miércoles, 22 de septiembre de 2010

Londres

Cuando el trabajo durante el curso no da los frutos esperados en Junio (o, como suele ser más frecuente, cuando dicho trabajo ha sido insuficiente), Agosto se convierte en un mes bastante duro, agotador y aburrido a partes iguales. Por ello, tras unos satisfactorios examenes de Septiembre decidí emplear el escaso dinero que aún me quedaba en una especie de auto-premio, un viaje de 5 días a la capital británica acompañado por la preocupantemente musculada Ana.

A estas alturas no es un secreto que Londres es una ciudad muy cara, y como ya he dicho mi situación económica no es precisamente boyante, así que intentamos ahorrar en la mayoría de los aspectos del viaje, el primero de ellos en el alojamiento. Buscando por Internet encontramos varios hostales cuyo precio oscilaba entre 10 y 20 £, uno de ellos estaba emplazado en la famosa Camden Town, distrito alternativo donde los haya, lo cual nos pareció muy atractivo así que fue el que escogimos definitivamente, quedando razonablemente satisfechos pese a que es probablemente uno de los barrios más ruidosos de Londres, al menos por la noche.

Por supuesto, también intentamos evitar gastar más de lo necesario en comida, y salvo una mañana que tomamos un típico desayuno inglés consistente en salchichas, alubias, huevo, champiñones, panceta, torrijas, etc no pisamos un restaurante, y recurrimos a bocadillos al mediodía y comida china, japonesa, tailandesa, mexicana, hindú o italiana para la cena, a unas 4£ el plato. También tuve que hacer unos recortes en tema de cervezas, aunque tampoco fueron demasiado duros, pero eso ya lo contaré más adelante.

La Ciudad

Nada puedo decir de Londres que no esté ya en las innumerables guías sobre esta ciudad que circulan por el mundo, así que me voy a limitar a unos breves apuntes sobre mi experiencia personal. Pateé Camden, Bloomsbury, Clerkenwell, Westminster, Notting Hill, Regent's y Hyde Park, Soho, St. James, Brompton y por supuesto me quedaron muchas cosas por ver, pero si tuviese que destacar algo sería los maravillosos jardines de Hyde Park, repletos de ardillas hiperactivas, la National Gallery y el British Museum, los espectáculos callejeros del Soho, las tremendas calles de la zona de Westminster, el ambiente nocturno de Camden (pese a que de este barrio me echa un poco atrás el consumismo extremo que hay, disfrazado eso sí de alternativismo y rebeldía), el excelente trato de absolutamente todos los londinenses con los que tuvimos trato, siempre dispuestos a echar una mano a un par de turistas perdidos y además con una amabilidad exquisita, y por supuesto los pubs británicos, en las que profundizaré a continuación.

Los Pubs

Salí de Zaragoza con una buena lista de direcciones en la cartera, parte de ellas proporcionada por Boak and Bailey, a quienes agradezco las estupendas recomendaciones una vez más, y otras tantas sacadas de esta página donde relata de forma muy amena donde encontrar pintas a 2 £ en Londres, algo de mucha utilidad en una ciudad donde según el sitio te pueden costar hasta el doble. Como aliciente, los pubs de los 2 £ la pinta venden Samuel Smith, marca que la verdad me gusta mucho, por lo que no me supuso en absoluto un sacrificio tomar unas cuantas Cask Ales allá.

Quedé encantado con el ambiente de las cervecerías que visité, ni rastro de molestos humos, nada de música que impida conversar sin tener que gritar, gente charlando tranquilamente, y siempre un mínimo de 5 o 6 grifos que permitía elegir la cerveza del estilo que más apeteciese en el momento. En lo relativo a este aspecto me cautivó especialmente The Angel, en St Gilles St. 61, muy pequeño y casi sin gente, donde muy a gusto me bebí una Bitter mientras descansabamos de tanta caminata en el Soho. Sin embargo en cuanto a imagen la palma se la lleva Princess Louise, en High Holborn 208, debido a su impresionante decoración victoriana.

Durante la mayor parte del viaje estuve probando distintas variedades de cervezas, la mayoría de ellas bastante conocidas, desde las distintas Samuel Smith, varias Young's, una Bombardier, Fuller's Honey Dew y aun cayó alguna otra de esta marca, London Pride, y un par de IPA, una Greene King y otra cuyo nombre no recuerdo. Sin embargo esto cambió cuando el Lunes por la mañana, unas horas antes de huir al aeropuerto, hicimos una visita al pub que Boak & Bailey más expresamente recomendaron: The Gunmaker's. Según ellos, este local es excepcional por la calidad de las cervezas y por el cuidado con el que su dueño las trata... y no puedo estar más de acuerdo. Allí tomé una pinta de Woodforde's Wherry, una Bitter estupenda, y Moorhouse's Black Cat, una Mild increible que me recomendó el dueño y me dió a probar mientras me daba algunos datos sobre el estilo, y de la que no pude evitar pedir otra pinta. Por desgracia no me dió tiempo a atacar a Mad Goose Pale Ale, la otra que había en Cask, pero es que no habría podido disfrutarla si la hubiese tenido que beber tan rápido.

Como observación curiosa, que para saber si fue pura casualidad o tendencia tendría que pasar mucho más tiempo en la ciudad, en los pubs en los que estuve solo vi pedir Ale a tres personas, dos de ellas en The Gunmaker's. Todos los demás, que no fueron poco, pedían pintas de Alpine Lager o Pure Brewed Lager en los bares de Sam Smith, y eurolager tipo Heineken y demás en los demás garitos. ¿Están conquistando las lager las Islas Británicas en detrimento de sus estupendas cervezas? ¿Ya lo habían hecho y me he enterado tarde? ¿O simplemente me pegué todo el viaje encontrándome con "lagerboys"? Si alguien sabe algo, se agradecerá la aclaración.

La Mejor y la Peor

Curiosamente las dos que se llevan este galardon las tomé en la misma manzana (o si no, casi).

Si no hubiese sido por la visita a The Gunmaker's, para la mejor ahora mismo me debatiría entre dos de Samuel Smith: Old Brewery Extra Stout y Sovereign Best Bitter, ambas de un nivel, para mi gusto, excelente. Sin embargo, la maravillosa Black Cat, una Mild de la cervecera Moorhouse's que tomé allí rompió todos mis esquemas. Oscura, muy sabrosa, con un intenso gusto a humo, sin llegar a una Rauchbier por supuesto pero incluso por encima de Kaiserdom Alt-Bamberg Dunkel, de trago fácil y con un regusto ahumado exquisito. Una auténtica delicia... y una pena que no se haga más cerveza de este estilo.

Y el dudoso honor de ser la peor pinta que he tomado en Londres se lo lleva una cerveza que no es en absoluto mala, Well's Bombardier. Sucedió que la primera vez que fui a The Gunmaker's estaba cerrado así que decidimos entrar en un pub cercano (para ser sincero, el primero que se cruzó en nuestro camino) Allí pedí media pinta, que fué servida sin demasiada destreza, y que para acabar de rematar la jugada estaba caliente como una sopa. Cierto es que una cerveza demasiado fría es un auténtico estropicio, pero tampoco hay que irse al otro extremo.

En fin, hasta aquí el resumen del viaje, espero que no se haya hecho demasiado largo. Dejo como despedida una foto de Hyde Park tomada por una persona mucho más fuerte que cualquiera. ¡Salud!

lunes, 20 de septiembre de 2010

Diebels Premium Altbier

MARCA: Diebels
MODELO: Diebels Premium Altbier
ESTILO: Altbier (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Sexta botella de la caja de Michael, proveniente en esta ocasión de Issum, en la región de Düsseldorf casi tocando con Holanda, de la cervecera fundada en 1878 por Josef Diebels que lleva su nombre. Es una Altbier, tradicional estilo de cerveza alemán que se caracteriza por emplear en la elaboración levaduras de fermentación alta, pese a que después el proceso que sufre la cerveza es de lagerización, razón por la cual se clasifica dentro del grupo de las lager.
Es la primera cerveza de este tipo que comentamos en Hipos, y para ser sincero la primera que he tomado en mi vida, y la verdad es que he quedado muy satisfecho. Es de color marrón caoba con una abundante espuma beige, aunque fugaz y poco compacta. La base del olor es la malta tostada y el caramelo, que está poco acentuado y se va diluyendo poco a poco, y acompañan bastante marcados recuerdos de galletas, notas herbales, que se acompasan a la perfección y le dan un toque exquisito, y aromas de té negro. Se perciben también, aunque con más dificultad por estar muy suavizados, matices metálicos y un leve punto de café.

El sabor es muy intenso, con un dulzor moderado muy medido, dominado también por malta tostada y caramelo, que sigue sin resaltar en exceso, y se añaden con bastante claridad los lúpulos herbales, chocolate y café, consiguiendo junto con leves notas de pan y ciruelas aún más disimuladas un equilibrio estupendo. Aparece hacia el final cierta acidez que recuerda al sidral, y en el regusto notas de té negro, un amargor herbal consistente y un mínimo deje metálico. Quizá la nota cambie más adelante puesto que no tenía precedente con el que comparar, pero muy buena cerveza igualmente, y deliciosa a temperatura ambiente.

NOTA:



Escrito por Sir Asf:

CARACTERÍSTICAS: La última de las cervezas que me quedaban del fastuoso viaje a Düsseldorf, se escondía de forma notable en mi estante de espumosas, tanto que ya había olvidado que todavía podía disfrutar del buen sabor de una rica altbier. Se trataba de Diebels, la cerveza ya comentada por Embracing, que hizo nuestras delicias en Düsseldorf (aún encontrándose caliente y en botella) y nos animó a incluirla en nuestra colosal maleta de vuelta.
Hace unos días encontré el momento perfecto para deschaparla, en una comida familiar, con abundantes y sabrosos platos.

La Diebels presenta un color marrón oscuro entre turbio y cristalino. Se percibe una carbonatación media, con alguna burbuja ascendiendo hacia la superficie, donde se mezcla con una espuma blanca, grumosa y burbujeante, que no abunda en exceso. Su aroma es maltoso y con una base herbal muy suave, que en el sabor se ve acentuada por matices de malta tostada, café y un toque herbal lupulizado hacia el final, que deja un trago seco y delicioso. El resultado es plenamente satisfactorio.

NOTA:



viernes, 17 de septiembre de 2010

Cuvée des Trolls

MARCA: Cuvée des Trolls
MODELO: Cuvée des Trolls
ESTILO: Blonde (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Otra de las cervezas que metí en el saco al pasar por Francia fue esta botella de peculiar etiqueta y nombre, la Cuvée des Trolls. Llamó en seguida mi atención, como es evidente, recordándome de inmediato a la Hobgoblin de Wychwood. Resultó ser una cerveza belga, cuya página web no tiene desperdicio.

Cuvée des Trolls viene fabricada por la Brasserie Dubuisson, una de las más antiguas cerveceras de Wallonia que data de 1769, creada por Joseph Leroy. A lo largo de ocho generaciones se ha ido extendiendo su producción hasta la actualidad. Son los fabricantes de la conocida Bush Beer y aseguran no utilizar aditivos artificiales en ninguna de sus cervezas. En septiembre del año 2000, la Brasserie Dubuisson abre la microcervecería Le Brasse-Temps, donde comienza a producir la cerveza Cuvée des Trolls, dirigida a un sector más joven que la Bush.

La cerveza (que se sirve en copa de cáliz o de tulipán), luce un color anaranjado que recuerda a la miel, en el que a penas se ven burbujas subiendo hacia la superficie. La espuma, poco abundante, no tarda en desaparecer, ya que es de burbuja muy fina (fallo mío el no tener un recipiente más acorde), aunque genera espuma en la boca, al contacto con el paladar. Su aroma, bastante penetrante, desprende notas afrutadas, a naranja, limón y cítricos varios, con presencia de la malta. Su sabor presenta una composición similar: naranja y limón (utilizan cáscara de naranja para hacer esta cerveza), algo de miel, malta y final lupulizado. El toque cítrico junto al alcohol aporta un matiz interesante.

Curiosa cerveza que ha resultado interesante y agradable. La foto ha salido movida, todo son excusas para volver a hacerme con un ejemplar.

NOTA:

lunes, 13 de septiembre de 2010

Birra Moretti Baffo D'Oro

MARCA: Birra Moretti
MODELO: Birra Moretti Baffo d'Oro
ESTILO: Pale Lager (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Italia

CARACTERÍSTICAS: No sabía de la existencia de este modelo de Birra Moretti hasta que la musculosa Ana me trajo esta botella de su viaje a la bella Sicilia, debido al cual le envidio enormemente (aunque de todas maneras un regalo cervecil siempre consuela un poco). No tenía muy claro cuales son las diferencias entre esta y la Moretti original, y después de probarla tampoco he resuelto demasiado esta duda, aunque la cerveza la he disfrutado igualmente, que es lo importante.

De color dorado ambarino, proteje el líquido una reluciente espuma blanca que aún se mantiene más rato del esperado, formada por las miles de burbujas que ascienden hasta ella. Al olfato me recordó inmediatamente a la rubia clásica de la marca, de una intensidad moderada, muy refrescante, con una base de malta dulce sobre la que se evidencian lúpulos herbales, ligeramente picantes, y mínimas notas de lima.

Un poco más áspera en boca de lo esperado pero no obstante buena, comienza con suave malta y marcada acidez cítrica, la cual se combina con el consistente amargor para derivar en un final levemente seco, un poco picante, donde las notas herbales son muy claros. De cuerpo ligero y trago fácil, probablemente no sea una cerveza para degustar pero sí para tomar tres o cuatro a lo largo de una tarde sin aburrirse demasiado.

NOTA:

sábado, 11 de septiembre de 2010

Blanche de Namur

MARCA: Blanche de Namur
MODELO: Blanche de Namur
ESTILO: Witbier (4'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Llevaba bastante tiempo sin tomar una Wit, y en una reciente excursión a la tienda cervecil vi un par de botellas y me relamí pensando en lo que las disfrutaría en la terraza, bajo el Sol. No hace falta decir que les eché el guante al instante, la Hoegaarden Gran Cru sigue en mi bodega (de acuerdo, trastero) a la espera de que la requiera para refrescarme, mientras que la otra la bebí la semana pasada.

Sabía que esta cerveza había recibido recientemente varios reconocimientos en los World Beer Awards, concretamente el de "Mejor Cerveza de Trigo", por lo que la curiosidad era considerable. La serví en un vaso que compré en un mercadillo callejero en Amsterdam, y pude apreciar su color amarillo pajizo con una blanquísima espuma de la que en segundos persiste una fina película. El aroma es muy penetrante, frutal y especiado, con una base de naranja amarga y más suave limón, trazas de plátano de fondo y leves reminiscencias de frutas tropicales y albaricoque. Le añade además cierta complejidad la adición de un punto floral y un destacable soplo de clavo y cilantro, que le dan un toque estupendo.

De cuerpo ligero, es especialmente refrescante gracias en parte también al fuerte carácter cítrico que se manifiesta desde el primer momento, cuando aparecen intensas notas de naranja que se mezclan con otras de limón, a lo que se suma un soplo de especias picantes y más cilantro, con una acidez consistente, incluso algo astringente. En el final dicha acidez se combina con un marcado amargor, la alta carbonatación llega a su culmen, y desemboca en un final seco, con cilantro, naranja y especias. Una buena cerveza, un poco molesta tanta efervescencia y quizá me sobrepasa un poco tanta acidez y tanta sequedad, pero perfectamente disfrutable. Eso sí, las he tomado mejores.

NOTA:

viernes, 10 de septiembre de 2010

La d'Artagnan

MARCA: La d'Artagnan
MODELO: La d'Artagnan
ESTILO: Bière de Garde Blonde (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Continuando con el grupo de cervezas artesanales francesas, llega el turno de una cuya imagen y nombre refieren a un célebre personaje galo, y no es Panoramix. Adquirida en un gran hipermercado, en una sección especial de cervezas, La Choulette fue una de las que más me llamó la atención. Por su etiqueta, evidentemente.

Se trata de La d'Artagnan, otra bière de garde, que viene fabricada por la cervecería artesanal La Choulette, por Les Gascons de la Distribution. La Choulette es la única fábrica de cerveza de las trescientas del distrito de Valenciennes que quedó en pie. Data de 1885, pero es en 1985 cuando se convierte en una cervecera que irá pasando de generación en generación hasta nuestros días. El nombre La d'Artagnan hace honor al valeroso mosqueperrotero.

En la copa luce un color ambarino dorado en el que se aprecian gran cantidad de burbujas que se elevan hacia la superficie. Hace gala de la tan usual espuma blanca densa y duradera, aunque no muy abundante. En seguida se percibe un aroma muy afrutado, donde se distingue el plátano y el limón, entre otros. Además, queda complementado con un toque de miel, malta y algo de alcohol. Su sabor es entre ácido y dulce, con clara presencia afrutada y melosa. Su 8'5% pasa bastante desapercibido en la cabeza, aunque aporta un toque especial al sabor que hacen de esta cerveza una elección más que acertada.

NOTA:

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Cerveza Mudéjar Frambuesa

MARCA: Cerveza Mudéjar
MODELO: Cerveza Mudéjar Frambuesa
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Pese a no haber quedado demasiado contento con las dos Mudéjar que tomé en casa, como ya comenté recientemente, me dispuse a probar la de frambuesa con altas expectativas, motivadas fundamentalmente por la satisfacción que Pau expresó acerca de esta en una entrada del pasado mes de Mayo, y también curiosidad por no tener la más remota idea de en qué punto se han añadido las frutas a la cerveza (completo la información, me ha llegado la respuesta de Alejandro Bes vía e-mail en la que me explica que añaden zumo de frambuesas al tanque de fermentación)

Busqué un momento adecuado para una cerveza de este tipo, al igual que hice con Mort Subite, para así disfrutarla al máximo, y ese fue un instante de ansia de dulces después de cenar. Servida en copa es de color granate, con reflejos rojizos, cubierta por una densa capa de espuma rosada, cremosa y que duró hasta el último trago, una mejora enorme de este aspecto en comparación con las dos cervezas probadas anteriormente. El aroma, tan dulce como era previsible, está dominado por notas de frambuesa madura, muy penetrante pero sin llegar a saturar, y más secundario se aprecian con claridad recuerdos de bizcocho con leve chocolate acompañandole y un sutil punto de acidez. Un comienzo brillante, realmente delicioso.

Por supuesto en boca es también dulce, un suavísimo gusto a malta da paso a la frambuesa, con esa acidez residual que normalmente tiene esta fruta que junto con una mínima aspereza consigue un sabor muy natural. De trago fácil pero en absoluto falta de cuerpo, fluida y muy sabrosa, se le suman a medida que avanza el trago esas notas de bizcocho y chocolate supeditadas a la frambuesa, manteniendose sin embargo lejos de ser excesivamente azucarada. El final es largo y suave, y a pesar de seguir siendo la frambuesa la tónica dominante también se intuyen matices de fresas silvestres, cerezas algo más diluidas y bizcocho. Realmente buena esta cerveza, en mi opinión muy por encima de todas estas Lambic con jarabes de fruta que circulan por los supermercados del país.

NOTA: