MODELO: Ramée Amber
ESTILO: Abbey Tripel (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica
CARACTERÍSTICAS: Me anima encontrar una de esas prometedoras cervezas belgas de abadía en la despensa, porque muy pocas veces son las que salga decepcionado con una de ellas. Aunque quisiera, no podría ser objetivo. Realmente me pierden.
En este caso topamos con la Ramée Ambree, de la abadía de Brunehaut.
La granja de la abadía de Ramée está situada en Jauchelette, en Brabant Wallon. Se trata de una antigua abadía cisternina de 1215, ahora completamente redecorada, donde todavía vive una comunita de monjes. Todavía hoy son cervezas que están hechas según la receta original de comienzos del siglo XIII, que ha pasado de generación en generación por los monjes.
La Ramée Amber luce un color ocre oscuro, cristalino, con tonos anaranjados, en el que se aprecia una carbonatación media. Su espuma es blanca y cremosa, de duración estable. El aroma es muy floral y afrutado, con presencia de malta y levemente de regaliz. También está presente ese toque alcohólico en su justa medida, que presagia un trago poderoso.
El trago es menos pesado de lo esperado, con un sabor que deja entrever notas afrutadas y cítricas, con base maltosa y de alcohol. El final, herbal y especiado, deja la boca hormigueante, con un regusto amargo. Al completo una cerveza equilibrada y suave.
En este caso topamos con la Ramée Ambree, de la abadía de Brunehaut.
La granja de la abadía de Ramée está situada en Jauchelette, en Brabant Wallon. Se trata de una antigua abadía cisternina de 1215, ahora completamente redecorada, donde todavía vive una comunita de monjes. Todavía hoy son cervezas que están hechas según la receta original de comienzos del siglo XIII, que ha pasado de generación en generación por los monjes.
La Ramée Amber luce un color ocre oscuro, cristalino, con tonos anaranjados, en el que se aprecia una carbonatación media. Su espuma es blanca y cremosa, de duración estable. El aroma es muy floral y afrutado, con presencia de malta y levemente de regaliz. También está presente ese toque alcohólico en su justa medida, que presagia un trago poderoso.
El trago es menos pesado de lo esperado, con un sabor que deja entrever notas afrutadas y cítricas, con base maltosa y de alcohol. El final, herbal y especiado, deja la boca hormigueante, con un regusto amargo. Al completo una cerveza equilibrada y suave.
NOTA:
Pues leo el comentario y luego veo la puntuación y no parecen casarme, me la esperaba más alta.
ResponderEliminarAunque no conozco esta en cocreta, las belgas de abasía también son del estilo de las que me gustan a mi. Hoy precisamente he probado una, la Postel Dubbel, y estaba realmente buena.
Ciertamente me resultó una cerveza agradable, pero nada del otro mundo. Estos estilos son geniales, pero he probado otras cervezas de abadía más interesante. Lo de la nota es meramente decorativo, no me llama mucho el poner puntuaciones.
ResponderEliminarHabrá que hacerse con una Postel.
Un saludo.
Sí, la verdad es que lo de poner una nota final a mi me suele costar.
ResponderEliminar¿Sería muy osado pedirte una crítica a mi estilo? Acabo de colgar un post sobre la Postel, pero siempre me queda la sensación de no transmitir correctamente lo que realmente despierta la cerveza cuando la tomo.
Saludos.
Yo la probe en Cebada ,hace tiempo ,aqui en Zaragoza. Es una buena cerveza. Es una pasdada la cantidad de belgas que trae cada mes y medio ,mas o menos. Me conto que se las traia una distribuidora de aqui ,pero con mi memoria se me olvido el nombre
ResponderEliminarGracias por pasarte, y por la crítica. Viniendo de quien viene, me ha hecho mucha ilusión.
ResponderEliminarUn placer, a seguir con el entusiasmo :)
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