MODELO: Foster's Lager
ESTILO: Pale Lager (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Australia
CARACTERÍSTICAS: Llevaba bastante tiempo viendo esta cerveza sobre las estanterías de varios centros comerciales, y nunca me había llamado la atención, hasta que el último día descubrí que era una de las pocas que me quedaban por probar de ese supermercado al que no haremos publicidad, Alcampo no la necesita.
Foster’s Lager es la marca de cerveza australiana más vendida en todo el mundo, con más de 100 millones de cajas consumidas cada año en todo el mundo. Se caracteriza por su herencia australiana, su reputación a nivel mundial y el patrocinio a eventos como el Grand Prix de la Fórmula Uno.
Tras varias lecturas de expertos cerveceros y bloggers conocidos, ví que los tiros no iban para bien, sino directamente para romper el cristal de su botella, ya que nadie se atrevía a ensalzar ninguna propiedad de esta cerveza que no fuera la de aburrida. Además, el aliciente del eslogan "la cerveza australiana por excelencia" (eslogan que se le pone extraoficialmente), por lo tanto (para muchos de nosotros) de cerveza exótica, se evapora cuando descubro que en su país natal es poco conocida o muy poco consumida, siendo un producto meramente publicitario que además solamente se da a conocer por Internet.
De un color dorado clarísimo y transparente, sostiene una capa de blanca y burbujeante espuma que se volatiliza en pocos segundos, quedando un caldo no muy atractivo. Con una alta carbonatación que deja muchas burbujas adheridas al vaso, tiene la presencia de una limonada de color amarillo. Su aroma es de simple malta con leves resquicios cítricos que hacen prever un sabor igualmente mediocre. Y así es, comienzo maltoso y final lupulizado, sin absolutamente ninguna propiedad elogiable que no sea la de calmar el calor (que en esta temporada me ha venido bien).
Trataré de evitarla en el futuro, y por suerte no me tocará beberla por obligación si es que algún día voy a su país natal.
Foster’s Lager es la marca de cerveza australiana más vendida en todo el mundo, con más de 100 millones de cajas consumidas cada año en todo el mundo. Se caracteriza por su herencia australiana, su reputación a nivel mundial y el patrocinio a eventos como el Grand Prix de la Fórmula Uno.
Tras varias lecturas de expertos cerveceros y bloggers conocidos, ví que los tiros no iban para bien, sino directamente para romper el cristal de su botella, ya que nadie se atrevía a ensalzar ninguna propiedad de esta cerveza que no fuera la de aburrida. Además, el aliciente del eslogan "la cerveza australiana por excelencia" (eslogan que se le pone extraoficialmente), por lo tanto (para muchos de nosotros) de cerveza exótica, se evapora cuando descubro que en su país natal es poco conocida o muy poco consumida, siendo un producto meramente publicitario que además solamente se da a conocer por Internet.
De un color dorado clarísimo y transparente, sostiene una capa de blanca y burbujeante espuma que se volatiliza en pocos segundos, quedando un caldo no muy atractivo. Con una alta carbonatación que deja muchas burbujas adheridas al vaso, tiene la presencia de una limonada de color amarillo. Su aroma es de simple malta con leves resquicios cítricos que hacen prever un sabor igualmente mediocre. Y así es, comienzo maltoso y final lupulizado, sin absolutamente ninguna propiedad elogiable que no sea la de calmar el calor (que en esta temporada me ha venido bien).
Trataré de evitarla en el futuro, y por suerte no me tocará beberla por obligación si es que algún día voy a su país natal.
NOTA: