MARCA: Anderson Valley
MODELO: Anderson Valley Winter Solstice Seasonal Ale
ESTILO: Winter Warmer de Navidad (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos
CARACTERÍSTICAS: Como no podía ser menos, esta cervecera alimentada únicamente por energía solar también se apunta a la moda de las cervezas de temporada, pero en su caso, en vez de dedicar su elaboración a Santa Claus o a la Navidad, ellos prefieren celebrar, como si de paganos se tratasen, el día más corto del año. Así, han conseguido crear una de las cervezas invernales estadounidenses más populares, una Winter Warmer llamada Winter Solstice, cuya fama es casi comparable con la de la Our Special Ale de Anchor, que comenté hace escasos días.
El momento de tomarla fue casi tan especial como el Solsticio de Invierno o puede que incluso más, puesto que había decidido que sería mi acompañante durante el último capítulo de The Wire, serie fascinante donde las haya. Exhibe un traje pardo anaranjado con algún brillo amarillento, protegido por una fina capa de espuma beige que desaparece por completo en segundos, no quedando el más mínimo rastro en la superficie de la copa. Un aroma de intensidad media, dulzón y frutal, se escapa de la copa reptando. Dominan en él notas de orejón de melocotón, ciruelas pasas, toffee y abundante caramelo, con dátiles, naranja y un deje de miel más secundarias. Todo esto se sostiene sobre un fondo algo mantequilloso, con medidos recuerdos de crema y vainilla, mientras el conjunto es ornamentado por dejes de canela y flores.
Me pareció un deleite tener un dulzor tan agradable y tanta cremosidad en nariz, y casi rezaba porque se mantuviese en boca. Supongo que normalmente los dioses tienen cosas más importantes de las que ocuparse que de estas plegarias, pero quizá por las fechas parece que se me escuchó, y la sensación del sabor era muy similar. De nuevo se detecta ese fondo de mantequilla derretida, mezclado con caramelo, suave vainilla y canela. Poco a poco se introducen notas de naranja, que pueden recordar al Cointreau al apoyarse en el dulzor de la malta, y después frutas maduras como las mencionadas en el aroma, que envuelven el trago. Concluye con un amargor medio, en el que se combina la fruta con algo de especia picante, malta, suave miel y un medido toque de alcohol, que potencia ligeramente la astringencia. Quizá un poco más de cuerpo no le habría venido mal, lo que no quita que sea una cerveza excelente para temperaturas bajas gracias al reconfortante paso que tiene por boca, cálido y profundo.
Me ha parecido excelente, dulce pero muy agradable,sin llegar a empalagar, y con cantidad de matices.
ResponderEliminarMe llama la atención lo de la poca espuma, a mi se me mantuvo una fina capa casi todo el tiempo. También dependerá del vaso, yo la probé en un vaso teku.
un saludo!
El otro día la estaba probando un amigo y le sustraje un trago y me sorprendió su dulzura mucho me pareció muy curiosa y las tengo fichada para próximas catas!!
ResponderEliminarPuedo entender que a alguien no le guste, es una cerveza bastante peculiar y el dulzor puede hacerse excesivo para algunos. No es mi caso de todas formas, a mí me ha parecido muy bien equilibrada, dentro de lo esperable para el estilo.
ResponderEliminarCristobal:
Supongo que tendrá que ver con el tipo de vaso, el mío quizá no era el que más favorece la retención. De todas maneras, lo que está claro es que la espuma no abundaba.
Un saludo a ambos
Muy buena cerveza. Me gusta el dulzor acaramelado pero comedido junto con el toque a galleta o mantequilla, bien equilibrada. Me parece perfecta para merendar jaja.
ResponderEliminarSaludos!