sábado, 5 de marzo de 2022

Tegernseer Dunkel Export

MARCA: Tegernseer
MODELO: Tegernseer Dunkel Export
ESTILO: Dunkel Lager (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: La cervecera Tegernseer elabora 6 cervezas de forma regular, además de 2 estacionales, y todas ellas se someten al proceso de lagerung. La fama de esta fábrica se debe principalmente a sus cervezas rubias, y más en concreto a la Helles, no obstante, puesto que esta la he bebido en varias ocasiones, en mi última visita a Líquidos decidí coger algunas de sus cervezas oscuras. La que presento hoy es su Dunkel Lager, estilo que adoro cuando viene de Franconia, y que suelo disfrutar si el origen es un poco más al Sur. Y con las credenciales de Tegernseer lo que me quedaba claro es que no iba a quedar decepcionado.

Es una Dunkel más bien rojiza, cristalina a pesar del color, con medio dedo de espuma beige de aspecto cremoso. En nariz es potente, dulce, maltosa, bastante acaramelada, con galleta y ciruelas maduras de fondo, aunque también se encuentran claras notas de frutos secos, sobretodo nueces caramelizadas. El lúpulo noble es muy aromático, e impregna el conjunto de mineralidad, con algunos toques herbales.

En boca cambia bastante el perfil, y no se encuentra la maltosidad que sugería el aroma sino que se centra en los tostados. Entrada de malta de tueste marcado, casi llegando al quemado, pan negro alemán y frutos secos, con discretas notas frutales de fondo, que arrastran un dulzor muy comedido. Se suman recuerdos de cacao en la evolución del sabor, para terminar en un final seco, mineral y bastante herbal. Se disfruta sin problema, y en mi caso repetiría con ganas, pero opino que le falta la redondez de los mejores ejemplos de este estilo y, sin estar mal, queda lejos de la mayoría de las Dunkel franconas. Pero diantres, es que el nivel en Baviera es muy alto.

NOTA:


Spaten Oktoberfestbier

MARCA: Spaten
MODELO: Spaten Oktoberfestbier
ESTILO: Märzen de Oktoberfest (5'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Poco a poco vamos avanzando con las cervezas oficiales de la Oktoberfest, siendo esta ya la cuarta que comento en el blog. Lo hago con bastante ilusión, a pesar de ser la marca de Munich que menos interesante me parece, porque en esta ocasión la fecha coincidió con el festival al que está dedicada, así que aproveché para hacer mi propio homenaje sirviéndome un par de botellas en un maß, que acompañó a la perfección una sesión de cine del maestro Billy Wilder. Huelga decir que, como su recipiente sugiere, esta no es una cerveza para tomar a sorbitos fijándose en los detalles, sino más bien para disfrutar en cantidades grandes... cuando no gigantes, como en este caso.

De color dorado intenso, algo más oscura de lo habitual, se oculta bajo una espuma blanca deslumbrante, que sin tener un volumen excesivo cuenta con una buena retención gracias al apoyo de una marabunta de veloces burbujas microscópicas. El aroma es muy clásico y bastante predecible, similar al de la original pero con algo más de malta y caramelo. Sin embargo, nada más servirla lo que más destaca son intensos recuerdos de cítricos y hierba fresca del lúpulo junto con minerales y cereal seco, que eclipsan con facilidad al resto. Es necesario que repose unos minutos para que puedan aflorar por fin la malta dulce, caramelo, toffee y suave manzana golden, que le dan un carácter algo mas goloso y contundente, como se requiere en una buena Märzen.

En boca se presenta con cuerpo medio, más que suficiente, y textura cremosa. El núcleo principal lo conforman la malta dulce, acompañada de marcadas notas de pan blanco, cereales, manzana verde, mínimo caramelo, adornado con leve miel y cítricos. El trago es largo y rápido, fresco, se bebe con facilidad, y termina en un amargor mineral, cítrico y herbal, con algún deje de flores blancas y fruta. Es una cerveza sencilla pero esto no es un defecto, no tiene demasiado sentido pedir complejidad en este estilo, y además permite terminarse un maß sin ningún problema. Durante años ha sido una cerveza que he considerado algo inferior en comparación con las otras 5 de la Oktoberfest, pero me temo que tengo que rectificar, creo que simplemente es algo menos contundente pero con un frescor adictivo.

NOTA:


martes, 1 de marzo de 2022

Puhäste Patt

MARCA: Puhäste
MODELO: Puhäste Patt
ESTILO: Porter (6'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estonia

CARACTERÍSTICAS: Tras estrenar las referencias de esta cervecera estonia con una colaboración con los rusos de AF Brew, sigo con su catálogo con el tipo de cervezas en las que brillan, las oscuras. En este caso comento Patt, una Porter de alta fermentación que por los lúpulos utilizados, Centennial y Willamette, y la graduación alcohólica, queda claro que mira hacia el otro lado del Atlántico.

Tiene un bonito color negro, brillante como el azabache, con una espuma densa de color beige oscuro que tras servirla se reduce a un anillo grueso adherido al vidrio. En nariz es exquisita, de alta intensidad, mezcla malta muy tostada y chocolate, infiltrados por frutas del bosque y ciruelas sobremaduras, con marcadas notas de café, un punto de regaliz negro e incluso algo de goma quemada. El lúpulo está pero delicado, aportando matices herbales que contrastan de maravilla con la oscuridad del aroma.

En boca no baja el nivel, es potente, con cuerpo y excepcionalmente sedosa. Comienza con malta muy tostada, sirope de chocolate y moras. Poco a poco se van haciendo espacio profundas notas de cacao, a las que siguen recuerdos de café espresso que se colocan a la misma altura. Termina en un final relajado, con torrefacto, lúpulo herbal, suave especia y un deje ahumado. Esta cerveza es armonía pura, perfectamente equilibrada, y con una cremosidad que pocas veces se encuentra. Vamos, que toca repetir si se puede.
 
NOTA:

domingo, 20 de febrero de 2022

Leikeim Urstoff

MARCA: Leikeim
MODELO: Leikeim Urstoff
ESTILO: Dunkel Lager (5'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Muy conocida por su popular Steinbier, de los pocos ejemplos de este estilo que se pueden encontrar, la cervecera Leikeim inició su actividad en 1887 en Altenkundstadt, en la Alta Franconia. El fundador fue Johann Leikeim, de profesión carnicero y tabernero, y actualmente es la 5º generación la que está al cargo. En este momento su repertorio cuenta con 10 cervezas distintas, y la que comento hoy es el estilo estrella de Franconia, una (otra) Dunkel.

A nivel visual no se le puede recriminar nada, es fantástica. Se trata de una Dunkel algo más oscura de lo habitual, totalmente opaca, de un color marrón roble. Tiene dos dedos de una espuma color beige, tan compacta que no se distinguen las burbujas, es una auténtica crema. Es muy aromática, más bien dulce, con dominio de malta tostada y sirope de caramelo, bien acompañada de frutas oscuras sobremaduras y llegando a aparecer algún recuerdo de dátiles. Tiene también una parte más sobria, que no predomina pero tampoco se disimula, con cacao y frutos secos caramelizados, con el broche del lúpulo mineral.

Curiosamente el enfoque cambia de forma radical en boca. Aquí se presenta como una Dunkel muy apoyada en los tostados, pudiéndose pensar en algún momento que incluso hubiese algo de torrefacto. De cuerpo medio, empieza con malta oscura, nueces, cereales y mínimo bizcocho, con un dulzor moderado que se apaga cuando entran notas de cacao y café. Final seco, con amargor herbal y terroso, y claros recuerdos de cacao puro y café que conforman el regusto. Estaría entre las Dunkel más secas que he probado, y mis favoritas tienden a hacer algo más de hueco a la malta, pero bien a gusto me bebería un par de jarras de esta, no hay nada que reprocharle.
NOTA:

jueves, 10 de febrero de 2022

De Molen Keulen & Aken

MARCA: De Molen
MODELO: De Molen Keulen & Aken
ESTILO: Weizenbock (9'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Países Bajos

CARACTERÍSTICAS: Aunque ahora ya nos hemos acostumbrado a su existencia, hace no tantos años De Molen era un referente a nivel mundial del fenómeno de la cerveza artesana. Esta fábrica, que debe su nombre al molino De Arkduif en el que se encontraban sus instalaciones originales, fue fundada por Menno Olivier en el año 2004. Su popularidad fue creciendo gracias a cervezas de excelente reputación como Hel & Verdoemenis, Vuur & Vlam, Amarillo o Rasputin, posicionándose entre las mejores cerveceras del mundo en diferentes listados, mientras algunas de sus elaboraciones recibían premios de reconocido prestigio. En el momento actual forma parte del gigante empresarial Swinkels, antes conocido como Bavaria, quien adquirió el 35% de la compañía en 2015 y el resto en el 2019, aunque según el equipo de De Molen sin forzar ningún cambio en el funcionamiento de sus instalaciones ni, por supuesto, en la calidad de las cervezas.

He bebido unas cuantas De Molen en mi vida, algunas repito con frecuencia, pero esta no la conocía hasta la fecha. Se trata de una Weizenbock, estilo que me gusta mucho, con unos respetables 9.2º de alcohol, y que tiene alguna versión envejecida en barrica tanto de vino como de bourbon. Es de un color oro brillante, más cercana a Weizenbock más claras como Vitus, casi totalmente opaca y con 2 dedos de una espuma blanca cremosa. En nariz no es excesivamente expresiva, se presenta sobretodo con malta cruda y toffee, y también son claras las notas de plátano y levadura. Más de fondo está manzana golden, un punto cítrico y delicado lúpulo terroso y herbal. No está mal pero tampoco es que acabe de definir del todo, y cuando la abrí empecé a temerme un intento fallido de emular un estilo alemán.

Nada más lejos de la realidad, en boca sale airosa del lance, siendo una cerveza bastante fiel al estilo aunque algo subida de potencia. Es de cuerpo más bien alto, con una textura cremosa, en parte gracias al trigo malteado. Igual que el aroma, empieza con abundante malta y caramelos de toffee, también destacan frutas muy maduras, entre ellas dulce de membrillo, plátano, manzana golden y algo de pera. Hacia el final salen notas de melocotón y miel, se potencia el plátano, y surge un amargor con el calor del alcohol, una acidez de naranja madura, especia picante, suaves minerales y hierba, quedando la fruta en el larguísimo regusto. Una cerveza de mucho nivel, quizá algo menos delicada que referencias alemanas, pero a cambio de ello es directa y potente, sin transgredir el equilibrio.

NOTA:

viernes, 4 de febrero de 2022

Rittmayer Annafest

MARCA: Rittmayer
MODELO: Rittmayer Annafest
ESTILO: Märzen de Annafest (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: A finales de Julio se celebra en Franconia, y más concretamente en Forchheim, el festival Annafest, en honor a Santa Ana, y que consiste, a grandes rasgos, en comer, beber y escuchar bandas de música. Al igual que sucede en la Oktoberfest, en esas fechas las cerveceras locales lanzan sus elaboraciones propias de la celebración, con frecuencia bajo el nombre Annafestbier. Esta que comento hoy está elaborada por Rittmayer, una cervecera familiar que este año cumple su 600 aniversario, y que se encuentra en el municipio de Hallerndorf, dentro del propio distrito de Forchheim. 

Sin rodeos: es una pasada de cerveza. Al servirla podría pasar por una Keller, de un color dorado intenso, algo turbia, con un par de dedos de espuma finísima, como una crema. Huele a distancia, a malta dulce apenas tostada, a panadería, suave miel, quizá algún recuerdo de mazapán, y abundante fruta madura, sobretodo manzana y plátano. Todo está envuelto por sugerentes notas florales del lúpulo noble, consiguiendo un aroma irresistible. 

A pesar de tener un trago delicado gracias a su textura sedosa, es una cerveza contundente, con cuerpo, que llena la boca de sabor. De nuevo domina la malta dulce, ligeramente acaramelada, con algún toque de toffee y miel, que se acompaña por frutas como las mencionadas anteriormente y un deje almibarado. El final es también suave, y sobre un fondo de masa de pan y levadura se genera un amargor delicado, floral, mineral y un poco cítrico, que recuerda a naranja madura. El arquetipo de cerveza redonda, mucho sabor y equilibrio perfecto. La verdad es que me ha parecido deliciosa, incluso más de lo que esperaba... fuerte candidata a cerveza del año, ¡y acabamos de estrenar febrero!

NOTA:

viernes, 28 de enero de 2022

Gulden Draak Smoked

MARCA: Gulden Draak
ESTILO: Gulden Draak Smoked
ESTILO: Quadrupel ahumada (10.5%)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Creo que debido una especie de nostalgia de la adolescencia tiendo a no dejar escapar ni una de las novedades de Gulden Draak, salvo quizá alguna que ha salido con un precio que juzgué excesivo. Y teniendo en cuenta mi adicción a las Rauchbier, no podía perderme la versión ahumada de esta cerveza, que salió a la venta en el año 2020 y se llevó la medalla de plata de los World Beer Awards 2021 en la categoría Smoked Beer. Es, por supuesto, una cerveza de alta fermentación, que nadie piense en Bamberg, aunque en su elaboración se emplea malta de cebada ahumada.

A la hora de abrirla hay que estar preparado porque nada más destapar la botella empieza a salir lentamente una espuma cremosa, compacta, de color beige marronáceo, que ocupa toda la altura de la copa al servirla. El líquido es muy turbio, de un marrón caoba con reflejos rubí al trasluz. En nariz tenemos como protagonistas dulce malta tostada, caramelo y ciruelas, todo ello bien empapado en el ahumado. En un segundo plano se notan recuerdos de mermelada de arándanos y chocolate, que aportan una mayor profundidad.

Contundente en boca, de cuerpo medio/alto y con mucho sabor. En la entrada se presentan malta tostada, pan negro alemán, mazapán y caramelo, acompañados de ciruelas y cacao, con un dulzor quizá algo menos prominente que en cervezas de este estilo. Poco a poco surgen notas de moras y cerezas picotas, también el humo empieza a asomar la pata. Final cálido, no parece que se pretenda disimular el alcohol, con un amargor herbal y algo de especia picante. Es aquí donde el ahumado destaca, con un carácter un poco goloso, como de brasa, y se mantiene como protagonista de un regusto largo y licoroso. No es un ahumado tan potente como el de una Rauchbier pero sirve para dar un punto diferente a esta cerveza clasiquérrima. A mí estas modificaciones me gustan mucho, sobretodo cuando se hacen sin perder la esencia de la cerveza original, como es el caso. Los amantes de las belgas pueden atacar sin ningún miedo, salvo el miedo a no poder coger el coche.
NOTA: