando a su séquito suaves recuerdos de levadura, canela, clavo y lúpulo herbal y floral, a un final áspero, bastante amargo, pero bien controlado, que deja un regusto a regaliz, licor y madera anclado en el paladar durante largo rato. Fuerza un poco con el tema del alcohol pero no llega a interrumpir el trago, quedando una cerveza algo agresiva pero que da mucho juego.

NOTA:

miércoles, 16 de mayo de 2012

Aktien Original 1857

MARCA: Aktien
MODELO: Aktien Original 1857
ESTILO: Münchner Hell (5'3% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Hace poco hablé de una estupenda Dunkel de la región de Franconia que me permitió disfrutar enormemente de este estilo algo díficil de encontrar por España, sobretodo si se exige un mínimo de calidad. Pues bien, en esa ocasión, a la satisfacción que supuso beberla se sumó la que me producía saber que guardaba en la recámara un par de botellas más de la marca, a las que le suponía una calidad similar. Tampoco tenía demasiada prisa en abrir ninguna de ellas, pero cuando matteo, uno de los comentaristas habituales en este blog, mencionó que esta rubia que voy a comentar hoy era bastante "discreta" mi curiosidad se disparó y decidí ponerla a prueba lo antes posible.

En jarra tiene ese aspecto inmejorable habitual en muchas cervezas alemanas, con un color dorado algo apagado sembrado de burbujas gruesas, que sin prisa alguna ascienden hacia una capa de espuma blanca, que se encargan de mantener largo rato. En seguida emana un agradable aroma, bastante completo, dominado por la malta, que juega al despiste con delicadas notas de miel, pan blanco y mínimo caramelo. Mientras tanto, una mezcla de levadura y naranja madura y flores aportados por el lúpulo le dan un toque algo campestre y nivelan el dulzor de la malta, empezando a despertar las sospechas de ser la presentación de una Hell increible.

Al final no lo es tanto, y no porque le falte cuerpo o sabor, pues de ambas virtudes anda sobrada, sino quizá porque la abundante malta, bien acompañada de intensas notas de miel y limón, acaba aplastando un poco otros matices que habría sido interesante resaltar más, a la vez que la escasa carbonatación contribuye a acentuar esta linealidad. A medida que el trago se va acercando al final desprende suaves recuerdos minerales, galletas, pan, pero cuando llega el momento de que el lúpulo noble alemán actúe, este se limita a impregnarlo de flores y miel, con una leve acidez cítrica, pero sin ser capaz de impulsar su casi imperceptible amargor. Queda así una sensación agridulce puesto que, a pesar de ser una cerveza disfrutable y de buena calidad, en mi opinión no alcanza a desarrollar todo su potencial.

NOTA:


lunes, 14 de mayo de 2012

Kuchlbauer Aloysius

MARCA: Kuchlbauer
MODELO: Kuchlbauer Aloysius
ESTILO: Weizenbock (7'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Esta ha sido sin duda la cerveza que más me ha gustado de la feria de alimentación internacional del Corte Inglés. Nunca antes había oído hablar de esta fábrica pero simplemente por la etiqueta me dio buenas vibraciones, y ya buscando más información la cosa pintaba incluso mejor: fundada en el S.XIV, con más de 700 años de experiencia, y dedicación exclusiva a las cervezas de trigo desde los años 70. ¿Se puede pedir más? Compré 3 botellas distintas y dos de ellas, Hefe-Weiβbier y Dunkelweizen, desaparecieron en una épica partida de Risk (que por cierto perdí miserablemente), dejándome además muy buen sabor de boca.

La Weizenbock sin embargo preferí reservarla para Hipos, pues desde Aventinus no hemos comentado ninguna de este estilo, así que aquí va. Como era de esperar es oscura, turbia, cubierta por una capa de espuma marrón que parece cemento por lo compacta que es, consecuencia de una carbonatación que sería imposible superar. Este color sufre una transformación muy peculiar al servir el final de la botella con la levadura, se dibujan ondas blanquecinas a lo largo del vaso, que se van difuminando, palideciendo ligeramente el líquido y creando una imagen genial. En cuanto al aroma, solo tengo una palabra para describirlo: perfecto. Muy profundo, intenso, penetrante y complejo, con un claro dominio del dulce con notas de chocolate y caramelo, algo más moderada malta tostada, y con fuerte presencia frutal, sobretodo plátano maduro, recuerdos de limón y leve melocotón. Por si fuese poco también abundan las especias, canela la más evidente y también clavo, para terminar con un toque herbal y cítrico aportado por el lúpulo que le quita un poco de dulzor consiguiendo un resultado inmejorable.

De sabor sigue siendo igual de impresionante, quizá no tan densa ni compleja pero sin duda riquísima. Comienza ya dulce, muy cremosa, con malta tostada, a lo que se añade un torrente de caramelo y chocolate con leche, y de nuevo aportado por el trigo notas de plátano a discreción, que se combinan de forma sublime con el cacao. Por lo demás, las especias aunque posiblemente están algo atenuadas respecto al aroma siguen teniendo una fuerte relevancia, sobretodo hacia el final, donde aparece un leve toque cítrico y muy suave alcohol, para tras un mínimo amargor, deja un regusto mezcla de plátano, hierba y chocolate con leche de una duración larguísima. Cada trago es una delicia, una estupenda Bock de Trigo que puede permitirse el lujo de mirar cara a cara a la todopoderosa Aventinus, lo cual no es poco. No me atrevería a decir cual de las dos me gusta más porque hace bastante que tomé por última vez la segunda pero vamos, ahí andan.


NOTA:



Actualizado por Sir Asf:

CARACTERÍSTICAS: Hace un tiempo recibí esta cerveza en un celebérrimo intercambio cervecil de los que se suelen dar entre personas de este blog en la estación de Zaragoza. Esta venía incluida como cerveza adicional, pero no por ello ha resultado ser una cerveza de segundas. Habiendo leído comentarios tan favorables como el que le da Embracing, y teniendo en muy alta estima a otra weizenbock como es Aventinus, cabía esperar bastante.

La cerveza es de color marrón turbio, no tan oscuro como cabría esperar. Se aprecia una cantidad ingente de burbujas subiendo a la superficie, acabando en una capa de espuma beix, de burbuja pequeña, poco consistente pero duradera. Si echase humo sería una pócima.

El aroma es inmediato, debatiéndose entre el torrefacto y el toque herbal, con notas maltosas, afrutadas, de plátano, melocotón, y en menor medida el cítrico y la levadura. También se perciben especias, canela y notas florales. En boca su sabor es dulce, afrutado y muy maltoso. Aparece de cuando en cuando el caramelo, el chocolate y el café, para pasar a un final algo herbal y ligeramente ácido. El regusto es algo picante, dejando una sensación muy agradable.

En conjunto una cerveza muy redonda, aunque quizás me había hecho demasiadas espectativas, porque la esperaba mucho más épica.

NOTA:



sábado, 12 de mayo de 2012

Houblon Chouffe Dobbelen IPA Tripel

MARCA: Chouffe
MODELO: Houblon Chouffe Dobbelen IPA Tripel
ESTILO: India Pale Ale americana (9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Tras un tiempo sin tomar nada de esta marca, en los últimos meses el simpático enano belga se ha asomado un par de veces por mi casa; la más reciente transformado en un gigante escocés que amenizó un rico asado, mientras que la anterior visita, que es la que ha dado lugar a esta entrada, le tuvo que traer Sir Asf hasta mis dominios. Por supuesto, se le agradece a este último su labor, hacen falta más guías que dirijan a enanos de este tipo (y no de ningún otro) hacia mi casa.

Esta Houblon Chouffe, que se empezó a elaborar en 2006, es una cerveza un tanto especial puesto que combina el estilo de las IPA con la tradición belga. Su carta de presentación es su color dorado brillante, inmaculado, que presume de 2 cm de corona blanca, del que sale un perfume sorprendentemente tenue. A diferencia de su escasa potencia, lo que sí que entraba dentro de mis planes en el aroma es la alta relevancia del lúpulo, que sobre una dulce base de cereales y pan aporta remarcables notas cítricas, de uva blanca y hierba, aderezadas por un soplo de clavo y pimienta blanca.

Por suerte, esta baja intensidad aromática no se traslada al sabor, que en el primer momento inunda la boca con el dulzor y la cremosa textura de una ale belga, protagonizada por malta, manzana golden y limón, y dejando en un segundo plano suave miel y mínima levadura, para terminar con la agresividad de una IPA yanki, acentuando la presencia de cítricos como limón y pomelo, piña, y sobretodo el lúpulo, que se manifiesta con afiladas notas de hierba y pino, bastante picantes, a lo largo de un potente amargor, ácido, áspero y con una considerable carga alcoholica. Pese a su fuerza, la verdad es que en boca parece todo muy cuidado y controlado, todo forma parte de un conjunto perfectamente armonizado que permite a esta cerveza mirar cara a cara a excelentes cervezas de este tipo sin sonrojarse.

NOTA:

miércoles, 9 de mayo de 2012

Grozet Gooseberry & Wheat Ale

MARCA: William Bros
MODELO: Grozet Gooseberry & Wheat Ale
ESTILO: Gruit de grosella espinosa (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Escocia

CARACTERÍSTICAS: En mi última entrada terminé de reseñar las estupendas Guineu, y por seguir con esta racha aproveché la semana pasada para abrir una botella que tenia en casa y así completar otra serie por lo menos tan buena como esta, pero mucho más original: las Historic Ales de William Bros. Esta botella ha sido la última de la marca en abandonar la despensa, donde llevaba varios meses a la espera de climas cálidos, más apropiados para su estilo, y es que no es otra cosa que una Wheat Ale, aunque eso sí, elaborada con mirto de Brabante, y a la que se le han añadido grosellas espinosas durante la maduración.

Sería imposible diferenciarla de una Wheat Ale o una Wit corriente y moliente a simple vista, pues como cualquier ejemplo de estos dos estilos es de color amarillo pálido, pajizo, algo blanquecina al trasluz, con una gran cantidad de burbujas ascendiendo en fila india a una fina capa de crema blanca. En el olfato sin embargo ya hay algo que llama la atención, y es que en el núcleo de malta dulce y plátano se introducen claras notas que recuerdan a la uva blanca o al lichi, y que posiblemente sean producto de las grosellas añadidas. Además de esto, se puede apreciar también en un segundo plano manzana verde, cítricos y hierba, con un mínimo deje picante, que culminan un aroma agradable, delicado y sobretodo muy natural.

En boca se presenta con cuerpo leve, aparecen de nuevo la uva blanca, malta, cereales y manzana verde, quedando el plátano más oculto, junto a un fondo herbal y floral. El final es igualmente ligero, quizá algo falto de fuerza incluso para el estilo, dominado por un suave amargor cítrico y herbal durante el cual el sabor de las grosellas llega a su punto álgido, para terminar con un largo regusto frutal muy finamente salpicado de especias. Original ante todo y muy refrescante, en mi opinión tiene la pega de que se puede hacer liviana en exceso pero, como también dije de Fraoch, merece la pena probarla.

NOTA:

lunes, 7 de mayo de 2012

Flying Dog Raging Bitch

MARCA: Flying Dog
MODELO: Flying Dog Raging Bitch
ESTILO: India Pale Ale americana (8'3% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Comencé a comentar las cervezas de Flying Dog con dos que no son, ni mucho menos, las mejores que elaboran, y en una de esas reseñas Max me recomendó Raging Bitch, su cerveza de celebración del 20 Aniversario. Quedó apuntado en mi memoria y cuando acudí a Líquidos a por mi dosis cervecil mensual, ante la duda de si repetir una Snake Dog IPA o probar ésta, decidí hacer caso al Filósofo y me la llevé a casa.

Al servirla en copa se presenta tan espectacular como el genial diseño de la etiqueta, bajo una abundante capa de espuma amarillenta cremosísima se oculta un líquido naranja oscuro, parduzco, de turbidez algo velada. Por si fuera poco, le basta el aroma para conquistarte, un conjunto exquisito de malta dulce y leve caramelo como base, y sobre ella intenso maracuyá, mango y curaçao, más secundarias y perfectamente acopladas melocotón, naranja y piña en almíbar, completado con un marcado toque de miel, flores y suave picante. Parece exagerado, pero me resultó simple y llanamente perfecta, y en cierto modo me recordó a las Witbier.

En boca es una oda al equilibrio cervecil, con un sabor bastante similar a lo percibido por el olfato: malta y caramelo de fondo, de nuevo se ven desbordados por frutas tropicales con un rico punto de naranja y recuerdos similares a cilantro, conformando un delicioso sabor dulce y ácido por igual. En vez de la brusquedad común a muchas IPA, en este caso los lúpulos Amarillo consiguen introducirse con discreción, transformando poco a poco ese dulzor en un amargor que acaba siendo de una intensidad importante, repleto de cítricos y flores, fuertemente especiado y que abre hueco para que se evidencie la levadura. Termina con un regusto amargo, muy lupulado, perfectamente nivelado y de duración ilimitada, consiguiendo una cerveza fácil de beber pese a sus casi 9º de alcohol y sin embargo suficientemente compleja. Al primer trago me pareció impecable, a los pocos minutos "solo" excepcional, así que finalmente la voy a dejar como casi perfecta... aunque puede que me arrepienta. De todas maneras me pregunto como sería recién salida de fábrica, pues a esta botella no le quedaba demasiado tiempo hasta la fecha de consumo preferente.

NOTA:

Actualizado por Sir Asf:


CARACTERÍSTICAS: Un poco al azar me hice con un ejemplar de esta archiconocida marca, dejándome llevar esta vez únicamente por el dibujo de su etiqueta. La elegida es la Raging Bitch, cuya criatura protagonista sería el resultado de un dibujo en pareja de Dalí y Francis Bacon. Como era de suponer, no ha tenido un mal resultado.

Luce un color dorado levemente bronceado a través del cual se ve todo, ya que es muy cristalino. La espuma es blanca algo manchada, y forma una capa esponjosa, duradera y abundante. El líquido que la sostiene no tiene carbonatación visible.

En el aroma se puede percibir enseguida una nota herbal, con delicioso lúpulo. Deja paso al toque floral y a la malta, que se presenta muy intensa. Es afrutado, pero muy delicadamente. Se entienden matices de melocotón, miel, almibar y muy en el fondo especias algo picantes. No se me asemeja tanto a una wit como esperaba al leer el comentario de Embracing, pero el cítrico y el herbal tocan la cima.

Tras esta presentación entra con ganas. El trago deja notas de malta dulce, que se entremezclan con el lúpulo, el toque afrutado y el herbal. Destaca la levadura y la naranja, aunque ese matiz cítrico adopta gran cantidad de formas. El alcohol complementa muy bien el trago, aunque enseguida se hace notar en la cabeza. El final es herbal, seco e intenso. El regusto es ardiente, afrutado y levemente amargo, dejando un paladar bastante ágrio, muy agradable.

Coincido con Embracing en el punto final: se presenta con fuerza, pero poco a poco va perdiendo un poco de fuelle. No obstante es una muy buena cerveza.

NOTA:



viernes, 4 de mayo de 2012

Guineu Sitges

MARCA: Guineu
MODELO: Guineu Sitges
ESTILO: Wheat Ale (5'1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Tenía ya ganas de publicar esta reseña para así terminar de una vez con las Guineu "básicas" que me mandaron de Cervezalandia, y no porque me estuviesen disgustando y fuese un suplicio beberlas, sino más bien al contrario, por poder comentar lo satisfactoria que ha sido la experiencia con ellas. Esta Wheat Ale que lleva el nombre del municipio barcelonés de Sitges, donde se celebra cada año un interesante festival internacional de cine, fue la última botella que ataqué, probablemente debido a lo poco que me habían hablado de ella. Una vez bebida, he de decir que me sorprende esta discreta popularidad puesto que, al menos en mi opinión, es de las cervezas más logradas de esta marca.

La luz que había ese día permite que la fotografía refleje su aspecto sin apenas distorsionarlo, mostrando un líquido de color dorado brillante que alberga una cascada inversa de burbujas, las cuales se dirigen a una masa de espuma blanca jabonosa y resistente como pocas. En el aroma se posicionan con la misma intensidad la malta y frutas como plátano y naranja, de forma que ninguna prevalece sobre la otra, quedando en un segundo plano notas de miel y levadura. Este empate lo terminan por resolver las especias, sobretodo clavo, que inclinan la balanza hacia las frutas, dejando al final reminiscencias de limón dulce.

Pese a no corresponder a este tipo de cervezas de trigo, resulta tan cremosa como una Weizen, aunque su dulzor es mucho más comedido. El grano, e incluso suave caramelo, están presentes, pero el papel protagonista durante el trago lo llevan cítricos, limón principalmente, y albaricoque. La acidez es continua, estable, hasta que al final se funde en el amargor herbal y especiado, dejando un delicioso regusto que persiste aún varios segundos en la boca. Es amena, fácil de beber y aun así muy sabrosa, todo lo que se puede pedir para un estilo que, sinceramente, los de Ca l'Arenys han bordado. Repetiré sin duda, y cuando lo haga probablemente la acompañe de un pescado a la plancha, que creo que puede dar buen resultado.


NOTA: