jueves, 26 de abril de 2018

Einbecker Ur-Bock Hell

MARCA: Einbecker
MODELO: Einbecker Ur-Bock Hell
ESTILO: Maibock (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: A pesar de que actualmente el mundo de la cerveza se caracteriza por la innovación y el dinamismo, yo sigo muy enganchado con las elaboraciones clásicas. La cerveza que comento hoy pertenece a ese grupo sin dudarlo, dado que supuso el nacimiento de un estilo: las Bock. Los origenes de la cerveza se remontan al menos al siglo XIV, dado que se conserva un recibo de venta del año 1378. En esa época todo ciudadano tenía derecho a elaborar cerveza, y sólo en Einbeck había más de 700 maestros cerveceros registrados. No fue hasta 1794, tras la fusión de los derechos individuales de elaboración de cerveza, cuando se fundó la cervecera Einbecker tal y como la conocemos ahora. En la actualidad elaboran 3 cervezas fijas y dos estacionales, y la que comento hoy pertenece a la primera categoría.

Se trata de una Maibock de color dorado brillante, cristalina, con una carbonatación tan escasa que apenas logra mantener en la superficie un anillo de espuma blanca pegado al vidrio. Su perfume encaja perfectamente con mis gustos para este tipo de cervezas: malta dulce a raudales, toneladas de galleta, algo más suave masa de pan, cereales, bizcocho y grano, que se combinan con marcadas notas frutales de pera, membrillo y más suave manzana. Queda todo envuelto por el aromático lúpulo floral, con firmes notas de miel. Muchísimo papel de la malta en nariz, densa y exuberante, y además presentada de forma excepcionalmente amable.

En boca es igual: densa, de cuerpo completo, acaramelada y muy sabrosa. Malta dulce y miel desde el inicio, con gran intensidad, también fruta madura como manzana asada y membrillo, más suave caramelo, bizcocho y algo de galleta. A pesar de la poca espuma que genera la carbonatación es perfecta, atenúa un poco la pesadez del trago y da una agradable sensación en lengua y garganta. El caramelo se hace más penetrante a medida que avanza el trago, justo antes de desembocar en un final de amargor moderado, donde se funde con generosas notas florales del lúpulo, recuerdos de licor de miel, bastante especia picante, un punto de limón y un agradable calor alcohólico. Una elaboración sólida y sin fisuras, densa pero no pesada, compleja pero fácil de beber... para repetir mil veces.

NOTA:

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