viernes, 19 de julio de 2019

Ebensfelder Adam Riese Urtrunk

MARCA: Ebensfelder
MODELO: Ebensfelder Adam Riese Urtrunk
ESTILO: Dunkel Lager (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Si uno se mete en un Getränkemarkt de Franconia y selecciona unas cuantas botellas de cerveza al azar, no es raro que se encuentre con varias elaboradas por fábricas centenarias independientes. Es el caso de Ebensfelder, fundada en el año 1752 en la localidad que le da nombre, un pueblo de apenas 6.000 habitantes a pocos kilómetros de Coburgo. En su catálogo cuentan con al menos 6 cervezas distintas de estilos clásicos bávaros, entre ellas esta Dunkel de diseño tan elegante que comento hoy, que posiblemente fue uno de los motivos que me llevó a comprarla. Se empezó a elaborar en 1992, en conmemoración del 500 Aniversario del nacimiento de Adam Ries, un famoso matemático bávaro originario de Bad Staffelstein, al Norte de Ebensfeld.

Es una cerveza de color marrón pardo, rubí al trasluz. Apenas un dedo de espuma beige cremosa surge al servirla, pero tiene buena retención y queda en todo momento una membrana en la superficie. Es potente en nariz, teniendo en cuenta el estilo, y bastante compleja. Combina malta tostada, intenso caramelo oscuro, más suave frutos secos, algo de sirope y azúcar moreno, con fruta muy madura, sobretodo pasas, ciruelas y claros recuerdos de dátiles. El lúpulo tiene un acentuado carácter herbal, también con notas cítricas y terrosas, que aportan cierto frescor.

El sabor mantiene registros similares a los del aroma, aunque decantando el conjunto hacia los tostados, de forma que se limita el dulzor. De cuerpo medio, y muy potente, abre el trago con malta tostada, cereales oscuros, pan integral y suave caramelo. El papel de las frutas oscuras es mucho más comedido, en favor de frutos rojos, ciruelas y cítricos, que liman las aristas de los tostados. Un amargor muy marcado destaca al final, con una generosa ración de hierba del lúpulo, intensas notas de limón, suave especia picante y minerales, quedando tostados y un punto de caramelo en el regusto. Cada una con su personalidad, pero todas las Dunkel franconas que pruebo son una maravilla. Esta es quizá un poco más seca, con bastante lúpulo y mucha carga de tostados, pero igual que siempre el equilibrio es impecable y la jarra parece que se vacíe sola.

NOTA:

No hay comentarios: