MODELO: Kaiserdom Urtyp Hell
ESTILO: Münchner Hell (4'7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania
CARACTERÍSTICAS: Esta fue la última cerveza de Kaiserdom que me llevé a casa, dando por hecho además que no me llevaba nada impresionante, aunque tampoco tenía la menor duda de que no sería un mal producto a juzgar por las experiencias ya habidas. Curiosamente, y al igual que las otras dos que ya hemos comentado aquí, en la página web de la fábrica no se la menciona ni de pasada... o al menos yo no he encontrado referencia alguna, fenómeno que no acabo de explicarme.
Dejando este tema aparte, la verdad es que la cerveza no ofrecía nada más allá de lo esperado aunque tampoco se le podría achacar defecto alguno. Es dorada brillante, adornada con un torrente de burbujas que recorren todo el vaso para formar una espuma blanca resplandeciente, de la cual surge un aroma dulce de intensidad media. Este recuerda mucho a miel y limón mientras que la malta se queda en un plano algo más secundario, aunque sin pasar desapercibida. Se aprecia también un suave picante, y con fuerza completa el conjunto notas florales y más leves herbales, con un resultado muy satisfactorio.
La moderación es la principal característica de esta cerveza, tanto en intensidad de sabor como en cuerpo se mantiene en un punto medio, mientras a su paso por boca aparecen matices muy similares a los percibidos por el olfato. Destacan malta y miel, se suma un toque de limón y sin perder un instante lúpulo floral y herbal. Este último se mantiene mientras surge un suave amargor que deja la boca algo seca, con leves recuerdos de hierba, cítrico y picante. No es una cerveza compleja ni tiene nada que la sitúe por encima de cualquier otra rubia, sin embargo, y pese a ser la que menos interesante me ha parecido de esta marca, he de reconocer que está muy bien hecha y que no he tenido dificultad alguna para disfrutarla.
Dejando este tema aparte, la verdad es que la cerveza no ofrecía nada más allá de lo esperado aunque tampoco se le podría achacar defecto alguno. Es dorada brillante, adornada con un torrente de burbujas que recorren todo el vaso para formar una espuma blanca resplandeciente, de la cual surge un aroma dulce de intensidad media. Este recuerda mucho a miel y limón mientras que la malta se queda en un plano algo más secundario, aunque sin pasar desapercibida. Se aprecia también un suave picante, y con fuerza completa el conjunto notas florales y más leves herbales, con un resultado muy satisfactorio.
La moderación es la principal característica de esta cerveza, tanto en intensidad de sabor como en cuerpo se mantiene en un punto medio, mientras a su paso por boca aparecen matices muy similares a los percibidos por el olfato. Destacan malta y miel, se suma un toque de limón y sin perder un instante lúpulo floral y herbal. Este último se mantiene mientras surge un suave amargor que deja la boca algo seca, con leves recuerdos de hierba, cítrico y picante. No es una cerveza compleja ni tiene nada que la sitúe por encima de cualquier otra rubia, sin embargo, y pese a ser la que menos interesante me ha parecido de esta marca, he de reconocer que está muy bien hecha y que no he tenido dificultad alguna para disfrutarla.
NOTA:
Muy generoso te veo, a mí me pareció una cerveza tirando a mediocre, amarga y sosa, sin caracter. Ya que se molestan en montar la feria (algo de agradecer) podían traer productos más destacables(algo de esperar), no queda sino comprarle una Vitus a Maese Ignatius para el mal sabor de boca. Un saludo.
ResponderEliminarBueno, mientras Ignacio ande por acá que traigan lo que les de la gana :)
ResponderEliminarA mí esta sí que me gustó, sin ser la bomba pero no tuve ningún problema con ella.
Saludos
Bastante regulera,tirando a floja, sin carácter diría yo, esperaba más tanto de esta casa como de la feria de Europa del Corte Infiel jejeje, la verda que hasta ahora de "las nuevas" que trajeron me quedo con la Kellerbier también de Kaiserdom, un tirón de orejas para el comercial que trae la cerveza por no mimar y probar el producto antes de venderlo jeje
ResponderEliminarHaya Salud
Señor Chela por estos lares, cuánto honor :)
ResponderEliminarComo ya dije, pasó sin pena ni gloria por mi garganta. Sin embargo la Keller me triunfó (aún me queda una en la alacena, pero ya oigo un requiem por ella...), así como la Weltenburger Asam Bock. Por cierto, la Alt-Bamberg no estaba a 1,20, sino a 1,42 (me tentaste y me fui a comprar una).
ResponderEliminarUn abrazo,
Jose
A mi que las alemanas me dan un ligero sabor suave... Me suelen parecer muy similares ,dados sus tipos, claro esta ,pero raro es ver alemanas que no sean lager o weiss( trigo)
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