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domingo, 7 de agosto de 2016

To Øl Baltic Frontier

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Baltic Frontier
ESTILO: India Pale Ale americana con bayas marítimas y endrinas (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Cuando vi por primera vez esta elaboración de To Øl en las estanterías de La Vinoteca y vi que entre los ingredientes se encontraban las bayas de enebro, me la llevé pensando encontrar una especie de homenaje a las Sahti, aunque con una vuelta de tuerca. Una vez en casa, después de buscar algo más de información, comprobé que en realidad se trataba de una IPA utilizando ingredientes comunes a Escandinavia y el Báltico: las bayas marítimas y las endrinas. Esto por una parte me decepcionó un poco, porque llevo siglos queriendo repetir mi grata experiencia con el peculiar estilo de cerveza finés, aunque por otro lado también sabía que iba a probar una cerveza muy original y, siendo de To Øl, con la garantía de estar bien hecha.

Lo cierto es que el aspecto no es el punto fuerte de Baltic Frontier, tiene un color marrón ligeramente anaranjado muy similar al lodo, con una turbidez máxima que refuerza esta impresión. La espuma es lo que nos permite identificarla como cerveza: abundante, cremosa y resistente, mantiene un dedo durante todo el tiempo. En nariz sobresale el lúpulo americano, y las fosas se ven invadidas por toneladas de fruta de la pasión, mango, y más suave melocotón y naranja madura, quedando un discreto fondo de malta. Es un carácter resinoso, almibarado, con notas de levadura moderadas pero evidentes y un levísimo picante. En cuanto a las bayas, la verdad es que detrás de tanto lúpulo no he sido capaz de detectarlas.

La sorpresa viene con el sabor, el lúpulo es mucho menos intenso y frutal y el conjunto tiende con claridad hacia la acidez. Comienza ya con un amargor intenso, irrumpen albaricoque, cítricos y fruta tropical poco madura entre las que destacan la piña, mientras la malta se esconde de nuevo en un segundo plano, manteniendo el cuerpo. A medida que avanza el trago se desarrolla una acidez progresiva, muy herbal, que imagino que proviene de las bayas. El final es muy astringente, una afilada acidez y un potente amargor se combinan, desprendiendo notas cítricas, sobretodo pomelo, herbales y de pino, junto con una carga de especia picante considerable. Sin duda es una cerveza rara, aunque no se puede negar que esté bien hecha. El sabor ácido proveniente de las bayas está muy bien incorporado al lúpulo americano, y si bien al principio me resultaba algo estridente, en cuanto reposa unos minutos se diluye en el resto del conjunto y se equilibra el trago. El única problema que tengo es que estoy cansado de la acidez y, más allá de los estilos que tienen intrínsecamente este sabor, es muy difícil que una cerveza así me pueda entusiasmar. Me pasa lo mismo que con la versión con Brettanomyces de Troubadour Magma, no creo que le aporte ningún beneficio.

NOTA:


jueves, 24 de septiembre de 2015

To Øl Final Frontier

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Final Frontier
ESTILO: Double IPA (9% ABV) 
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Una de las referencias de To Øl que casi podríamos considerar ya como un clásico moderno es First Frontier, una excelente IPA de inspiración norteamericana con un marcado perfil frutal. Esta es posiblemente la cerveza de este estilo que más veces he bebido y desde hace un tiempo tenía ganas de comentarla en el blog, sin embargo la reciente convocatoria del III Concurso de Maestría Cervecera de La Vinoteca me ha animado a dedicar un hueco a la protagonista de este evento: Final Frontier. Como los propios responsables de la marca explican, Final Frontier no es otra cosa que una secuela de First Frontier; mantienen los mismos ingredientes (bueno, cambian el lúpulo Warrior por Columbus) pero aumentan las cantidades de los mismos, consiguiendo mayor cuerpo, mayor grado alcohólico y más amargor.

Luce un bonito color rojizo velado, anaranjado si se expone a la luz, con una densa y cremosa capa de espuma de un beige limpio que llena la copa hasta el borde. A distancia se detecta un perfume en el que predomina, además con diferencia, el intenso aroma del lúpulo, que llega incluso a resultar oleoso. Las frutas tropicales inundan las fosas nasales, con toneladas de mango, maracuyá, melocotón maduro y recuerdos de refresco de naranja. Por debajo de tanto lúpulo queda un buen remanente de malta, notas de masa de pan, almíbar y profundos toques de miel, mientras flores, canela y clavo terminan de redondear el conjunto. Sorprende cómo se ha conseguido mantener la importancia de la malta a pesar de las grandes cantidades de lúpulo empleadas, es digno de elogio.

Al primer sorbo llama atención su textura cremosa, y apenas toca la lengua irrumpe el sabor, con mucha malta dulce, toffee y algo más suave almíbar. Progresivamente este último crece, salpicado de miel, y se mezcla con una avalancha de frutas tropicales muy maduras: mango, naranja, etc. Al final el lúpulo estalla y se vuelve verde, y junto con con la gran cantidad de fruta se sitúan potentes notas de pino, cítricos y resina. Concluye en un amargor intenso, frutal, herbal y con un agradable calor alcohólico, dejando a su paso la garganta áspera, llena de recuerdos de clavo, naranja y más suave pimienta. Dentro de las Double IPA esta es una de las más completas para mi gusto, no dejan ningún aspecto descuidado y consiguen una cerveza redonda. Cuerpo, fragancia y sabor a raudales, sin embargo con suficiente equilibrio como para no saturar; es de las pocas cervezas de este estilo que sería capaz de tomarme varias seguidas. Suerte a los que se atrevan a intentar clonar esta maravilla en el concurso, la vais a necesitar.

NOTA:

sábado, 12 de septiembre de 2015

To Øl Sur Amarillo

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Sur Amarillo
ESTILO: American Wild Ale (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Las Wild Ale americanas, también conocidas como Sour Ale, son cervezas de alta fermentación con un sabor marcadamente ácido, conseguido gracias al empleo de levaduras o bacterias como pueden ser Lactobacillus o Brettanomyces durante algún punto del proceso de elaboración. No es raro ver como se tiende a confundir o a agrupar incorrectamente estas cervezas junto con estilos clásicos en los que el sabor ácido también es frecuente, como pueden ser las Lambic y sus subtipos, las Berliner Weisse, las Gose o las Flanders Red Ale y Oud Bruin, pero hay que tener claro que tanto por su historia como por su método de elaboración y tipo de fermentación no existe ningún tipo de relación.

En los últimos meses/años este tipo de cervezas han conseguido una importante popularidad, gracias principalmente al tirón de las cerveceras norteamericanas, y gozan ahora mismo de un fiel séquito de seguidores, aunque es verdad que tampoco son pocos los detractores. Para la primera incursión del blog en este estilo he decidido optar por una de las fábricas modernas que habitualmente más satisfacciones me aportan, y que no son otros que los daneses de To Øl, y he elegido una de sus cervezas de la linea Sur ("ácido" en danés) en la que emplean el lúpulo Amarillo.

Es naranja amarillenta, algo velada al trasluz, con varias columnas de burbujas diminutas que ascienden con velocidad. Genera una tonelada de espuma esponjosa que se reduce casi dos tercios de su volumen en los primeros minutos, no obstante quedando una cantidad más que suficiente. En nariz se combina la alta intensidad aromática del lúpulo, dominado por hierba y fruta, esta última orientada con claridad hacia notas tropicales como mango o melocotón, con las especias picantes y la afilada acidez de las levaduras, que evocan al limón, suave pomelo y algún deje de madera, y notas cítricas algo más templadas del trigo crudo. De fondo queda un dulzor acaramelado que consigue modular un poco el conjunto.

El sabor comienza con una acidez moderada, relativamente frutal y con un punto lácteo, mientras de fondo quedan malta, cereal cocido y suave caramelo. A medida que avanza el trago la levadura gana presencia, emergen notas herbales, de granja y ligeramente terrosas, y se potencian cáscara de limón, pomelo, y más suaves uva blanca y manzana verde. Final amargo y astringente, lleno de levadura, lúpulo herbal y cítricos, con un medido toque de alcohol y especia picante. Es una buena cerveza, es refrescante y consigue un equilibrio muy bien ajustado entre el lúpulo y la acidez, sin estar este último sabor descontrolado en absoluto. De todas maneras no acaba de ser un tipo de cervezas que me apasione, no le encuentro la complejidad que caracteriza a algunos de los estilos tradicionales con sabores ácidos.

NOTA:

lunes, 16 de junio de 2014

To Øl Reparationsbajer

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Reparationsbajer
ESTILO: American Pale Ale (5'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Tras haber reseñado varias cervezas de To Øl que podríamos calificar como potentes, al menos a nivel gustativo, tenía ganas de comentar alguna de sus elaboraciones más sosegadas para mostrar que estos daneses no viven solo de bombas. La introducción de la elegida dice así: "Reparationsbajer ha llegado para darte un buen comienzo el día siguiente a tu proeza en el mundo del alcohol. La cerveza es una Pale Ale de cuerpo ligero y fresco carácter lupulado, para quitar el sabor de la resaca. Va bien con pizza, hamburguesa o bazooka de rata" (me temo que se refieren a un dürum) Con una introducción tan detallada y exhaustiva no caben muchas dudas acerca de lo que han pretendido hacer los daneses de To Øl con esta cerveza, sólo falta saber si lo han conseguido.

Esta cerveza la probé hace unos meses en una cata de La Vinoteca y guardaba muy buen recuerdo de ella aunque, como pude comprobar después, no del todo fiel a la realidad. Es de un bonito color pardo anaranjado, algo turbia, protegido por una espuma con un leve tinte amarillento tan densa, cremosa y resistente que recuerda a un helado. Emite un intenso aroma frutal y especiado sobre un prominente fondo dulce de malta levemente tostada y denso caramelo. Entre las frutas presentes, llaman la atención naranja dulce, curaçao, mango y melocotón en almíbar, perfectamente ensambladas, infiltrándose entre ellas suaves toques de miel, canela, lúpulo de marcado carácter floral aunque con algún deje de pino, y algún resquicio de pimienta. 

En boca la cerveza da un giro importante, se deshace de ese perfil de fruta tropical tan exuberante y acaramelado y se vuelve más áspera, centrándose en cereales y frutos secos, e incluso llamativas notas terrosas. Por supuesto, si pretende ser una Pale Ale norteamericana no puede faltar fruta en abundancia, pero esta tiende hacia registros más ácidos, con uva blanca, arándanos y más suaves cítricos. No especialmente compleja aunque sí efectiva, deriva en un final de amargor medio, cargado de cítricos aportados por el lúpulo, uvas, bayas silvestres y ligera especia picante. No sé si para una resaca es la mejor opción, pero sí que me ha parecido una Pale Ale sabrosa y muy fácil de beber, de las que no importa repetir varias a lo largo de la tarde. Eso sí, es también bastante peculiar, que nadie se espere una Sierra Nevada o una Doggie Style porque no tiene nada que ver.

NOTA:

lunes, 24 de marzo de 2014

To Øl Goliat Imperial Stout

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Goliat Imperial Stout
ESTILO: Russian Imperial Stout con café, avena y azúcar moreno (10,1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: La semana pasada fue especialmente dura, tanto a nivel laboral como por actividades en momentos de ocio, así que decidí que iba a darme un capricho y abrir alguna de esas botellas para las que nunca encuentro el momento... más allá del #FFdA que, evidentemente, no se puede convocar cuando a mí me de la gana. No quise jugármela y opté por una elaboración un poco especial de To Øl, marca danesa cuyo nombre resuena en la cabeza de cualquier amante de las cervezas, y no es para menos, puesto que casi cualquier cosa que estos nórdicos sacan a la venta es oro puro. Por cierto, esta botella llegó a mis manos como un regalo, y lo agradezco enormemente.

Más negra que la conciencia de un banquero, ni se inmuta ante la luz. Al servirla se desliza con viscosidad, por la pared del vidrio, mientras da pie a que se forme una crema marrón ocre de burbuja fina, tan escasa como persistente. En nariz ataca con grandes cantidades de chocolate negro, sirope de caramelo y medidas frutas oscuras sobre un fondo de espresso, torrefacto y más suave regaliz negro. Envuelve el conjunto un firme ahumado, con una fuerza que no he visto en muchas Imperial Stout, acompañado de cacao, olivas negras y mínimo azúcar quemado. Las cervezas de este estilo ya son complejas casi por definición, pero esta tiene una entrada magistral, especialmente variada.

En boca es muy potente, con mucho énfasis en café y torrefacto, quizá demasiado, y también una fuerte presencia de cacao y regaliz negro. El dulce se encarga de amortiguar algo el sabor, con notas de moras, pasas, toffee y más suave azúcar quemado, y lo consigue relativamente durante unos instantes; sin embargo, el desarrollo del trago acaba por desbordarle al potenciarse más aún el café al final, antes de entrar en un amargor intenso cargado de recuerdos de brandy, licor de cacao, sirope y regaliz. De textura oleosa, entra a pequeños sorbos dejando un agradable calor en el estómago y un eterno regusto, licoroso y caramelizado en boca. En mi opinión la combinación del torrefacto y de los granos de café añadidos se hacen demasiado presentes y pueden saturar, de hecho a mí se me hizo un poco pesada. Creo que es una buena cerveza, pero no tanto como para que cueste más del doble que la mayoría de cervezas de esta marca; sin ir más lejos, Mochaccino Messiah, también con café, me parece mucho más lograda.

NOTA:

jueves, 13 de junio de 2013

To Øl Mochaccino Messiah

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Mochaccino Messiah
ESTILO: Brown Ale con café y lactosa (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Mucho se habla últimamente de los daneses de To Øl y, demonios, hay motivos para hacerlo. Estos aprendices de Mikkel Borg, alias Mikkeller, hace tiempo que juegan en la misma liga que su maestro, e incluso algunos afirman que le han superado con creces. Yo no me atrevería a decir tanto, por el simple hecho de que solo han pasado por mis manos unas 3 botellas de cada una de las marcas, pero lo que sí que puedo expresar es mi impresión de que las cervezas de To Øl son bastante más regulares; no hay una que no sea, como mínimo, fantástica.

Esta que voy a mencionar hoy es su intento de sustituir el café de primera hora de la mañana (aunque recomiendan no hacerlo siempre), una Brown Ale a la que han añadido lactosa y grano de café. De color marrón roble, casi negro, con una cremosa espuma amarilla, presenta en su aroma una lucha entre caramelo y toffe por un lado, frente a malta tostada y torrefacto, que termina de decidirse por los aromas más ásperos gracias a la intervención de un agradable ahumado. Intensos recuerdos de regaliz negro, y más de fondo frutas del bosque, parecen envolver al conjunto, junto con claros puntos de hierba y café negro. Esperaba que esta última nota fuese la predominante pero curiosamente no es así, sino que está muy bien integrada con los demás matices.

Tras un comienzo más que interesante, en boca despega y roza la perfección. Sobre una relativamente dulce base de malta tostada y sirope de caramelo se ensambla un núcleo de café espresso, cacao puro, algo más suave regaliz negro y torrefacto, y un medido toque de humo. Mientras avanza el trago, y potenciándose al calentarse la cerveza, aparecen notas de moras, pasas y leve cereza madura... no obstante, es un adorno sutil, quien manda en el trago son los tostados y el café. En perfecto equilibrio, aunque forzando hacia los tostados, transcurre hacia un final seco, de amargor controlado, herbal y ligeramente cítrico, que desemboca en un regusto seco, áspero y lleno de sabor, en el que destacan de nuevo café solo y chocolate negro. Una cerveza sublime, reinventan un estilo clásico y el resultado no podría ser mejor: extremadamente sabrosa, con el café controlado a la perfección y en absoluto monótona, que suele ser el principal problema de las cervezas con ingredientes algo peculiares. Otro punto más para To Øl, en las próximas elecciones generales que cuenten con mi voto. ¡Y mi hacha!

NOTA:

jueves, 27 de septiembre de 2012

To Øl Black Ball Porter

MARCA: To Øl
MODELO: To Øl Black Ball Porter
ESTILO: Baltic Porter (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Dinamarca

CARACTERÍSTICAS: Tobias Emil Jensen, Tore Gynther y su profesor Mikkel Borg Bjergsø comenzaron a elaborar cerveza en su Colegio Mayor en el 2005, y durante los años siguientes ocuparon las cocinas durante las noches intentando conseguir cada vez cervezas de mayor calidad. Poco tiempo después Mikkel Borg fundó la reputada Mikkeller, ampliamente distribuida por todo el mundo en la actualidad, mientras que los dos alumnos tuvieron que esperar hasta el 2010 para que viese la luz su propia marca: To Øl. 

Pese a contar en su arsenal con más de una docena de cervezas no cuentan en este momento con instalaciones propias, sino que sus creaciones salen de la belga De Proefbrouwerij. Entre ellas está Black Ball, que algunos colocan dentro del discutible grupo de las Black IPA, pero que estos daneses prefieren definir como "Hoppy Porter", muy acertadamente al menos en mi opinión. 

Es de color negro opaco, con una cubierta de dos dedos de espuma beige, cremosa y abundante. Sale de esta un intenso aroma que irrumpe con fuerza en las fosas nasales, donde abunda malta torrefacta y regaliz negro, equilibrados con dulces notas de caramelo, toffee, frutas del bosque y pasas, dejando de fondo cacao, hierba y mínimos recuerdos de olivas. Es un perfume exquisito, denso y complejo, que sugiere que nos espera un sabor con estas mismas características.

Y así es, se presenta con cuerpo completo, rotunda y pesada, desprendiendo desde el inicio al igual que en nariz toneladas de torrefacto y regaliz negro. Sin embargo, en escasos segundos empiezan a surgir otros sabores que matizan el trago, ganando mucha complejidad con la presencia de potentes recuerdos de mora, arándanos,cacao y caramelo. Mucho antes del final ya es áspera, agria, y el carácter herbal del lúpulo es muy evidente, pero cuando nos aproximamos a los últimos instantes estas características se acentúan, formando un intenso amargor seco y agresivo, repleto de cacao, hierba, especias picantes y más de fondo un medido toque de alcohol y notas quemadas, de café negro y humo. Puede resultar algo dura, pero da la impresión de que detrás de ella hay mucho trabajo, lo que ha permitido ajustarla al milímetro consiguiendo así una Porter redonda. Muy recomendable, como todas las demás cervezas de esta marca.

NOTA: