martes, 27 de junio de 2017

The Orkney Skull Splitter

MARCA: The Orkney
MODELO: The Orkney Skull Splitter
ESTILO: Scotch Ale (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Escocia

CARACTERÍSTICAS: Orkney Brewery, situada en las islas a las que hace referencia su nombre, es una de las cerveceras escocesas más asentadas y de mayor renombre. Fue fundada en 1988 en Sandwick por Roger White, en el 2002 se fusionó con Atlas Brewery para formar Highlands and Islands Breweries, y por fin en el 2006 fue comprada por Sinclair Breweries Ltd. Esta botella llegó a mis manos por cortesía del nuevo fichaje para el blog e ilustre miembro de La Cofradía del Lúpulo, Iñaki, quien tuvo a bien guardarme una de las botellas que consiguió (gracias).

He necesitado que refrescase el tiempo para abrir esta botella, puesto que recordaba perfectamente de mis vacaciones en Escocia el tipo de cerveza al que me estaba enfrentando. Es una Scotch Ale marrón rojiza, relativamente transparente y con reflejos granates, protegida por una espuma abundante y compacta de color beige, muy duradera. Su presentación en nariz es deliciosa, un penetrante torrente de malta, toffee y caramelo, de una densidad impresionante, fusionado con intensas notas de dátiles e higos. Como soporte quedan cereal y frutos secos, principalmente nuez, mientras que un marcado perfume cítrico del lúpulo, con dejes herbales y terrosos, alivia un poco el conjunto.

El sabor todavía se hace más pesado, y gana en complejidad. Irrumpe malta muy quemada, densa y cálida, con toneladas de caramelo oscuro y pasas, y más suave dátiles, ciruelas y guindas. El cuerpo no puede ser más contundente, la carga de malta es impresionante. A medida que avanza el trago sale la sequedad de los frutos secos, pan de centeno, bollo, mantequilla e incluso un punto de cacao. En el final aparece el alcohol, cálido y muy especiado, y también un generoso soplo de lúpulo británico, herbal, ligeramente cítrico y con algún recuerdo medicinal. Es una cerveza de las que no se pueden dejar pasar, pero por otro lado más vale atacarla con calma y paciencia, contando con que no es para tomársela en 20 minutos. En mi opinión de lo mejorcito de las Islas Británicas, aunque sin dejar muy atrás otras referencias de esta fábrica.

NOTA:

domingo, 25 de junio de 2017

Cervecería en Burgos: La Vache Folle

A pesar de que los 5 años que he vivido en Pamplona me han servido para echar raíces y decidir que antes o después me gustaría residir en Navarra, la verdad es que mi reciente traslado a Burgos tampoco me supuso una tragedia. Lo que sí que me intrigaba (el verbo "preocupar" me parece excesivo en este contexto) era el aspecto cervecil, puesto que en Pamplona tenía como tienda habitual "La Vinoteca", como cervecería de cabecera "La Modelo", y como fábrica predilecta "Naparbier"... y en Burgos no sabía qué me iba a encontrar. Por suerte contaba con la ayuda de la página que tantas veces me ha resuelto circunstancias similares, Localbier, que me indicaba que a pocos metros de mi nueva casa se encontraba una cervecería con un número de referencias considerable: La Vache Folle.

Cuando me metí en su página web vi que se trataba de una cervecería especializada en queso, otro de mis vicios, así que tan pronto como pude me pasé para comprobar si era tan buen sitio como parecía. El local es bastante amplio, con una barra con 6 grifos a la izquierda y detrás una pizarra indicando las cervezas pinchadas, varias mesas a la derecha con algunas pizarras colgadas en la pared indicando los quesos disponibles, y un espacio abierto al fondo con dos neveras repletas de botellas diferentes, tanto locales como de importación, y una diana de dardos. Esta primera vez que estuve la afluencia era bastante importante, sin embargo el ruido no era excesivo en absoluto y se podía hablar con total tranquilidad, lo que me pareció un punto muy favorable.

Los dueños, además de muy majetes, parecen saber bastante de cerveza, a tenor de las recomendaciones que me han hecho hasta el momento y de una conversación con un cliente homebrewer que no pude evitar escuchar parcialmente. También conocen bien los 10-12 quesos diferentes que suelen tener disponibles, que van desde curados nacionales hasta europeos más blandos. Por último, en cuanto a precios, las cervezas de botella están francamente bien; las fijas de barril, Löwenbräu y Leffe están regaladas (2'5 euros y 3'5 euros la pinta respectivamente); mientras que las que rotan varían en función de la marca, aunque sí que hay alguna que llega a un precio algo elevado para mi gusto... imagino que esto depende más de la fábrica que del propio local.

En mi opinión una de las mejores cervecerías del país, y sin duda la mejor de Burgos. Recomendadísima para todo el mundo, y más aún para los amantes del queso.

sábado, 17 de junio de 2017

Fuller's Vintage Ale 2011

MARCA: Fuller's
MODELO: Fuller's Vintage Ale 2011
ESTILO: Barley Wine (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Cuando empecé la especialidad en Pamplona decidí comprar una botella de una cerveza un tanto particular con la intención de abrirla una vez que completase los intensivos años de formación que tenía por delante. Evidentemente tenía que ser de un estilo al que el paso del tiempo le sentase bien, y la botella de Fuller's Vintage que encontré en el sótano de la Vinoteca de calle Chapitela me pareció una candidata inmejorable. Ha estado durante estos 5 años a buen resguardo, y el pasado mes de mayo me atreví a descorcharla, no con poca expectación. Esta edición se hizo con la mente puesta en la boda real británica, aunque esto no supuso ningún cambio mayor en la receta de ese año, menos aún en el sentido de Brewdog y su Royal Virility).

Su color es rojo anaranjado y es excepcionalmente turbia, se ve incluso cierto sedimento flotando. Esto no perjudica en absoluto a su aspecto y con su abundante e inamovible espuma beige, cremosa y de burbuja finísima, la imagen es magnífica. En nariz es impresionante, el transcurso de los años ha concentrado y pulido los diferentes matices y los ha integrado en un denso torrente de malta dulce, sirope de caramelo y frutas oscuras maduras. Salen con un protagonismo similar uvas pasas, dátiles y algo de higos, envueltos en recuerdos de moscatel y brandy, y se intuyen también puntos de chocolate negro. El lúpulo ha desaparecido casi por completo con el paso del tiempo, no obstante aún sin este componente la complejidad es extrema.

Como se puede imaginar el cuerpo es completo, y su paso sedoso por la boca la inunda de sabor al instante. De entrada irrumpen de nuevo toneladas de dulce malta tostada, caramelo oscuro y, lo que más destaca, un intenso sabor a cacao puro que atraviesa el trago del principio al fin. De fondo, tras una delicada carbonatación, mermelada, pasas, ciruela negra madura, frutos secos y algún discreto toque de dátil. Final de amargor moderado aunque muy estructurado, mínimamente cítrico y terroso, con recuerdos de brandy y cacao y fruta en el largo regusto. Una cerveza para tomar con calma, disfrutando de cada detalle. Me ha gustado más que la vez que la tomé sin envejecer tanto, aunque también las circunstancias favorecían que esto sucediese. Impecable.

NOTA:

lunes, 5 de junio de 2017

Tanker Täiskuu

MARCA: Tanker
MODELO: Tanker Täiskuu
ESTILO: IPA de trigo (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estonia

CARACTERÍSTICAS: Otra de las cervezas de Tanker que nos enviaron desde Hop In The Box (gracias nuevamente) fue esta IPA de trigo. Su nombre, Täiskuu, quiere decir "Luna Llena" en Estonio... no he sido capaz de encontrar la razón de llamarla así, así que me quedo con la intriga. Con una graduación relativamente baja, 5'6º de alcohol, pero bien cargada de lúpulo y contando con el trigo como ingrediente, me pareció una opción estupenda para combatir la semana de calor que hemos sufrido en casi toda la Península así que la abrí sin más miramientos.

Su color es amarillo pajizo, pálida y velada, similar al de una Witbier. La espuma blanca jabonosa, impecable, es generosa al inicio pero tarda poco en desaparecer. Tampoco se ve demasiada burbuja, aunque las que hay parecen muy vivas y ascienden con velocidad. El aroma es intenso y natural, una rica combinación de malta dulce sin tostar, leve caramelo, naranja dulce, limón maduro y trigo malteado, adornada con notas de levadura belga. La nota refrescante la aportan clavo, cáscara de naranja y hoja de limón, dándole además una segunda dimensión que despierta el interés del que se enfrenta a la cerveza.

Como cabía esperar es de trago fácil pero muy sabrosa, con un cuerpo ligero que cubre de sobras las necesidades de la cerveza. Entrada de malta, grano, cereal crudo, con un carácter marcado por limón, lima y naranja ácida. Hacia el final gana presencia lúpulo herbal, notas de pino, más cítricos y especia picante. Equilibrada, de amargor medido y muy refrescante, perfecta para el verano. Sigue un perfil muy americano, y pese a que este tipo de cervezas no son mis favoritas la verdad es que me ha sorprendido muy favorablemente. De momento ha sido la que más me ha gustado de Tanker.

NOTA: