MODELO: Mongozo Palmnut
ESTILO: Brune biológica con nuez de palma (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica
CARACTERÍSTICAS: Tras unas extraordinarias semanas ayudando en la elaboración de un cortometraje de caracter social en Burgos, los organizadores del mismo, Cáritas, nos obsequiaron a los colaboradores con un surtido de productos ecológicos de Comercio Justo. Entre ellos agradecí encontrar una cerveza ecológica bastante interesante, la Mongozo, que ostentaba en letras grandes su categoría de cerveza exótica, a base de nueces de palma. Llegué a tomarme una en la suculenta cena de fin de rodaje, aunque pocas cualidades pude apreciar, entre vinos y Voll Damm que habían empañado ligeramente mi percepción del espacio-tiempo.
La historia de este nombre se remonta a 1993, cuando Henrique Kabia llegó a Holanda desde Angola como refugiado político. Allí comenzó a elaborar una cerveza siguiendo la receta original de sus ancestros angoleños, que a partir del siglo XVIII incluyó el fruto de la palma. La cerveza era fabricada por mujeres, transmitiendo los secretos de la elaboración por generaciones, hasta la ruptura de la tradición por parte de la madre de Kabia. El joven decidió llamar Mongozo ("para tu salud" en lenguaje chokwe) a esta cerveza, que con el tiempo ha incluído nuevos ingredientes en su elaboración, tales como el coco, el mango o el plátano.
La cerveza viste un color marrón rojizo, entre turbio y cristalino, que soporta una capa de espuma beix, poco abundante pero duradera. En seguida despide un aroma poco habitual, en el que destaca la miel, el plátano y el dátil, entremezclados con un toque ligeramente amargo, como a castañas. Su sabor confirma esta presencia: sobre una base ampliamente dulce se distingue el caramelo y los dátiles, dejando paso a la malta en menor medida, y una ligera presencia de nuevo del lúpulo, sin olvidar el toque meloso. Un 7% de alcohol que se intuye, peque no llega a tomar excesiva presencia en el sabor.
Personalmente he encontrado una cerveza que se escapa a mi criterio objetivo. No la he disfrutado, pues presenta unos matices que no son de mi gusto, aunque sí que he encontrado una interesante opción que quizás en un contexto y situación distinta, tomase el protagonismo que a priori merece.
La historia de este nombre se remonta a 1993, cuando Henrique Kabia llegó a Holanda desde Angola como refugiado político. Allí comenzó a elaborar una cerveza siguiendo la receta original de sus ancestros angoleños, que a partir del siglo XVIII incluyó el fruto de la palma. La cerveza era fabricada por mujeres, transmitiendo los secretos de la elaboración por generaciones, hasta la ruptura de la tradición por parte de la madre de Kabia. El joven decidió llamar Mongozo ("para tu salud" en lenguaje chokwe) a esta cerveza, que con el tiempo ha incluído nuevos ingredientes en su elaboración, tales como el coco, el mango o el plátano.
La cerveza viste un color marrón rojizo, entre turbio y cristalino, que soporta una capa de espuma beix, poco abundante pero duradera. En seguida despide un aroma poco habitual, en el que destaca la miel, el plátano y el dátil, entremezclados con un toque ligeramente amargo, como a castañas. Su sabor confirma esta presencia: sobre una base ampliamente dulce se distingue el caramelo y los dátiles, dejando paso a la malta en menor medida, y una ligera presencia de nuevo del lúpulo, sin olvidar el toque meloso. Un 7% de alcohol que se intuye, peque no llega a tomar excesiva presencia en el sabor.
Personalmente he encontrado una cerveza que se escapa a mi criterio objetivo. No la he disfrutado, pues presenta unos matices que no son de mi gusto, aunque sí que he encontrado una interesante opción que quizás en un contexto y situación distinta, tomase el protagonismo que a priori merece.
NOTA:
1 comentario:
Lástima que no os diesen unas Bolívar, no me han hablado mal de ellas.
Publicar un comentario