MODELO: Andechs Doppelbock Dunkel
ESTILO: Doppelbock (7'1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania
CARACTERÍSTICAS: Muy cerca de Munich se encuentra la abadía benedictina de Andechs, famosa por ser en su capilla donde descansan los restos del célebre compositor Carl Orff y también por dar su nombre a las cervezas que allí se elaboran. Hacía bastante tiempo que no veía por Zaragoza ninguna Doppelbock aparte de Paulaner Salvator y EKU28, y esta última no la soporto por lo que mi capacidad de elección dentro de este estilo era nula, así que en cuanto tuve un par de botellas a mi alcance no tuve que pensármelo demasiado.
La primera fue Buronator de Aktien Brauerei, de la que no tengo queja posible, la verdad es que no estaba nada mal, y me reservé esta para comentarla aquí por ser una marca no tan conocida. De color marrón pardo con reflejos anaranjados, algo turbia, daba la impresión de ser una cerveza muy densa por las escasas burbujas que ascendían hacia la superficie, y el intensísimo y dulce aroma no hizo sino confirmarlo. El núcleo de este lo conforman toneladas de caramelo y azúcar moreno, acompañados por malta algo tostada y bizcocho, a lo que se suman ciruelas, pasas, té negro, recuerdos de dátiles que parecen destacar un poco por encima del conjunto, más leves notas de chocolate con leche, un mínimo toque de picante, y cierto frescor que aporta el lúpulo, aunque sin modificar demasiado el aroma.
Feliz por encontrar semejante complejidad, le di un sorbo y mi primer pensamiento fue "esto no es líquido". Presenta desde el inicio un cuerpo impresionante, a rebosar de malta e incluso aún más caramelo, con fuerza también acompañan frutas oscuras y dátiles, marcadas notas de azúcar moreno, té negro y bizcocho, y más de fondo cacao, todo esto mezclandose de forma sublime. Es muy dulce, sin duda, pero este sabor es controlado a la perfección por un medido amargor algo herbal, que sin interrumpir el ritmo conduce a un regusto larguísimo, para dejar en boca caramelo y dátiles. El único temor que tenía era que la presencia del alcohol fuese excesiva, sin embargo este se ve absorbido por completo por la malta, consiguiendo así una Doppelbock tan compleja, densa y a la vez equilibrada que no puedo sino considerarla mi favorita del estilo. Además, en botella de 50cl, ¿qué más se puede pedir?
La primera fue Buronator de Aktien Brauerei, de la que no tengo queja posible, la verdad es que no estaba nada mal, y me reservé esta para comentarla aquí por ser una marca no tan conocida. De color marrón pardo con reflejos anaranjados, algo turbia, daba la impresión de ser una cerveza muy densa por las escasas burbujas que ascendían hacia la superficie, y el intensísimo y dulce aroma no hizo sino confirmarlo. El núcleo de este lo conforman toneladas de caramelo y azúcar moreno, acompañados por malta algo tostada y bizcocho, a lo que se suman ciruelas, pasas, té negro, recuerdos de dátiles que parecen destacar un poco por encima del conjunto, más leves notas de chocolate con leche, un mínimo toque de picante, y cierto frescor que aporta el lúpulo, aunque sin modificar demasiado el aroma.
Feliz por encontrar semejante complejidad, le di un sorbo y mi primer pensamiento fue "esto no es líquido". Presenta desde el inicio un cuerpo impresionante, a rebosar de malta e incluso aún más caramelo, con fuerza también acompañan frutas oscuras y dátiles, marcadas notas de azúcar moreno, té negro y bizcocho, y más de fondo cacao, todo esto mezclandose de forma sublime. Es muy dulce, sin duda, pero este sabor es controlado a la perfección por un medido amargor algo herbal, que sin interrumpir el ritmo conduce a un regusto larguísimo, para dejar en boca caramelo y dátiles. El único temor que tenía era que la presencia del alcohol fuese excesiva, sin embargo este se ve absorbido por completo por la malta, consiguiendo así una Doppelbock tan compleja, densa y a la vez equilibrada que no puedo sino considerarla mi favorita del estilo. Además, en botella de 50cl, ¿qué más se puede pedir?
NOTA:
SOLO puedes pedir beberla donde se hace
ResponderEliminarNo quiero ni imaginar como estará esta cerveza directamente en la fábrica, me aterroriza.
ResponderEliminarAún no he probado una doppelbock (ni eisbock) de mi gusto, ¡algún día pondré mi zarpa sobre esta! :)
ResponderEliminarA mí me costó que me entrase la dichosa Paulaner Salvator, al principio no podia tragarla. Eso sí, una vez superada esa cerveza ninguna otra me ha supuesto problema (salvo EKU28, de verdad que no entiendo por qué es buena)
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