MODELO: Leffe Brune
ESTILO: Brune (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica
CARACTERÍSTICAS:
Feliz año, ante todo, a los compañeros cerveceros y a quienes siguen el blog. Como comentaba Embracing en el último post de La Ronda, nuestras Navidades no han sido regadas con mucha cerveza especial, que digamos, ya que las otras bebidas que se han ganado a lo largo del tiempo el honor de acompañar a las cenas de Navidad, aún no han sido desbancadas (no por mucho tiempo, esperemos). Hoy hablo de la Leffe Brune, que acompañó los "restos" (que no fueron pocos) del día después de Navidad. NOTA: Que por cierto, a ver si pido unas copas a los reyes, que en casa de mis padres no hay, y tengo que tirar de cualquier cosa.
Originaria de Notre Dame de Leffe, abadía que a lo largo de la historia ha experimentado numerosos vaivenes, hasta el principio del S.XX, que fue cuando los monjes se asentaron en ella definitivamente. Más adelante, la macrocompañía InBev compra la licencia, y actualmente es en la cervecera de Stella Artois donde se producen las variedades Leffe. Pese a que tras leer esto nos podamos llevar las manos a la cabeza y pensemos "os la habéis cargado", es una cerveza interesante que perfectamente puede ser elegida para disfrutar de su sabor, o al menos así lo creo yo.
Color oscuro con tintes rubí y marrón, y una espuma beix abundante, hacen tomar presencia a la Leffe Brune. Su aroma es suave con leves matices afrutados, que preparan un trago bastante completo. Muy buen cuerpo y un sabor tostado y maltoso, sobre el que destaca el alcohol (6'5% que se sienten con fuerza) dejando un regusto algo ácido con un final amargo.
Quizás no llegue al nivel de una tostada de abadía de degustación personal, pero es muy rica de charla con amigos, perfecta para acompañar carnes con salsa, no veo muchas desventajas.
Originaria de Notre Dame de Leffe, abadía que a lo largo de la historia ha experimentado numerosos vaivenes, hasta el principio del S.XX, que fue cuando los monjes se asentaron en ella definitivamente. Más adelante, la macrocompañía InBev compra la licencia, y actualmente es en la cervecera de Stella Artois donde se producen las variedades Leffe. Pese a que tras leer esto nos podamos llevar las manos a la cabeza y pensemos "os la habéis cargado", es una cerveza interesante que perfectamente puede ser elegida para disfrutar de su sabor, o al menos así lo creo yo.
Color oscuro con tintes rubí y marrón, y una espuma beix abundante, hacen tomar presencia a la Leffe Brune. Su aroma es suave con leves matices afrutados, que preparan un trago bastante completo. Muy buen cuerpo y un sabor tostado y maltoso, sobre el que destaca el alcohol (6'5% que se sienten con fuerza) dejando un regusto algo ácido con un final amargo.
Quizás no llegue al nivel de una tostada de abadía de degustación personal, pero es muy rica de charla con amigos, perfecta para acompañar carnes con salsa, no veo muchas desventajas.
NOTA:
Lo probe una vez recomendado, la leffe bruin y no he dejado de tomar esta marca,no sabia de la tradicion Belga de cerveza pero recomiendo esta leffe bruin a todos los amantes de la cerveza negra.
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