Al responsable de Lúpulus, Sergio Ruiz, ya lo he mencionado en este blog en dos ocasiones: la primera fue allá por el 2009, con el mundillo cervecero nacional todavía en pañales, cuando asistí a una divertida cata de cervezas en el Juan Sebastian Bar de Zaragoza dirigida por él; la otra vez fue a propósito de otra cata en Líquidos un año más tarde, aunque centrada en la cerveza belga. Desde entonces no habíamos vuelto a coincidir en persona, aunque yo estaba al tanto de los diversos proyectos en los que estaba embarcado, desde la venta de botellas a través de su distribuidora y su tienda online, hasta la elaboración de sus cervezas Lúpulus y Pópulus en diversas fábricas.
No sé qué es lo que me llevó a echar un vistazo a la tienda online antes de emprender el viaje a Zaragoza para pasar el fin de semana, pero al ver en su repertorio varias botellas de Cantillon casi a precio de fábrica y además darme cuenta de que se permitía recogida en mano, una función fisiológica de mi organismo me obligó a hacer el encargo. A partir de ahí todo fueron facilidades por parte de Sergio y, aunque por motivos laborales no podía entregarme las botellas ni Viernes ni Sábado, hizo el esfuerzo de quedar conmigo el Domingo. Al final me llevé una Cantillon Fou Foune, una Cantillon Grand Cru Bruocsella y una Kaltenecker Blues IPA, además de una botella de regalo que antes o después comentaré, todo ello por 23 euros.
¿Qué aporta Lúpulus al cada vez más saturado panorama de las tiendas online especializadas? Pues lo primero de todo experiencia, es posiblemente una de las más veteranas en activo, y su catálogo, sin ser el más extenso, cuenta regularmente con una serie de marcas de excelente calidad que no se ven a menudo en otros comercios; sobretodo entre las belgas destacan Cantillon, De la Senne, Rulles, De Graal y Dupont, aunque también están bien surtidos de marcas de otros orígenes, como pueden ser Camba y St. Georgenbräu de Alemania, Guineu de España, la británica Anarchy, un montón de Brewdog o la eslovaca Kaltenecker. Además los precios son por lo general buenos, y en algún caso como el de Cantillon, inmejorables.
Por si fuese poco, no sólo se pueden comprar cervezas sino que también hay bastante material de homebrewing disponible. Y si a esto le sumamos una buena atención, con un conocimiento al detalle de todos los productos que ofrecen, esta parece una opción a tener en cuenta a la hora de hacer pedidos.