MODELO: Lervigs Jul
ESTILO: Brune de Navidad (6'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Noruega
CARACTERÍSTICAS: Entre los elevados precios de Noruega y los portes de este país no perteneciente a la Unión Europea, beberse una cerveza de este país supone un desembolso importante de dinero, superior a lo que estoy dispuesto a gastarme en una botella salvo en muy contadas ocasiones. Esto, sumado a las pocas marcas que llegan habitualmente a la Península, es la causa de que hasta que Gabriel de Zombier nos mandó esta cerveza junto con su correspondiente vaso como regalo navideño solo hubiese probado una cerveza de este país, la espectacular Dark Horizon de Nøgne Ø, detalle en esa ocasión de Ana. Está elaborada por Lervig, una pequeña cervecera de Stavanger, en el Sur de Escandinavia, en funcionamiento desde el final del 2007, aunque sus cervezas se comenzaron a producir en Agosto del 2005 en la Mack Bryggeri, en Tromsø.
La que nos envió Gabriel es la navideña de la fábrica, que tiene la cualidad, según los elaboradores, de garantizar la vuelta de Santa Claus al año siguiente si se le deja un vaso al alcance. Es muy opaca, de color marrón oscuro algo oxidado, y genera al vertirla un par de dedos de espuma beige, de los que persiste hasta el final al menos medio centímetro. Desprende un aroma dulce, casi palpable, de malta tostada y caramelo, recubiertos por toffee y sirope. Al instante asciende, desviando la atención, un perfume de anís estrellado eclipsando notas más moderadas de regaliz negro, cereza picota y licor. El lúpulo, con un papel más bien discreto, se encarga de atenuar tanto dulce con un suave frescor algo herbal.
De cuerpo medio en boca y muy sabrosa, se junta de nuevo una dulce base de malta tostada, sirope de caramelo, acompañada de notas de cereza, frutas maduras, suave regaliz y licor. El anís está presente en todo el trago, pero en vez de estorbar como en alguna otra cerveza navideña armoniza los sabores, los junta en una sola entidad. El amargor final llega con tranquilidad, pero una vez instaurado es firme, algo arisco en la garganta, y desprende durante el tiempo que queda enganchado notas de naranja, anís, otras especias picantes y mínima hierba. Deja un regusto algo alcohólico, que deja los sabores agarrados al fondo de la garganta durante unos segundos más. Como bien la definen sus responsables, es una cerveza cálida, perfecta para crear una atmósfera navideña. Me gusta también lo bien que controla el anís, que si bien es un ingrediente que puede arruinar una cerveza si no se tiene demasiada habilidad en su manejo, cuando se emplea de forma adecuada puede crear elaboraciones muy interesantes. Mil gracias, Gabriel, por el detalle.
NOTA:
Anda, pues no me hubiera imaginado nunca que sólo hubieses probado una noruega... Aunque Dark Horizon es mucha cerveza... ;)
ResponderEliminarEn cuanto a Lervig, es la demostración de que no todo lo que viene de los países nórdicos tiene que ser caro, además con un muy buen nivel. Si te animas con alguna más, te recomiendo la Konrads Stout y la Hoppy Joe.
Saludos!
Uf pues a mi me saturo un poco tanto anís, para mi si que tapaba todo lo demás.... olía a rosquilla jejej
ResponderEliminarPau:
ResponderEliminarCon lo que me ha gustado esta me animaré, claro está. Con las noruegas lo que me ha pasado hasta ahora es que, a pesar de apetecerme probar una Haand o una Nøgne Ø, siempre tengo al alcance cervezas también muy interesantes pero a mitad de precio. Tengo por casa la Pale Ale de Nøgne Ø gracias a que se la pille rebajada a Gabriel, si no, ni eso.
Observatorio:
No hay más que atacar Gouden Carolus Christmas o, por ejemplo, la de navidad de Montseny, para ver lo que es una cerveza bien cargada de anís. Y tampoco me parecen terriblemente descompensadas, lo justo para una cerveza de este tipo.
Saludos a ambos