MODELO: La Petra Superpetra
ESTILO: Double IPA (8'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España
CARACTERÍSTICAS: Cuando apareció la marca de cerveza La Petra corrí a reseñar su primera referencia, Volumen 1, pero en cuanto me enteré de que elaboraban en fábricas ajenas debo de reconocer que les dejé un poco olvidados. Evidentemente ellos siguieron trabajando duro, y con la reputación que estaban ganando sus cervezas era sólo cuestión de tiempo que pudiesen inaugurar sus propias instalaciones, cosa que sucedió durante el verano del 2014. Fue entonces cuando decidí revisitar sus cervezas, animado por las buenas palabras acerca del trabajo que llevan a cabo estos navarros que me habían llegado desde diversos ámbitos.
La entrada de hoy la dedico a una de sus cervezas más valoradas: Superpetra, la reedición de la primera IPA doble que lanzaron bajo el nombre de Agradecidos. Es de color pardo anaranjado, con escasas burbujas en el líquido que ascienden hasta una consistente capa de espuma ligeramente teñida de amarillo. Su potente aroma es especialmente agradable; intensas frutas tropicales ácidas como mango y piña, acompañadas de melocotón, albaricoque y mandarina en un segundo plano, se combinan con una contundente base de malta dulce, con un buen refuerzo de toffee y un toque de nuez. La guinda la pone un deje floral y cítrico, que acaba de completar un conjunto que apunta altísimo.
La entrada en boca es agresiva, con un amargor y una acidez marcadas en las que se extienden intensas notas de pomelo, limón y recuerdos medicinales, dejando claro que a la hora de hacer IPAs en Sesma no se andan con tonterías. De fondo se mantiene, como debe de ser, un andamio de malta dulce, algo de caramelo y fruta madura, con dejes tropicales, que sirve de soporte para el torrente de lúpulo que dirige el trago. Hacia el final el amargor se refuerza, gana acidez y se seca, y a la vez se suman flores, especia picante y un cálido punto de alcohol, para terminar en un regusto áspero con un repunte de fruta tropical. Es en mi opinión una elaboración fantástica, con grandes cantidades de lúpulo pero muy bien manejadas y respaldadas por una base de malta más que suficiente, evitando caer en la monotonía de la que pecan algunos ejemplos de este estilo. Si además tenemos en cuenta que cuesta 2 euros la botella, precio por el que no había visto hasta ahora ninguna IPA doble, se convierte en una de las opciones más recomendables cuando se tiene ganas de abrasarse las papilas. Da la impresión de que Sesma Brewing van a dar mucho de qué hablar en los años que vienen.
NOTA: