sábado, 6 de junio de 2015

St. Bernardus Extra 4

MARCA: St. Bernardus
MODELO: St. Bernardus Extra 4
ESTILO: Blonde (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Con menor graduación alcohólica y con algo más de lúpulo que las demás cervezas de esta fábrica, Extra 4 era inicialmente producida para el consumo de los monjes encargados de la elaboración, hasta que en los años 70 se abandonó su producción. Por suerte, en el 2014 los responsables de St. Bernardus decidieron recuperar esta cerveza, y los seguidores de la marca pudimos disfrutarla desde el verano de ese año. De las que compré cuando salieron a la venta tenía planeado desde el principio guardar al menos una para comentarla en este blog porque, a no ser que me haya pasado desapercibida alguna novedad, con esta reseña completaríamos todas las referencias de esta cervecera clásica que se encuentran disponibles en la actualidad... y eso siempre hace un poco de ilusión. Así, en cuanto el tiempo me pareció más apropiado para una cerveza de este estilo, la utilicé para acompañar una tarde de lectura.

Es de un color amarillo brillante, dorado, con un torrente de carbonatación que impulsa una cremosa espuma resplandeciente que no se inmuta ante el paso del tiempo, manteniendo siempre el mismo volumen. Su aroma es intenso, fresco y muy agradable. Se combinan en él grandes cantidades de fruta, mezcla de cítricos, llegando a recordar al yogur de limón, con manzana verde y pera, sobre un fondo de cereal crudo, pan, paja, y azúcar candy. Por último evidente lúpulo noble alemán y notas de especias picantes, destacando clavo, son los encargados de afilar el perfume y darle una orientación totalmente esperable.

Entrada en boca ligera y rebosante de fruta, de nuevo con una importante carga cítrica, acompañada por notas de manzana golden y más suaves pera y uva blanca. También sustentada por cereal crudo, a medida que avanza el trago este se potencia, el cuerpo se manifiesta en todo su esplendor, surge la carbonatación y gana presencia también la dulce malta, colocándose a la misma altura que los cítricos aunque sin quitarle un ápice de frescor. Final de amargor medido, bien provisto de lúpulo cítrico y herbal, recuerdos de levadura belga y especia picante, principalmente clavo, concluye con rapidez para dejar hueco al siguiente trago. Sencilla pero muy completa, una grandísima cerveza de St. Bernardus, sin nada que envidiar a sus elaboraciones más reputadas. No me extraña que fuese de las habituales de los monjes porque con gusto la mantendría de forma permanente en tirador de mi cervecería habitual.

NOTA:

4 comentarios:

  1. Sin lugar a dudas St. Bernardus es una de las más grandes, hace poco volví a catar su Pater tras muchos años sin haberla probado, y me pareció igual de rica...

    Esta no la he probado, pero si tengo ocasión, cae seguro...

    Un saludo.

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  2. Yo la recomiendo mucho. La receta está afinadísima, no se sale un milímetro del estilo de St. Bernardus y entra como agua, sobretodo en días calurosos; a gusto me habría bebido medio litro.

    ¡Saludos!

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  3. Poco he probado de ellos, pero son todo un referente.

    Me la apunto!

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  4. No te apuntes esta, Rul, apúntate todas las de la fábrica y decide cuál te gusta más. Yo incluiría también Grottenbier, una Brune fantástica.

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