MODELO: Zywiec Porter
ESTILO: Baltic Porter (9'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Polonia
CARACTERÍSTICAS: Estreno año y diseño con una cerveza que me trajo un Palo (más bien una Palo) al volver de su viaje de Polonia, a la que por cierto le doy las gracias nuevamente. Acertó de pleno trayendome este modelo de la cervecera Zywiec, desde los 90' en manos de Heineken, porque las Baltic Porter es un estilo que me gusta bastante y con casi 10º de alcohol me parece perfecta para esta época del año.
Impresiona la opacidad de la misma, su color negro no se ve alterado ni minimamente por la luz, y este líquido queda al servirlo adornado una capa de espuma amarillenta, acre, muy cremosa y persistente. El olor es arrollador, de dulzor moderado, con malta torrefacta omnipresente, aromas a café recien hecho y chocolate negro bastante marcados, fuertes puntos herbales del lúpulo, y levemente frutas oscuras, bayas. Penetrante, muy natural, la verdad es que muy rico.
El sabor posee tanta fuerza como el aroma, de hecho es bastante agresivo y mucho menos frutal que la mayoría de las Porter que he probado, con un amargor marcado acompañando notas de chocolate negrísimo y malta torrefacta como base, bastante café negro, una pizca de tabaco, otra vez muy suaves frutas oscuras y el gusto herbal aportado por el lúpulo, conformando una mezcla exquisita. El cuerpo es completo, con el alcohol disimulado casi por completo gracias a la intensidad de los demás sabores, y conduce a un regusto seco, quizá algo ahumado, donde el alcohol se hace un poco más evidente (aunque poco) y aparecen notas que me recordaron inmediatamente a regaliz negro. Muy compleja, agresiva pero equilibrada, y espectacular para mi gusto.
Impresiona la opacidad de la misma, su color negro no se ve alterado ni minimamente por la luz, y este líquido queda al servirlo adornado una capa de espuma amarillenta, acre, muy cremosa y persistente. El olor es arrollador, de dulzor moderado, con malta torrefacta omnipresente, aromas a café recien hecho y chocolate negro bastante marcados, fuertes puntos herbales del lúpulo, y levemente frutas oscuras, bayas. Penetrante, muy natural, la verdad es que muy rico.
El sabor posee tanta fuerza como el aroma, de hecho es bastante agresivo y mucho menos frutal que la mayoría de las Porter que he probado, con un amargor marcado acompañando notas de chocolate negrísimo y malta torrefacta como base, bastante café negro, una pizca de tabaco, otra vez muy suaves frutas oscuras y el gusto herbal aportado por el lúpulo, conformando una mezcla exquisita. El cuerpo es completo, con el alcohol disimulado casi por completo gracias a la intensidad de los demás sabores, y conduce a un regusto seco, quizá algo ahumado, donde el alcohol se hace un poco más evidente (aunque poco) y aparecen notas que me recordaron inmediatamente a regaliz negro. Muy compleja, agresiva pero equilibrada, y espectacular para mi gusto.
NOTA: