MODELO: La Diaoul Bier An Ankou
ESTILO: Cervoise de chouchen (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia
CARACTERÍSTICAS: Pese a las confusiones que pueda haber, el término francés "cervoise" no quiere decir "cerveza", sino que se refiere a un tipo de cerveza rudimentaria que se elaboraba en la antigüedad sin emplear para ello lúpulo, ya que esta planta no se empezó a utilizar hasta la baja Edad Media, sino otras plantas aromáticas. Como si esto no fuese suficiente originalidad, la Brasserie des Diaouligs decidió complicar más todavía una cerveza de este estilo con la ayuda del chouchen que elaboran también en sus instalaciones, un tipo de hidromiel típica de la Bretaña francesa que tiene la peculiaridad de haber potenciado la fermentación con la adición de manzanas frescas prensadas, habiendo creado así una bebida que se podría calificar como única sin miedo a equivocarse.
Esta tentadora rareza bretona llegó a mi despensa hace unos meses por cortesía de Pau y Rosana, a quienes les agradezco enormemente el detalle, y desde entonces he estado tentado de abrirla, aunque sin saber muy bien a qué atenerme poruqe nunca he probado nada parecido. Gracias a la botella transparente se puede ver antes de abrirla que es de un color rojo cristalino, con destellos anaranjados y marrones, que una vez servida se cubre por una importante cantidad de espuma beige. Inunda las fosas nasales un aroma potente que recuerda con claridad a la sidra, al presentarse un dulzor contrarrestado por una importante acidez, de donde se surgen malta tostada y manzana verde, siendo los matices más evidentes. Más de fondo quedan notas de miel, naranja, algún cítrico, y suaves recuerdos florales y herbales, adornados de canela y clavo.
Resulta mucho menos delicada en boca, irrumpe con rotundidad la malta tostada, que se rodea de pan, cereales, caramelo, y más tenues miel y frutos rojos. El inicio es dulce, pero por poco tiempo, puesto que en escasos segundos impregna todo el conjunto un fuerte ahumado que al principio me costó identificar, aunque sí distinguía notas de madera y cuero que le acompañan, que aporta al trago una sensación áspera y algo seca. Termina derivando en un amargor claro, algo salado, lleno de hierbas que no sabría especificar, recuerdos asidrados, cítricos y especias picantes, quedando estas junto con un punto de humo en el largo regusto. Esta ha sido una de mis grandes sorpresas del año, de una cerveza de la que tampoco esperaba maravillas me he encontrado un sabor potente, un cuerpo robusto y una complejidad apabullante. Bretaña es fantástica.
NOTA: