Mostrando entradas con la etiqueta Francia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Francia. Mostrar todas las entradas

domingo, 12 de marzo de 2017

Tienda en París: La Cave à Bulles

Como creo haber comentado en el Twitter del blog (aunque se podría haber sospechado por el abrupto desembarco de referencias francesas en el blog), mi empleo me ha llevado a tener que pasar los meses de febrero y marzo del 2017 en París. Me pareció además una muy buena oportunidad para explorar la escena cervecera francesa, evidentemente no todo iba a ser trabajo, así que el primer día que tuve libre hice una revisión de las tiendas de cerveza de París para decidir a cuál iba ir a abastecerme.

Lo primero que vi es que el número de locales de este tipo es inabarcable y al final, por estar centrada principalmente en cervezas francesas y por ser además una de las más reputadas, opté por La Cave à Bulles, localizada en 4ème Arrondissement, muy cerca del Centro Pompidou. Es verdad que era sábado por la tarde y es una zona céntrica, pero me sorprendió lo abarrotada que estaba: no cabía un alfiler. Sin embargo yo iba resuelto a salir de allí con cervezas así que me abrí hueco como pude hasta las estanterías, repletas de botellas francesas, la mayoría desconocidas para mí, y alguna referencia extranjera.

Al instante uno de los encargados se aproximó a mí para preguntarme si necesitaba ayuda, y como respecto a micros francesas yo no tengo mucha experiencia y sí que he tenido varias decepciones grandes, decidí que fuese él libremente quien eligiese las cervezas que me iba a llevar. El sueño de cualquier vendedor de cerveza, vamos. La verdad es que la atención y el trato fueron exquisitos, y me quedó claro que quien me aconsejó dominaba el producto al detalle y además le apasionaba, pocas veces he recibido explicaciones tan precisas y entusiastas. Al final me planté en casa con una colección de cervezas de estilos muy variados elaboradas en distintos puntos del país y, como he ido comprobando durante las últimas semanas, de un nivel muy alto.

A este local sólo le veo un punto negativo y son los precios, excesivamente elevados incluso para París. Para la mayor parte de las cervezas francesas es fijo: 4 euros la botella de 33 cl, 5 euros la botella de 50 cl y 7 euros la botella de 75 cl, aunque hay algunas fábricas que pueden tener un coste un poco superior. Las extranjeras varía según la marca, y también hay algunas cajas con botellas en oferta, que por lo general suele significar 1 euro menos en el precio fijado. Si merece la pena o no dependerá de la opinión de cada uno; a mí, puesto que era una compra pequeña y es poco tiempo el que voy a estar en la ciudad, no me importó, aunque sí que recomendaría pasar también por las otras tiendas de la ciudad, igualmente cargadas de referencias interesantes y con precios más comedidos.


TIENDA: La Cave à Bulles
DIRECCIÓN: c\ Quincampoix, 45
LOCALIDAD: París
PAÍS: Francia

sábado, 11 de marzo de 2017

Volcelest Brune

MARCA: Volcelest
MODELO: Volcelest Brune
ESTILO: Brune biológica (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Las historias de las nuevas fábricas de cerveza se suelen parecer bastante, y suelen tener que ver con dos o más amigos que hacen cerveza en casa desde hace un número de años determinado (a veces la cantidad de tiempo se exagera), y que por algún motivo, habitualmente un infortunio, deciden dedicarse a ello profesionalmente. Lo que no vemos muy a menudo son casos como el de Emmanuel Rey, con una dilatada experiencia en la elaboración de vino y que, sin embargo, durante una temporada de trabajo en los Estados Unidos quedó encandilado con el fenómeno de las microcerveceras de este país y decidió montar la suya propia en Francia. Así, en el 2008 comenzó la actividad de la Brasserie de la Vallée de Chevreuse, fundada en la comuna de Bonnelles, al Sur de Versalles, junto al parque natural con el que comparte el nombre.

Se trata de una cerveza de color roble, con un bonito rubí brillante al trasluz. La espuma beige abundante y compacta, de espuma fina, se reduce rápidamente a una capa de un par de milimetros, que no obstante queda en la superficie largo tiempo. Sorprende que se la califique como una Brown Ale cuando su aroma no podría ser más belga. Es intenso, con una base dulce de malta tostada, caramelo, chocolate con leche y algo más suave frutos secos, sobre la que surge la fruta oscura madura, principalmente ciruela e higos, también suave plátano y algo de cereza. De fondo quedan notas de azúcar moreno y suaves recuerdos de té inglés, mientras el lúpulo noble pone la guinda con un delicado perfume floral un poco especiado.

En boca lo que más llama la atención es la fruta roja, con cerezas, moras y frambuesas que aparecen en el inicio del trago, y se entrelazan con la malta tostada, los frutos secos y el grano. El dulzor es mucho más comedido de lo que sugería el aroma, y eso es algo que yo siempre agradezco. Densidad y textura perfectas para el estilo, con un paso por boca ágil pero rebosante de sabor. El final presenta un amargor marcado, un poco áspero, con cítricos y algo de hierba del lúpulo, suaves frutas del bosque, un deje tostado y un punto de alcohol que se confunde con la especia picante. Me ha parecido un buen ejemplo de tostada belga, compleja y armoniosa, aunque centrando el sabor en matices algo menos dulces de lo habitual. Atacadla sin miedo, pues a pesar de ser Bio no se le puede reprochar sencillez o monotonía. 

NOTA:

domingo, 5 de marzo de 2017

Deck & Donohue Makkuro Extra Porter

MARCA: Deck & Donohue
MODELO: Deck & Donohue Makkuro Extra Porter
ESTILO: Porter (5'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: El estadounidense Thomas Donohue y Mike Deck, natural de Alsacia, se conocieron en la Universidad de Georgetown en el año 2002. Surgió entonces una amistad que se vio reforzada con los sólidos cimientos de la pasión por la cerveza (esto me resulta familiar), y esto les ha llevado a realizar múltiples viajes juntos a distintos templos cerveciles como puede ser el Great British Beer Festival, la abadía de Westvleteren, etc. Además, Thomas ha trabajado durante los últimos años en varias cerveceras estadounidenses. Finalmente tomaron la decisión de montar su propia fábrica, el norteamericano se trasladó a Europa y en el 2014 la actividad de Deck & Donohue, establecida en Montreuil, al Este de París.

La cerveza que comento hoy fue también recomendación de La Cave à Bulles, y se trata de una Porter de baja graduación alcohólica con lúpulo Polaris. Como se puede imaginar es negra y muy opaca, y la protege una espuma marrón grisácea, abundante, resistente y, sobretodo, con un encaje impresionante que sirve de testigo del nivel que ha alcanzado en el momento del servicio. El aroma es sin duda alguna inesperado, y es que desde el primer instante asalta un torrente de lúpulo con fruta tropical, melocotón, picante, hierba y un afilado punto de pino y menta. Muy por detrás queda malta, sirope de chocolate, caramelo, y llega a notar el torrefacto en forma de café y olivas negras, no obstante todos estos matices quedan eclipsados por el lúpulo.

En boca es similar o incluso más descontrolada. La entrada está anegada con toneladas de pomelo, hierba y pino, con bastante carga de especia. Hacia el final se intuye algo de la malta, un poco de fruta, surge un amargor bastante seco, y es allí donde parece salir a la superficie café, regaliz negro y picante, que se engancha en la lengua. Quedan los sabores de los tostados en el regusto, aunque envueltos en cítricos, pino y resina. La elaboración es buena: la textura es agradable, el cuerpo está bien ajustado... pero la sobrecarga de lúpulo destroza el conjunto y elimina cualquier complejidad. El equilibrio es importante.

NOTA:

jueves, 2 de marzo de 2017

Page 24 Réserve Hildegarde Blonde

MARCA: Page 24
MODELO: Page 24 Réserve Hildegarde Blonde
ESTILO: Bière de Garde (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Continúo con las cervezas francesas, tanto por gusto como por necesidad, con una fábrica que se puede considerar un clásico moderno: la Brasserie Saint Germain. Fue fundada por Vincent, Stéphane y Hervé en el año 2003 en un pueblecito de Nord-Pas-de-Calais llamado Aix Noulette. Desde el primer momento emplean en la elaboración sólo materias primas de esta región y, de hecho, todas sus cervezas de la línea Page 24 llevan únicamente lúpulo producido por la coperativa Coophounord, en Berthen. La que comento hoy forma parte de este grupo, y es posiblemente la más galardonada: Réserve Hildegarde.

Su color dorado algo apagado, con escasos reflejos anaranjados. La carbonatación es tan potente como uno espera de este estilo, y gran cantidad de burbujas suben a toda velocidad hasta chocar con una espuma blanca de burbuja diminuta, no demasiado generosa pero sí muy persistente. El aroma es clásico, bien cargado de lúpulo noble alemán tan floral como herbal. Queda un fondo de malta, grano crudo, masa de pan y abundante fruta, principalmente manzana golden, membrillo, suave plátano y un toque de limón ácido y especiado. El alcohol se intuye, aunque no se percibe con claridad. Recuerda bastante a Duvel, aunque eso sí con bastante menos alcohol.

La carbonatación ayuda a mantener el cuerpo en su sitio a su paso por boca, la verdad es que es muy redonda. La entrada está dominada por malta dulce, cereal, grano y un sutil toque de caramelo. Poco a poco envuelve la fruta, con intensas notas de manzana golden, pera, algo más discreto membrillo, a lo que se suman leves recuerdos de miel y restos de levadura. Final de amargor marcado, floral y algo herbal, con suave especia picante, fruta y un medido calor alcohólico bien compensado. Una Bière de Garde de libro; sabrosa y con cuerpo, la levadura de alta fermentación le da la frutalidad habitual del estilo pero no es nada dulzona y, si bien el alcohol aflora al final, está perfectamente compensado. Da la sensación de estar ante una fábrica de dilatada experiencia, cuando la verdad es que no llevan ni quince años en activo. 

NOTA:

martes, 21 de febrero de 2017

Goutte d'Or 3 TER


MARCA: Goutte d'Or
MODELO: Goutte d'Or 3 TER
ESTILO: Tripel con café (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: La Goutte d'Or es una zona de París situada al este del hermoso Montmartre y además, desde el año 2012, es también el nombre de una de las primeras microcerveceras de la capital francesa, establecida evidentemente en este barrio. Su fundador, Thierry Roche, tuvo que abrirse paso en una ciudad inundada de productos de grandes cerveceras, y la prueba de su éxito es que ahora mismo es fácil ver cualquiera de sus más de 15 elaboraciones en las estanterías de los comercios parisinos. La cerveza que voy a comentar hoy fue una recomendación de la Cave à Bulles, y dentro del catálogo de la fábrica posiblemente sea la que me resulta más interesante, una Tripel elaborada con café, cuyo nombre hace referencia a la dirección de la cafetera con la que han colaborado para llevarla a cabo: Café Lomi.

Es de un color pardo anaranjado, muy brillante y poco turbia, con una carbonatación potente que da paso a una espuma generosa, aunque esta desaparece con rapidez. Es una cerveza muy aromática, con una contundente base de malta dulce, miel y frutas maduras, a la que en seguida se suma el lúpulo y aporta intensas notas de mango y maracuyá, algo más suaves cítricos y piña, con un deje picante. Lo que descoloca por completo es cuando irrumpe el café, con su perfume torrefacto e incluso ligeramente ahumado, y que no obstante encaja con el resto de aromas mucho mejor de lo que cabría esperar, no resulta nada estridente.

A estas alturas uno se queda un poco desconcertado, pero la verdad es que la mezcla funciona francamente bien en nariz, y en boca incluso mejor. La entrada está dominada por malta dulce, suave miel, y frutas maduras como melocotón o albaricoque. El lúpulo provoca la transformación hacia un perfil más cítrico, más tropical, mientras genera un amargor cuya sequedad se funde con el sabor del café, que se cuela poco a poco en el sabor. El final es una mezcla de todos estos matices: café, frutas tropicales, cítricos, suave pino y humo, y mucha especia picante, para derivar en un regusto largo con un agradable calor alcohólico. Tanto por originalidad como por destreza en la elaboración es una cerveza para quitarse el sombrero. Si a alguien le apetece experimentar y a la vez disfrutar (que inquietante queda esta frase, da ganas de decírsela a un niño llevando gabardina y gafas de sol) y casualmente está por París, esta es una opción difícil de mejorar.

NOTA:

domingo, 7 de febrero de 2016

La Goule Kick

MARCA: La Goule
MODELO: La Goule Kick
ESTILO: Blonde (6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: En Foussignac, una población de alrededor de 500 habitantes situada entre Angoulême y Cognac, en la región de Charente, se producen desde 1999 las cervezas La Goule. Su nombre es la palabra francesa para designar a los "ghoul", demonios necrófagos de la mitología árabe como el que podemos ver en las simpáticas etiquetas de la marca. Esta pequeña cervecera familiar emplea en la elaboración ingredientes con certificación ecológica, y tiene en su repertorio 9 modelos distintos, todos ellos sin filtrar ni pasteurizar.

La que yo encontré en un Vin & Bières bretón fue Kick, una cerveza rubia de tipo belga que he visto catalogada como Bière de Garde en varias páginas, yo creo que equivocadamente. Viste un dorado ambarino mate, con una turbidez leve, coronada por una espuma blanca bastante resistente. El aroma es intenso, dulce y frutal, y si bien al principio percibí algún componente que no me acababa de agradar y sugería problemas de conservación, este desapareció en seguida, quedando malta almibarada con grandes cantidades de fruta madura, principalmente melocotón, naranja dulce y manzana, y más suaves nísperos y algún deje tropical. El perfume floral y frutal del lúpulo, con un agradable punto cítrico, se expande y disemina, consiguiendo un volumen que completa el conjunto y lo hace muy efectivo.

La impresión en nariz era mejor, pero en boca desde el primer momento me dio la impresión de que cojeaba. Tiene bastante fruta, melocotón y albaricoque sobretodo, y marcados recuerdos de miel, pero al principio se echa en falta soporte de la malta. Poco a poco, a medida que avanza el trago, esta última se introduce lentamente aunque sin llegar a destacar, acompañada de almíbar, caramelo y un leve punto cítrico que le da empuje al sabor. Final de amargor moderado, impregnado en cítricos, flores y hierba, aunque sin acabar de definir, y con un deje especiado. Me ha resultado algo dulzona y bastante plana, sin tener ningún problema grave no es el tipo de cerveza que tendría interés en tomar de nuevo.

NOTA:

martes, 5 de enero de 2016

Coreff Dramm Hud

MARCA: Coreff
MODELO: Coreff Dramm Hud
ESTILO: Ale Dorada Fuerte (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Se considera que la Brasserie Coreff, cuyo nombre es la palabra bretona para "cervoise", es una de las primeras microcerveceras francesas de la época moderna. Sus orígenes se remontan a 1985, cuando fue fundada por Christian Blanchard y Jean François Malgorn en la pequeña localidad de la costa Noroeste de Bretaña llamada Morlaix, aunque desde el año 2005 sus dependencias se encuentran en Carhaix-Plouguer, además bajo la dirección de Matthieu Breton. Inicialmente sus elaboraciones tenían una gran influencia de las cervezas británicas debido a la formación de sus responsables en el Sur de Inglaterra, sin embargo la cerveza que voy a comentar hoy tiene un claro corte belga.

Dramm Hud, o "Poción Mágica", es una de las últimas elaboraciones de Coreff, y se podría catalogar como una Ale Dorada Fuerte, aunque guarda diferencias notables con este estilo y parece quedar a mitad de camino entre este y las Tripel. Es de un color naranja amarillento, con una turbidez moderada que permite ver el rápido y desorganizado ascenso de burbujas hasta la superficie, donde alimentan espuma blanca escasa y poco resistente. Aroma rico e intenso; se presenta con gran cantidad de fruta como manzana golden o melocotón, y a la misma altura están dulce malta y un medido toque de caramelo, mientras queda de fondo algo de cereal sin tostar. Tiene un punto afilado de naranja, quizá algún deje tropical, y leves limón y especia picante que aparecen al final, perfectamente camuflados entre miel y flores.

Tan sabrosa en boca como sugería el olfato, sigue un esquema parecido aunque quizá es algo más densa y dulzona de lo esperado. Malta, caramelo y melocotón en almíbar ganan presencia a costa del cítrico, y en un segundo plano se mantienen las frutas del aroma, aunque más maduras. Al final del trago el cítrico recupera, naranja y limón atacan con fuerza y se juntan con un amargor marcado, de suave carácter medicinal. Aparece allí el lúpulo floral, ligeramente especiado, y un leve calor alcohólico, quedando a punto de acabar de redondear la cerveza. Es posible que los últimos instantes queden un poco huecos, no obstante se trata de una buena elaboración, sin errores que señalar y bastante completa.

NOTA:

domingo, 27 de diciembre de 2015

Aliénor Rousse

MARCA: Aliénor
MODELO: Aliénor Rousse
ESTILO: Red Ale (6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Laurent Lefebvre es un joven belga afincado desde el año 2006 en Aquitania, a raíz de su matrimonio con una mujer bordelesa. Algunos años después de su llegada a esta región, en el 2010, decidió dedicarse a la elaboración de cervezas, y comenzó la producción de Aliénor en su propio domicilio, aunque en Agosto del 2012 la trasladó a St Caprais de Bordeaux, donde sigue en el momento actual. El nombre de la marca hace referencia a Leonor de Aquitania, una noble que vivió durante el siglo XII y que llegó a ser Duquesa de Aquitania y Guyena, Condesa de Gascuña, y posteriormente reina consorte de Francia y después de Inglaterra. Conocí esta marca en el viaje de vuelta de las vacaciones por Bretaña, a mi paso por Burdeos, en un centro comercial, y no pude evitar la tentación de llevarme un par de botellas para probar algo nuevo.

Tomé una de ellas, su Brune, con la compañía de La Cofradía del Lúpulo, y la verdad es que a ninguno nos gustó demasiado. Tenía no obstante puestas esperanzas en la que voy a comentar hoy, aunque como vais a comprobar tampoco ha sido capaz de estar a la altura. Viste un rojo en copa, que al trasluz se vuelve brillante y desarrolla reflejos naranjas. Por desgracia este bonito aspecto queda algo deslucido por la ausencia casi total de espuma, inicialmente genera muy poca y en pocos segundos no queda más que un anillo adherido al cristal. Su aroma es dulce y acaramelado, cuenta con malta de tueste ligero, sirope, azúcar moreno y leve chocolate con leche, a los que se arriman manzana madura y algo de manzana y mandarina. Tiene de todas formas un deje algo desagradable, no muy llamativo pero algo molesto, que recuerda a verdura hervida, además de un mínimo punto de tabaco. Se nota además un leve toque de lúpulo floral que algo mejora, aunque no acaba de corregir el defecto descrito.

Y en boca se desmorona por completo. Es como agua sucia: ausencia total de cuerpo, acidez descontrolada y sabor insoportable. Doy por hecho que se trata de una contaminación, y posiblemente la cerveza original no sea tan horrible pero, viendo el nivel de su Brune y habiéndome encontrado ya esta sorpresa poco apetecible, no tengo especial interés en repetir.

NOTA:

lunes, 21 de diciembre de 2015

An Alarc'h Roc'h

MARCA: An Alarc'h
MODELO: An Alarc'h Roc'h
ESTILO: Brown Ale (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: An Alarc'h, o en castellano "El Cisne", es una cervecera bretona fundada en 1998 en Huelgoat/An Uhelgoad, en el corazón del Parque Natural Regional de Armórica. Forma parte desde el año 2005 de la cooperativa Tri Martolod, siendo en la fábrica de este nombre en Concarneau donde se embotellaban sus elaboraciones hasta este mismo año, cuando An Alarc'h se trasladó a La Feuillée. Cuentan con varias cervezas distintas en su repertorio, abarcando además estilos modernos, y la que hoy voy a comentar es su Brown Ale Roc'h. Anticipo que anteriormente probé la Imperial Stout llamada Kerzu y quedé muy satisfecho.

Lo primero que llama la atención, y posiblemente lo que me llevó a comprarla, es el bonito diseño de su etiqueta, con una pintura de estilo impresionista. Ya fuera de la botella viste un color marrón, ligeramente rojizo, y muy turbio. Nada más tocar el cristal su espuma, densa como la nata, rellena la copa hasta arriba, y mantiene esta altura largo rato. Potencia en nariz moderada, se presenta una malta de dulzor muy apagado con un toque de caramelo de fondo, pero predominan claramente los tostados, frutos secos y cereal. El conjunto es modulado por un toque de lúpulo herbal y cítrico, posiblemente de origen británico, que le aporta un agradable frescor y alivia su rigidez.

En boca mandan igualmente los tostados, nueces y otros frutos secos, e incluso alcanza un agradable punto de café y cacao. En un segundo plano quedan mantequilla, suave malta, algo de caramelo y recuerdos de frutas del bosque. De cuerpo medio, termina en un amargor claro, cítrico y herbal y con un leve deje especiado, tras lo cual el sabor cierra con rapidez. Se trata de una Brown Ale sobria y directa, como manda el estilo, y sin complicarse demasiado la vida supera a las representantes más comerciales del mismo. Para beber en grandes cantidades en un ambiente británico, a ser posible jugando a Cluedo con el príncipe Charles.

NOTA:

miércoles, 4 de noviembre de 2015

La Choulette Ambrée

MARCA: La Choulette
MODELO: La Choulette Ambrée
ESTILO: Bière de Garde Ambrée (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Otra de las cerveceras de Bière de Garde clásicas de la región Nord-Pas-de-Calais es la Brasserie La Choulette, situada en el pequeño pueblo de Hordain, dentro del distrito de Valenciennes. Fue fundada en 1885 por Jules Dhaussy, un agricultor que decidió compatibilizar su oficio con el de maestro cervecero, apoyándose para ello en la experiencia que había conseguido trabajando como obrero en la cervecera Derieux. A pesar de la destrucción de las instalaciones durante la 1º Guerra Mundial la actividad de esta empresa se mantuvo gracias a la participación de su primogénito Alphonse Dhaussy y la mujer de este, Berthe Collet, y posteriormente de la ayuda de los hijos de esta pareja, Alphonse, Jeanne, Jules y Maria, hasta que finalmente cerraron en 1951. Por suerte esto no supuso el fin definitivo de la empresa sino que, 26 años después, Alphonse Dhaussy retomó el negocio familiar y, con la colaboración de su hijo Alain, comenzó a elaborar Bière de Garde. Cuatro años después, en 1981, lanzaron la cerveza que voy a probar ahora: La Choulette.

Se trata de una cerveza oscura, de color marrón pardo, como de hoja seca, con una turbidez moderada. Está cubierta por una capa de espuma de burbuja fina con un grosor de un par de dedos, que se reduce rapidamente a una cuarta parte. (si las matemáticas digitales no fallan, medio dedo) Su aroma es intenso, y evoca los matices que podrían esperar en una Brune belga. Rebosa caramelo y malta tostada, con clara tendencia al dulce, acompañado de frutas muy maduras como ciruelas, higos, pasas, alcanzando sin dificultad los dátiles. Para no empalagar compensa con firmes notas de frutos secos, perfectamente combinados con el caramelo, pan integral, y el aporte del lúpulo, muy floral y con un agradable punto cítrico.

En boca se evidencia el proceso de guarda en frío; pasa limpia, fluida. Desembarcan al instante toneladas de dulce malta tostada y chocolate, algo más suave toffee, azúcar moreno y las frutas antes mencionadas, con una presencia tremenda de dátil. Concluye más áspera, salen nueces, algo de grano de café, té negro, que queda en el largo regusto, y avellanas, antes de que el lúpulo genere el amargor final, floral, especiado y con un toque de miel. Cuando se deja reposar emergen algo más los tostados, y para mi gusto se hace incluso más apetecible. Es una cerveza cremosa, cálida y delicada, al comienzo más dulce y pesada pero poco a poco va liberando el trago e introduciendo complejidad. Una opción buenísima, a la altura de 3 Monts.

NOTA:

lunes, 26 de octubre de 2015

Gavroche

MARCA: Gavroche
MODELO: Gavroche
ESTILO: Bière de Garde Ambrée (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: La Brasserie de Saint-Sylvestre es propiedad de la familia Ricour desde 1920, cuando el abuelo de los actuales dueños la compró por 400.000 francos, y sin embargo tuvieron que pasar 65 años hasta que se empezó a producciones la cerveza que a la que debe su popularidad, 3 Monts. Aún más tiempo fue necesario para que viese la luz otra de sus producciones, una bière de garde que lleva el nombre de uno de los personajes de Los Miserables de Victor Hugo, Gavroche, que se vendió por primera vez en 1997. Siguiendo el ritmo de trabajo de esta fábrica, yo también me tomé mi tiempo para abrir la botella que compré hace unos meses y decidí esperar a que hiciese un tiempo algo más frío, que es cuando mejor me sientan las cervezas de este estilo.

Se trata de una cerveza de un color rubí, anaranjada al trasluz, totalmente cristalina, en la que se observan miles de burbujas que ascienden rápidamente hacia 2 dedos de espuma beige fina y cremosa. En nariz se presenta con gran cantidad de malta y tostados, aunque apoyándose sobretodo en su vertiente dulce, bien cargada de caramelo y frutas oscuras. Tiene de fondo una parte algo más áspera, compuesta por suaves notas de frutos secos, pan de centeno y cereales, con un mínimo deje de óxido. Esta equilibrada combinación de dulce y tostados acaba de ser armonizada por el lúpulo noble, herbal, terroso y con un punto de cítrico y especia, quedando una mezcla muy bien compensada.

En cuanto al sabor, es potente pero a la vez rebosa sobriedad. Comienza con un intenso gusto a malta dulce, con mucho sirope de caramelo, un toque de azúcar moreno y frutas oscuras como ciruelas, pasas y suaves higos. En seguida, y casi sin que uno se pueda dar cuenta, toman el relevo los tostados y pasan a dirigir el trago, cargados de cereal, nueces, almendras, un marcado punto cítrico y leves recuerdos de té inglés. Final de amargor acentuado, el grano tostado termina de romper sobre una base dulce, llegándose a detectar algo de torrefacto, mientras el lúpulo desprende notas de hierba, naranja, algo de miel y especia picante. Regusto prolongado, con una reconfortante calidez frutal y ligeramente alcohólica. Cerveza compleja y de cuerpo contundente, ensambla a la perfección dos facetas muy distintas y consigue que transcurran con fluidez. Quizá no tan espectacular como 3 Monts, pero es no obstante una elaboración de nivel.

NOTA:

domingo, 18 de octubre de 2015

Bretaña

Una de las regiones del mundo que más ganas tenía de visitar, sobretodo desde que una amiga me contó hace años lo experimentado durante los meses que estuvo viviendo allí gracias a una beca Erasmus, era la Bretaña francesa. Por si fuera poco, la detallada descripción que hizo Pau a la vuelta de su viaje por aquella zona (1, 2, 3, 4, 5 y 6) alimentó todavía más mis ansias, y ya al principio del verano tomamos la decisión de que nuestras vacaciones de Septiembre iban a transcurrir allí.

Nuestro plan era sencillo: alquilamos un pequeño apartamento en el centro de Lorient, tomamos prestado un coche, cargamos nuestras bicicletas, y nos preparamos para disfrutar durante una semana de las ciudades, los paisajes y la gastronomía bretona, incluyendo también su sidra, hidromiel y, por supuesto, sus cervezas. De todas formas no tenía la intención de que esta última bebida fuese la protagonista de las vacaciones, por lo que tampoco preparé una ruta por las diferentes fábricas que hay en esta región (que no son pocas) ni por tiendas especializadas que no pillasen de camino, sino que simplemente me iba a ir adaptando a lo que encontrase.

A pesar de esta cómoda estrategia la verdad es que no puedo decir que la buena cerveza escaseara, más bien al contrario, porque si hay algo que es llamativo de esta región es cómo la bebida local se ha extendido hasta formar parte del día a día. No es infrecuente ver marcas bretonas en los tiradores de los bares, principalmente Brasserie de Bretagne y Lancelot, aunque se puede encontrar de cuando en cuando alguna otra; también en los pequeños comercios se pueden ver botellas de fábricas artesanales, e incluso en prácticamente todas las grandes superficies hay botellas sueltas o packs con varias referencias distintas de la cervecera en cuestión, además a precios que harían sonrojarse a más de un elaborador nacional.

Por la zona de Lorient son habituales de las estanterías de los supermercados las botellas de las infalibles Lancelot y Brasserie de Bretagne, a alrededor de 1'5 euros la botella de 33 cl o 3-4 euros la de 75 cl, también he visto en algunos lugares las Mor Braz con agua salada a un precio similar, y algo más caras las Coreff. En pequeñas tiendas de alimentación se podía encontrar alguna referencia de La BorDée, Tri Martolod, An Alarc'h o St. Georges, normalmente rondando los 3 euros. Por último, también pasé por varias tiendas especializadas en bebidas como Vini Gusto, con un reducido espacio en el que se encontraban apenas 10-15 cervezas distintas, entre ellas alguna bretona fácil de ver en los supermercados y rarezas de países exóticos posiblemente de calidad cuestionable, y una tienda/cervecería llamada Vin & Bière, con varios locales repartidos por el país, y que si bien parecen estar centrados en Ale belga también tienen hueco para marcas de cualquier punto de Francia, además a precio razonable. (aunque bastante más caras que en supermercado)

Ya para concluir, entre las cervezas que pude tomar durante los días que estuve por ahí rondando guardo un recuerdo especialmente bueno de las Lancelot de barril, sobretodo de su Tripel Duchesse Anne; disfruté mucho con el reencuentro con las Britt, especialmente de su rica Witbier; sin que me pareciesen cervezas para el día a día aluciné con el sabor salado de Mor Braz; repetí alguna elaboración con base de chouchenn, aunque ninguna le llegó a la suela del zapato a las de Diaouligs que me regaló Pau hace algunos años; y por último también pude hacerme con alguna cerveza de estilos modernos, casi más por curiosidad que otra cosa.

Y con esto termino mi breve experiencia cervecil por Bretaña. Lo único que puedo decir es que, independientemente de si gusta o no la cerveza, es una región volcada por completo con el turismo, y si al buen trato que se le dispensa al visitante se le suma poder visitar hermosas ciudades como Rennes o St. Malo, espectaculares costas como las de Morbihan o Finistère (sin contar con el Mont Sant Michel), y tranquilos bosques con vías ciclistas interminables, el éxito en las vacaciones está casi asegurado.

domingo, 11 de octubre de 2015

Mor Braz Blanche

MARCA: Mor Braz
MODELO: Mor Braz Blanche
ESTILO: Witbier con agua marina (4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Reconozco que la Ambrée de Mor Braz se me hizo un poco cuesta arriba, la combinación de tanta malta y tanta sal al final me acabaron saturando, y pensé que quizá con sus referencias más ligeras quedaría más satisfecho. Así fue con su Blonde Bio, una cerveza rubia refrescante con un toque salado bastante más moderado y que disfruté como un enano, con su Blonde, y tenía la esperanza de que me sucediese lo mismo con su Blanche, así que decidí reservarla para comentarla en este blog. Por desgracia al final no ha sido así y tampoco me ha terminado de convencer, lo cual no quita que recomiende a todo no-hipertenso atacar estas cervezas tan curiosas.

Mor Braz Blanche es algo más oscura de lo habitual en su estilo, aunque adquiere el tono pajizo habitual al mirarla al trasluz. Tiene una carbonatación constante y generosa, que alimenta una abundante espuma blanca, muy cremosa. Su perfume es fresco, natural y muy agradable. Tiene un leve dulzor aportado por la malta y suave caramelo, los cítricos esperables de las Wit, con limón maduro, naranja y quizá algo de miel y albaricoque, y un punto lácteo. Lo que rompe la corriente habitual de este estilo es la sal, sin embargo lejos de molestar incluye al resto de aromas de forma bastante efectiva. 

En boca es igual de rara, pero al menos mi impresión es que integra peor la sal, queda muy estridente. La entrada es de la malta, que forma un leve dulzor con recuerdos de pan, crema y manzana madura. Progresivamente van apareciendo los cítricos y a la vez las intensas notas saladas. Este conjunto, con un respaldo de cereal en el fondo, conduce a un final de amargor moderado, dominado por la sal, un punto cítrico y un deje de especia picante. Sí que creo que es como para probarla pero personalmente no repetiría, el sabor salado no es lo que busco cuando tomo una cerveza y en esta es demasiado intenso como para centrarse en otros aspectos.

NOTA:

domingo, 27 de septiembre de 2015

Mor Braz Ambrée

MARCA: Mor Braz
MODELO: Mor Braz Ambrée
ESTILO: Ambrée con agua marina (6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Además de una bahía de la región de Morbihan, Mor Braz, cuya traducción literal del bretón sería "Gran Mar", es también el nombre de una cervecera situada en Theix, muy cerca de la ciudad francesa de Vannes. Esta fábrica tiene la peculiaridad de que para la producción de sus cervezas utilizan agua marina recogida a 15 metros de profundidad, a la que someten a un filtrado en el barco antes de comenzar con la elaboración, siendo en la actualidad una de las pocas que llevan a cabo un proceso semejante. 

Me enteré de su existencia poco antes de que comenzasen mis vacaciones de Septiembre en Bretaña y decidí hacer el esfuerzo de buscar alguna botella durante el viaje, con la suerte de que en el primer supermercado en el que paré a hacer la compra encontré un pack que incluía 6 botellas. Esta fue la primera que abrí, una cerveza de estilo belga de un color marrón mate levemente anaranjado, tan turbia como una Weizen. Deja una isla de espuma gris en el centro de la copa, de donde emana un aroma dulce y acaramelado, con una base de malta de tueste ligero, cereal oscuro y algo de chocolate con leche sobrepasada por gran cantidad de fruta madura, principalmente ciruelas, manzana asada, suaves higos y naranja dulce. Se percibe además un deje salado y mineral bastante peculiar, y un toque de lúpulo floral.

Muy viva la entrada en boca, con una efervescencia llamativa que aumenta progresivamente. Sabor dulce y frutal, similar al aroma, se combinan malta, caramelo y más suave chocolate con leche con fruta madura, ciruela sobretodo, algo de manzana y mínima naranja. Se trataría una Brune muy normal, si no fuese por el intenso sabor a mar que poco a poco pasa a dominar el conjunto, limitando mucho el amargor final del trago, en el que queda únicamente algo de fruta, leves recuerdos florales y especiados junto con las marcadas notas saladas y minerales que arrastran a la malta. Al principio me resultó muy interesante por ser tan distinta de cualquier otra cerveza que hubiese probado antes, pero para ser sincero con apenas media copa me encontraba bastante saturado y sin demasiadas ganas de seguir. No creo que haya ningún error con esta elaboración, al menos yo no detecté ningún defecto en el sabor, pero sí que es verdad que el agua tan salada puede resultar algo estridente y hacer que la cerveza no sea fácil de beber. No obstante creo que merece la pena probarla.

NOTA:

sábado, 19 de septiembre de 2015

Mélmor Bière au Chouchen

MARCA: Mélmor
MODELO: Mélmor Bière au Chouchen
ESTILO: Blonde de chouchen (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Esta fue la primera cerveza que bebí durante mi viaje a Bretaña, una rubia a la hidromiel elaborada por Warenghem, una destilería emplazada en Lannion, en el Norte de la región. Esta empresa comenzó sus andanzas a finales del siglo XIX produciendo Elixir d'Armorique, un licor obtenido a partir de la destilación de múltiples hierbas que ha sido galardonado en repetidas ocasiones. Posteriormente en 1967 la familia Warenghem se asoció con Yves Leizour, de origen bretón, y fue uno de sus descendientes, Gilles Leizour, quien tras tomar el mando de la destilería diversificó su negocio introduciendo nuevos productos, entre ellos chouchen, los primeros whisky bretones y cervezas.

Mélmor es una cerveza de un color dorado cristalino (si dijese "color miel" me vería obligado a suicidarme de forma inmediata), con una carbonatación bastante limitada que condiciona una espuma escasa, alimentada por 4 o 5 burbujas despistadas. Esperaba un aroma mucho más llamativo, pero la verdad es que su intensidad es bastante moderada, al igual que su dulzor. Se combinan en él malta sin tostar, bizcocho o galleta, suave mantequilla y recuerdos de manzana asada junto con evidentes notas de miel, como no podía ser de otra manera, bien integradas en el conjunto, y un delicado manto de lúpulo floral.

La entrada en boca es un poco despistada al principio por un exceso de efervescencia pero en pocos minutos se calma. El dominio en el sabor es sin duda de la miel y dulce malta, sin empalagar en ningún momento, y de nuevo aparecen recuerdos de bizcocho, algo más discretas galletas y frutas maduras, entre las cuales además de la manzana golden me parece distinguir membrillo. El final es cálido, de mínimo amargor, y con un punto de alcohol claro pero bien controlado. La hidromiel se hace más patente, e incluso a medida que se calienta la cerveza esto se acentúa todavía más, aunque a mí no me llegó a molestar en ningún momento. Esperaba las agradables notas ahumadas de la cerveza de chouchenn de Diaouligs que me regaló Pau y no las he encontrado, pero aún así me he quedado satisfecho con una cerveza original, quizá algo sencilla, pero bien hecha.

NOTA:

domingo, 30 de agosto de 2015

Bellerose Bière Blonde Extra

MARCA: Bellerose
MODELO: Bellerose Bière Blonde Extra
ESTILO: Bière de Garde (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: La Brasserie des Amis Réunis fue fundada en 1996 por el director de cine Claude Berri y varios actores franceses, entre ellos Gerard Depardieu, como agradecimiento a la ciudad de Saint-Amand-les-Eaux por su acogida durante el rodaje de la película Germinal, en la que todos participaron. Posteriormente, en el año 2002 pasó a denominarse Brasserie Saint-Amand-les-Eaux y finalmente, tras una breve interrupción de su actividad, adoptó su nombre actual: Brasserie des Sources. Son varias las cervezas que tienen en su repertorio, la verdad es que la mayoría no demasiado conocidas, con la excepción de la que voy a comentar hoy, que ha sido merecedora de varios galardones, entre ellos la medalla de oro de los World Beer Awards en la categoría de Bière de Garde.

Este estilo propio de la región Nord-Pas-de-Calais siempre me ha resultado muy interesante, y de hecho una de sus principales representantes, 3 Monts, se encuentra entre mis cervezas favoritas. Bellerose, sin embargo, es diferente a esta en bastantes aspectos y, pese a ello, me ha gustado bastante... y eso que odio todo lo diferente. Se viste de oro algo ambarino, con una gorro de espuma blanca de burbuja fina, cremosa como la espuma de un capuccino y potenciada por una marabunta de microburbujas. Su perfume es rico, variado e intenso. El primer golpe es de malta dulce y cereal, y poco a poco se evidencia un denso caramelo, untuoso, el cual se combina con recuerdos de azúcar candy y fruta madura, entre ellas pera, manzana golden y suave albaricoque. Al final es el lúpulo noble el que pasa a escena, herbal, ligeramente cítrico y frutal, potenciando el albaricoque y dando cabida a leves notas de clavo y canela.

En boca cambia la dirección a la que apuntaba el aroma, es mucho más sobria y seca de lo que esperaba, pese a lo cual tiene un pase agradable por boca y deja huella. El comienzo lo dirige un núcleo de cereal, frutos secos y malta sin tostar de dulzor muy limitado, rodeado de limón maduro, lichi y algún toque de naranja. La generosidad en el uso del lúpulo se hace patente a medida que avanza el trago, concluyendo con un amargor final cargado de este ingrediente, de carácter muy herbal, cítrico y con un importante deje mineral; la hierba se queda en su largo regusto, formando parte de una sequedad que incita a continuar bebiendo. La verdad es que es una elaboración muy peculiar: más fácil de beber, menos alcohólica y más lupulada de lo que acostumbran las Bière de Garde, me ha resultado interesante probarla y no me importaría repetir.

NOTA:

sábado, 25 de julio de 2015

Lancelot Telenn Du

MARCA: Lancelot
MODELO: Lancelot Telenn Du
ESTILO: Dry Stout biológica con trigo sarraceno (4'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Han pasado bastante tiempo desde la última vez que comenté en Hipos Urinatum una cerveza bretona (de hecho, ni siquiera vivía en mi actual domicilio), y como anticipo a mi próximo viaje a esta región he decidido presentar otra elaboración de una de las grandes cerveceras de allí: Brasserie Lancelot. Tellen Du, o Arpa Negra traducido al castellano, se trata de una cerveza oscura de fermentación alta elaborada con trigo sarraceno, cereal que en alguna ocasión me ha dado una sorpresa bastante agradable. Además de darle profundidad y un punto bastante original al sabor, el trigo sarraceno tiene la peculiaridad de no contener gluten, por lo que las cervezas elaboradas con él son totalmente aptas para celiacos y socialdemócratas.

Viste un color negro brillante, con una corona de cremosa espuma beige, muy resistente. A pesar de ser totalmente opaca a la vista, se observan con claridad las microscópicas burbujas de ascienden por el vidrio. En su aroma domina el dulce, con intensos recuerdos de café cortado aportados por el torrefacto, denso sirope de caramelo, suave regaliz negro y mínimo ahumado. Infiltrados en el conjunto, emergen discretas notas de frutas del bosque y cacao, consiguiendo una complejidad que atrae el interés a pesar de la delicadeza con la que los distintos matices llegan a la nariz.

En boca la entrada es más discreta, comienzan cacao y torrefacto, con notas de café, regaliz y suave humo, acompañados de leves recuerdos de frutas del bosque. El paso por boca no es tan cremoso como cabía esperar, el trago es muy largo e incluso se queda algo aguado. Termina en un final amargo y bastante seco, impregnado de una medida acidez cítrica, mientras escapan regaliz, chocolate y grano de café. Es agradable pero me ha resultado demasiado sencilla y ligera, y eso que disfruto enormemente de cervezas de bajo grado alcohólico. Sí que me gustaría probarla de barril, me da la impresión de que el grifo puede enmendar las limitaciones de esta elaboración, que tampoco son tantas.

NOTA:

domingo, 10 de febrero de 2013

Lancelot Bonnets Rouges

MARCA: Lancelot
MODELO: Lancelot Bonnets Rouges
ESTILO: Pale Ale con bayas de sauco (5'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Esta cerveza es el homenaje de la bretona Lancelot a la "Revolución de los Bonetes Rojos" o "Revolución del Papel Sellado", un alzamiento de las clases populares en 1675 en Bretaña tras un aumento de las tasas del estaño, el tabaco y el papel sellado decretado por el rey Luis XIV. Su intenso tinte rojo, a juego, y no por casualidad, con el color de los gorros frigios que actualmente se identifican con las revoluciones, se debe a las bayas de sauco que forman parte de sus ingredientes. Fue, como la última botella que comenté, un regalo de los Rodríguez, que no dejan de llenar mi despensa de cervezas exóticas... cosa que por supuesto les agradezco.

Del color de la cerveza está todo dicho, y eso sin siquiera quitar la chapa puesto que viene en botella de cristal transparente, que le da un aspecto bastante peculiar. Por contra, su perfume no resulta tan llamativo; es de intensidad media, algo apagado, formado por malta, nuez, manzana, un leve toque cítrico, y suaves notas uva blanca y bayas probablemente aportadas por el sauco. El lúpulo, por su parte, añade delicados recuerdos de hierba y especias que suman complejidad al aroma, aunque en mi opinión sin llegar a darle el ímpetu que le haría falta.

En contraste con el dulzor del aroma, en boca es ácida desde el primer momento, sabor que refuerza también la importante efervescencia, posiblemente algo excesiva. De cuerpo ligero, inicia el trago con malta, abundantes cítricos, manzana verde y un claro toque de bayas que recuerda a algunas de las Historic Ales de la William Bros, sobretodo a Grozet. El final es amargo y ácido por igual, impregnado de hierba, fruta y mínimo clavo, que en el largo regusto se combinan con las bayas de sauco, siendo estas y la hierba las principales protagonistas. Una cerveza original, pero entre el exceso de carbonatación, lo ligera que es y que no parece llevar ninguna dirección concreta al final se me queda algo corta. Pasable, sin ningún error gordo que impida terminarla pero, a diferencia de con XI.I, no tengo ningún interés en repetir. 

NOTA:


domingo, 3 de febrero de 2013

Lancelot XI.I Samhain

MARCA: Lancelot
MODELO: Lancelot XI.I Samhain
ESTILO: Barley Wine (11'1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: En estos 5 años recopilando información sobre diferentes cerveceras he visto todo tipo de lugares donde se han establecido negocios de este tipo, pero hasta ahora nunca me había encontrado con una emplazada en una mina de oro, como es el caso de la bretona Brasserie Lancelot. Ojo, antes de que nadie coja pico y pala y emprenda la ruta en coche hasta Roc Saint André, en la Bretaña francesa, donde se junta oro y cerveza, aviso que la mina lleva inactiva desde 1908 por no ser rentable su explotación. No obstante, sin instrumentos de excavación puede ser interesante el pasar por allí, puesto que la visita de la fábrica es gratuita e incluye (cómo no) degustación.

Esta botella me la trajeron Fernando y Cristina de su viaje a esa zona, dentro de un pack de 6 botellas distintas de la fábrica. Es una cerveza que se elabora exclusivamente la noche del 31 de Octubre, la última noche del año celta, que separa el mundo de los vivos del de los muertos y en la que se celebra la festividad de Samhain, y cuya fermentación dura 6 semanas, hasta el solsticio de invierno. De la botella, vestida con una etiqueta sensacional, se libera un líquido marrón oscuro, caoba, con reflejos pardo-rubí al trasluz. Apenas forma espuma, de color grisáceo, y ésta desaparece casi por completo con rapidez, quedando aspecto más propio de un coñac. Me sorprendió lo intenso y rotundo del aroma, no esperaba en absoluto semejante presencia de malta tostada, como un torrente que inunda el olfato, acompañado de caramelo, ciruelas, pasas, cacao, más secundario café irlandés, té negro, azúcar moreno, y mínimos recuerdos de ron, regaliz negro y hierba. Todo este desfile de matices se podía apreciar en su perfume, aunque con un dulzor algo menor de lo esperado gracias a una sequedad que se encarga de darle a la cerveza un carácter algo británico.

En boca resulta muy parecida, ataca desde el inicio con toneladas de malta, caramelo y frutas oscuras, a los que se suman en seguida cacao y chocolate con leche dispersos, y una aspereza impregnada de frutos secos, ron negro y medidos recuerdos de madera. El paso por boca es rápido, fluido, aunque también es cálido y sin duda deja huella. Forma al final del trago un amargor marcado, enfrentado a un generoso pero controlado soplo de alcohol que calienta el estómago, para dejar la boca seca, cargada de notas de cacao, frutas oscuras, madera, suave hierba y mínimo regaliz. Una cerveza estupenda, perfecta para disfrutar en una fría noche de invierno, además con menos esfuerzo del que cabría esperar para una graduación alcohólica tan elevada. Solo me queda agradecer a Fernando y Cristina el regalo.

NOTA:

sábado, 22 de diciembre de 2012

La Gwilh

MARCA: Diaouligs
MODELO: La Gwilh
ESTILO: Blonde (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: La otra cerveza de la Brasserie des Diaouligs que me regaló Pau no era, ni de lejos, tan peculiar como la ya comentada "La Diaoul", elaborada con hidromiel. No obstante, y pese a en principio no ser más que una cerveza rubia, antes de abrirla ya despertaba en mí la fascinación que habitualmente experimento por las cervezas bretonas, me temo que en parte gracias a su misteriosa etiqueta. Su nombre, Gwilh, es el que dieron los habitantes al lobo que rondaba por sus tierras, y que en las noches de Luna llena bajaba a las poblaciones a comer ovejas, gallinas, congresistas, solomillo a la trufa y oporto, o lo que demonios coman los lobos.

El aspecto es muy limpio, de color dorado brillante, apenas turbia, con una esponjosa crema que surge con ímpetu, dejando apenas medio dedo de espuma. Igual que "La Diaoul", desprende en nariz mucha manzana, en este caso mezcla de Golden y Reineta, quedando más secundarios malta dulce, limón y hierba, salpicados de levadura salvaje, miel y especias. La verdad es que, al igual que la otra cerveza de esta fábrica, recuerda mucho a la sidra... no sé si será una característica intrínseca a esta marca, pero también debo decir que mientras conserve un perfil tan cuidado a mí no me parece un inconveniente.

De trago muy refrescante, en parte gracias a su acidez, aunque sin renunciar ni por asomo al sabor. Sorprende que sea capaz de mantener esta cualidad a pesar del claro ahumado que posee, que se mantiene en todo momento tras malta, manzana y limón que forman el núcleo. Una buena ración de clavo, pimienta y levadura adornan un final de amargor y acidez contundentes pero compensados, donde entre notas de cítricos y manzana verde surge un punto de humo y tabaco, que queda en el regusto junto a suaves recuerdos de cuero y madera. Muy distinta de "La Diaoul", pero ambas tienen unas características tan particulares que a casi nadie se le escaparía que ésta también ha salido de la Brasserie des Diaouligs. Sin duda estos bretones tienen una forma peculiar de hacer cerveza que entendería que no fuese del gusto de todo el mundo, pero a mí por lo menos me encanta. Nuevamente, gracias Rosana y Pau.

NOTA: