viernes, 10 de abril de 2009

Baltika (Балтика) 9 Extra Lager

MARCA: Baltika (Балтика)
MODELO: Baltika (Балтика) 9 Extra Lager
ESTILO: Strong Lager (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Rusia

CARACTERÍSTICAS: Baltika es una cervecera muy joven pero que, pese a ello, se ha convertido en poco tiempo en la segunda mayor marca de cerveza de Europa, en lo que a ventas se refiere. Este alto nivel de ventas se debe a la hegemonía de la que disfruta en los países de la antigua Unión Soviética y, por desgracia, no a una excelente calidad.

Se fundó como una empresa estatal en 1990, con sede y fábrica en San Petersburgo. Con la disolución de la URSS sufrió un proceso de privatización en 1992, y actualmente la mayor accionista es BBH (Baltic Beverages Holdings), relacionada con Carlsberg. En 1999 empezó a exportar su producto al extranjero, y en la actualidad llega a 38 países

Con Baltika 9 Extra Lager nos encontramos ante una Lager fuerte, de 8º de alcohol, con unas propiedades bastante curiosas. Al principio, nada más servirla (y recomiendo que se enfríe tanto como sea posible), veremos que tiene un aroma muy muy ligero, y que produce una gran cantidad de espuma. Al degustarla, el primer contacto con el líquido es suave, poco amargo... sin embargo, al instante adquiere un cuerpo más que destacable, bastante dulzón, y deja finalmente un regusto intenso a alcohol y malta en el fondo del paladar, casi en la faringe.

Este comienzo es realmente interesante, pero es al poco rato cuando empiezan los peros. El primer cambio que podremos apreciar es que la espuma literalmente se desintegra en un par de minutos, lo cual es una lástima, puesto que era bastante agradable al gusto. Por la alta graduación y el sabor fuerte parece una cerveza adecuada para degustar lentamente, perfecta acompañando comida, sobretodo carnes, y, de hecho, así es. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo va perdiendo esa fuerza y disimula mucho peor el alcohol, que se va haciendo más presente, por lo que no conviene dejarla reposar mucho. Esto, por supuesto, tendrá repercusiones en nuestra lucidez mental, así que ojo al dato.

NOTA:




CARACTERÍSTICAS: Siempre me ha llamado la atención esta marca de cervezas, y si mi memoria no me falla, este fue el primer modelo que tomé, sentado en un banco junto al compañero de blog. En ese momento quedé encantado con el poderoso sabor alcohólico de esta rusa, que no tardó en invadir mi mente y mi percepción, inaugurando una noche bastante alcohólica. En mi último viaje a la capital aragonesa compré una Baltika 9 para traérmela a casa y poder disfrutarla.

Tiene un color atractivo y una espuma abundante y cremosa que tarda pocos segundos en desaparecer. El trago tiene un principio suave, presentando un sabor amargo que de repente y sin previo aviso desata una potencia alcohólica que echa para atrás. Pero no es como esas cervezas en las que el alcohol tapa todo lo demás. Denota un toque maltoso con algunos matices a castaña y corcho, que también recuerda a un licor fuerte, que arde en el estómago.

Sin duda es una cerveza muy cabezona, y hace falta un rato para acostumbrarse a su potente sabor, pero con una comida copiosa puede cumplir un excelente maridaje, evitando que se caliente demasiado.

NOTA:

jueves, 9 de abril de 2009

Sinebrychoff Porter

MARCA: Sinebrychoff
MODELO: Sinebrychoff Porter
ESTILO: Baltic Porter (7'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Finlandia

CARACTERÍSTICAS: Desde hace unos meses estoy bastante enganchado a las Porter, y con lo bien que las cervezas de este estilo acompañan el frío, en el viaje a Finlandia noté la necesidad de tomarme una. Por puro azar compré esta cerveza en Alko de Kuopio, y resultó ser el producto estrella de la misma cervecera que se encarga de la elaboración de Karhu III.

Probablemente es una de las cervezas más oscuras que he visto, de color negro totalmente opaco, repleto de burbujas, sobre el cual aparece una gran capa de espuma beige tan cremosa como la de un capuccino, pero que por desgracia desaparece en un abrir y cerrar de ojos. Intenso se queda corto para describir el aroma, se percibe un olor muy dulce que recuerda a café o regaliz, aunque el protagonismo indiscutible es para el chocolate. Se perciben incluso matices que se identifican rapidamente como olivas negras, bastante curiosos.

De las pocas Porter que he probado, es con diferencia la que se bebe más facilmente. Presenta cuerpo medio con un sabor firme y directo, dominado por chocolate amargo y café más levemente, donde aparecen reminiscencias de las olivas negras del aroma. Pese a tener un comienzo algo dulce, el amargor marca el ritmo del trago, que termina de manera particularmente seca, provocando cierta astringencia en el fondo de la boca. Posee una complejidad admirable y, pese a su posible agresividad, la verdad es que se bebe con una facilidad peligrosa.

NOTA:

domingo, 5 de abril de 2009

Karjala III

MARCA: Karjala
MODELO: Karjala III
ESTILO: Pale Lager (4'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Finlandia

CARACTERÍSTICAS: Karjala fue la primera marca de cerveza que produjo la empresa Hartwall en 1966, tras 130 años en los que se había dedicado unicamente a la elaboración y comercialización de agua mineral y refrescos. Ciertamente no les fue mal, pasaron a elaborar varios modelos diferentes para ser en la actualidad la cervecera más importante de Finlandia, junto con Sinebrychoff.

Solo una palabra en necesaria para definir este modelo: eurolager. Es dorada cristalina, de carbonatación ligera y que forma una capa de espuma blanca y cremosa, bastante consistente. Los aromas que despide son totalmente predecibles: intensos, algo dulzones, a malta basicamente, posiblemente algunas notas de cereales y alcohol, y un evidentísimo olor metálico.

La perspectiva en este punto es realmente mala, y no mejora en absoluto, casi al contrario. Hay casi que esforzarse para encontrar algún sabor más allá del dulzor inicial y el amargor final, y por supuesto este exclusivamente maltoso, y muy aburrido. El regusto termina sin prisa, y se acentúa algo el amargor. Si se tiene sed y solo se tiene esto a mano, recomiendo beber agua porque esta es probablemente la peor cerveza que probé en todo mi viaje a la península escandinava.

NOTA:

miércoles, 1 de abril de 2009

Kamenitza Svetlo (Cbetлo)

MARCA: Kamenitza
MODELO: Kamenitza Svetlo (Cbetлo)
ESTILO: Pale Lager (4'4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bulgaria

CARACTERÍSTICAS: Llevaba mucho tiempo buscando una tienda rusa de alimentación que me pareció ver un día en una calle de Burgos, y hace unas semanas la conseguí encontrar. Tras ojear el pequeño repertorio cervecil y no encontrar ninguna Baltika asomando, me di cuenta de que era una tienda búlgara, y no rusa. Me hice con un par de cervezas en lata y botella y me despedí prometiéndome que algún día volvería a comprar algo del suculento embutido que allí vendían y un par de botellas de varios litros de cerveza búlgara.

Un poco de historia de esta cerveza: En 1881, dos empresarios suizos se hicieron con una fábrica de cervezas en Plovdiv, Bulgaria, en una colina llamada Kamenitza. En los comienzos el mercado búlgaro se centraba en las lager, pero más adelante se atrevieron a lanzar la primera cerveza negra del país.
El régimen comunista nacionalizó Kamenitza: en primer lugar, en 1947, como parte de la empresa estatal de bebidas alcohólicas, y luego en 1952 como parte de Vinprom. En 1995, la gigante InBev devora la empresa y 10 años después la convierte en la cerveza búlgara más vendida.

Varias burbujas suben contínuamente a través de su cuerpo amarillo dorado, haciendo que la espuma se desvanezca casi al instante. Esta cerveza despide un aroma maltoso que acompaña al primer trago, donde los matices dulces apagan un ligero amargor que toma presencia al final. Quizás fuera por la lata, pero al rato emergía un sabor levemente metálico que tapaba todo lo anterior.
Es refrescante, aunque su sabor no se mantiene el tiempo idóneo en la boca. Fácil de beber, el escaso contenido alcohólico (4'4 %) es sin duda una razón importante por la que hacer recipientes que alberguen gran cantidad.

NOTA:

lunes, 30 de marzo de 2009

Puhti IV B

MARCA: Puhti
MODELO: Puhti IVB
ESTILO: Sahti (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Finlandia

CARACTERÍSTICAS: Pese a haber sido fundada en 1985, hace tan solo 24 años, Lammin Sahti Oy es la microcervecera más antigua de Finlandia. Se dedica a la producción de cervezas de un estilo propio de este país, las Sahti, que tienen la peculiaridad de que para su elaboración se emplean bayas de enebro como complemento del lúpulo o sustituyéndolo, y se filtra el líquido a través de ramas de esa planta.

A primera vista, recuerda muchísimo a las Brown Ale, quizá de color algo más oscuro, similar a la madera, y una carbonatación sin duda más ligera, casi inexistente, que tan apenas forma espuma. Al olfato se hace notar un aroma importante, de dulzor moderado, a malta parcialmente tostada, caramelizado, con un deje de alcohol, que en definitiva tampoco dista demasiado del estilo británico.

Es en el sabor donde las diferencias son evidentes, encontrando un gusto muy dulce e intenso, principalmente a malta y caramelo, con una medida presencia enólica y notas a frutas oscuras o bayas. Muy sabrosa, de regusto largo con un amargor suave y muy agradable, presenta practicamente en todo momento un matiz ácido de predominio herbal que hasta que no leí los ingredientes no pude identificar, y que no es otra cosa que el enebro que se utiliza en la elaboración, que le da un toque muy especial. Personalmente, este estilo, que hasta el momento era completamente desconocido para mí, me ha conquistado al instante... espero tener el placer de degustar más de estas con cierta frecuencia.

NOTA:

sábado, 28 de marzo de 2009

Zipfer

MARCA: Zipfer
MODELO: Zipfer
ESTILO: Pilsener (5'4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Austria

CARACTERÍSTICAS: Una de las cervezas expuesta en la "feria de los países" (o algo así) que acontecía en Hipercor, fue esta austriaca, Zipfer.

En 1858 una pequeña fábrica de cerveza es construida en Zipf. A medida que pasó el tiempo fue desarrollando una mejoría en la receta de la cerveza, utilizando agua de manantial y lúpulo fresco de la zona. En 1970 la Asociación Austriaca de Cervecerías compra la fábrica y la añade a su producción, convirtiéndola en lo que es ahora.

La Zipfer, que viene acompañada con su sello "Premium Qualitat", tiene un aspecto como de cerveza de usar y tirar: tiene un tapón enroscable y una etiqueta que cubre toda la parte superior de la botella.
Tras comprobar que su aspecto externo es de lo más común, color amarillo con espuma blanca burbujeante, su aroma presenta leves notas florales. En boca deja un sabor algo ágrio con toques herbales que desembocan en matices amargos, con presencia del lúpulo. El alcohol, 5'4%, no se deja ver en ningún momento.

Una cerveza a la que quizás de otra oportunidad, pero que me ha parecido bastante normalita.

NOTA:

viernes, 27 de marzo de 2009

La Ronda #10: Confesiones cerveceras

Último viernes del mes, ya está aquí La Ronda. En esta ocasión los amigos de la Logia Cervecera son los encargados de invitar, proponiendo un tema bastante pícaro e informal:

¿Cual es tu confesión cervecera? ¿Que hiciste en tu vida o que seguís haciendo que te avergüenza como fanático de la cerveza?

Esta divertida propuesta auguraba unas confesiones hilarantes y así ha sido por lo que he podido leer en los blogs cerveceros. Por mi parte no hay muchas confesiones, pero algo puedo contar.

Para comenzar, comentar algo que he visto que repiten muchos de los amigos cerveceros en sus confesiones (lo cual he de decir que me alivia), que es la cantidad de cerveza “imbebible” que tomamos para el día a día. Las cañas de San Miguel o Mahou, el botellín de Estrella o la botella de litro de Steimburg son muy habituales en mis salidas nocturnas, y la cosa es que no me tortura la idea de que estoy cometiendo un vil atentado al paladar, aunque no deje de pensar que podría estar tomando algo muchísimo mejor. Pero como bien ha dicho Andrés, de Culturilla Cervecera: “son días en los que lo que prima no es la cerveza, sino la compañía”.

Hice algún que otro experimento cuando comencé a probar variedades cerveciles. Recuerdo que una vez acabé con unos amigos en un bar, terminando ya la noche, y pedimos unas Franziskaner. Uno de mis amigos compró unos polos pequeños con formas y colores curiosos llamados fantasmikos, por lo que nuestra mente alquímica nos hizo untarlos en la cerveza. Esa profanación quedó marcada en la historia, aun lo recordamos al ver estos helados.

En cuanto a mezclas, de vez en cuando tomo con unos amigos la que llamamos “Jarra de Pitt”, consistente en una jarra de lager con un chupito de bourbon sumergido en ella. Algo curioso que no sabe nada mal.

Finalmente recordar los años en los que empezaba a vivir las primeras grandes juergas, y pedíamos vasos enormes de cuatro o diez litros de cerveza, en los que al final quedaban las babas de todos los del grupo. Beber por beber, tremendamente divertido.

Espero que el Monje Negro de la Logia nos absuelva de nuestros pecados. Salud y hasta la próxima.