lunes, 13 de octubre de 2014

Cata "Ibeerian" en La Vinoteca: Pale Ale

Cuando con el inicio del verano terminó el pasado ciclo de catas de La Vinoteca de Pamplona, yo estaba seguro que Rubén, quien se encarga de la organización de estos eventos, ya estaba pensando en el tema para la temporada siguiente aunque, para ser sincero, no tenía ni idea de por donde podían ir los tiros. Esta incógnita se mantuvo hasta hace un par de semanas, cuando Rubén me mandó por correo el programa de la primera sesión y pude comprobar que durante esta temporada el foco se iba a centrar exclusivamente en las cervezas nacionales.

El tema me resultó muy interesante ya que mis conocimientos sobre las micros españolas no son demasiado amplios. Además debo de reconocer que mis experiencias con estas fábricas han sido hasta el momento bastante decepcionantes, salvo por 7 u 8 excepciones más que notables, así que me apetecía que alguien me presentase algunas referencias de calidad para conocer otras marcas de las que puedo comprar botellas sin miedo a sorpresas. Como último punto positivo, el ponente que iba a encargarse de dirigir la primera cata ya tenía mi simpatía de antemano, pues no era otro que Igor Oyarbide, responsable de Localbier, una de las páginas dedicadas al mundo cervecil que más me han gustado en estos últimos años, además de llevar también Garagardo Ahotsa, web sobre la cerveza en euskera.

Empezamos la jornada con una presentación de Rubén, como es habitual, seguida de una disertación sobre aspectos bastante técnicos de la cerveza llevada a cabo por Igor, antes de meternos a probar a las Pale Ale protagonistas de la tarde:

- DouGall's 942 (Cantabria)
- Naparbier Napar Pale Ale (Navarra)
- La Petra Rubia (Navarra)
- Laugar EPA Euskadiko Pale Ale (Bizkaia)
- Edge Brewing Flor de la Vida (Barcelona)
- Bizarra Rubia (Salamanca)

Como siempre el tiempo se pasó en un suspiro, gracias en parte al buen ritmo que le introducía Igor mediante sus explicaciones cargadas de detalles sobre el proceso de elaboración, además de su disección de las características de cada cerveza, mientras Rubén completaba la sesión con acertados comentarios e interesantes matizaciones.

En cuanto a lo probado, mi sensación fue bastante positiva. La gran sorpresa fue, para mi gusto, la elaboración de los americanos de Edge, una APA de altísimo nivel; de todas formas, esto no quita valor a una vieja conocida como DouGall's 942. También me gustó bastante la EPA de Laugar, aunque la tónica general fue que le faltaba maduración. En el otro lado estaban Napar Pale Ale, que sin estar mal sin duda no estaba en su nivel habitual, quizá debido el cambio de maquinaria; La Petra Rubia, que a pesar de encandilar a la mayoría de los asistentes a mí no me entusiasmó; y por último Bizarra Rubia, una cerveza que difícilmente calificaría como una APA.

La verdad es que fue un genial comienzo para este nuevo ciclo de catas, estoy seguro que tanto las cervezas como los ponentes mantendrán un nivel por lo menos tan bueno como el demostrado en esta primera sesión. Simplemente me queda agradecer al Club Bier de La Vinoteca y a Rubén el haberme invitado.

martes, 7 de octubre de 2014

Arévaka Uxama Oro

MARCA: Arévaka
MODELO: Arévaka Uxama Oro
ESTILO: American Pale Ale (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Con las cervezas nacionales cada vez estoy más perdido, puesto que continuamente me llegan botellas de marcas cuya existencia ignoraba por completo. Es el caso de ésta que comento hoy, que me trajeron mis padres, (¡gracias mil!) junto con otras 2 variedades de la misma marca, después un viaje por la Península con parada en el bellísimo Burgo de Osma, donde está emplazada la fábrica. La empresa, cuyo nombre hace referencia al pueblo celtíbero que ocupaba la zona Este de Castilla y León en la época prerromana, comenzó sus andaduras en el año 2012, y elaboran en la actualidad 4 cervezas, varias de ellas con recetas bastante atrevidas que incluyen ingredientes como miel o enebro.

Cuando me inicio en una marca suelo preferir probar primero su cerveza más sencilla, ya que me permite hacerme una impresión general de la fábrica y a la vez estimar qué es lo que puedo esperar de sus productos. Eso hice con Arévaka, y una tarde del fin de semana pasado me lancé a probar su Uxama Oro. Se trata de una cerveza color bronce anaranjado, de importante turbidez, que genera al servirla una fugaz espuma blanca de la que apenas queda nada pasados unos minutos. Desprende un perfume dulce y variado, de intensidad leve-moderada, en el que se combinan malta y toffee con gran cantidad de fruta, principalmente naranja y albaricoque, mientras envuelve una capa de lúpulo floral. Quizá queda un poco corto, pero el conjunto es bueno.

En boca, sin embargo, las cosas no parecen ir tan bien. Inicialmente presenta una acidez bastante descontrolada, cargada de limón y pomelo, que acaba derivando en tenues notas de malta tostada, frutos secos y algo más prominente naranja dulce. Termina con un amargor marcado, astringente, con un deje floral, toques de cítricos y fruta madura, siendo manzana golden lo que más llama la atención, antes de concluir el trago de forma bastante rápida. La sensación que tuve es de estar frente a una cerveza simple, poco carismática e incluso un poco rústica, y además el escaso cuerpo no contribuye a darle el empuje que en mi opinión necesitaría. Cuando reposa y se calienta gana un poco, aunque tampoco llega a convencerme. Por algún motivo sospecho que las otras referencias me van a gustar más... al menos eso espero.

NOTA:

lunes, 29 de septiembre de 2014

Tienda en Zaragoza: Cervezorium



NOTA IMPORTANTE: Esta tienda cerró en Marzo del 2016.

Hace ya más de 2 años que dejé atrás Zaragoza, y al hacerlo me descolgué bastante del panorama cervecil de la ciudad. Poco a poco han ido llegando a mis oídos algunas novedades, siempre con algo de retraso, sobre las cuales intento investigar cuando puedo: estuve al tanto de la apertura de la tienda Biera y de su cierre pocos meses después, me he ido enterando de la aparición de algunas nuevas marcas de cerveza aragonesas y, por último, hace 3 meses supe de la existencia de Cervezorium, una tienda especializada en cervezas que lleva alrededor de un año instalada cerca del centro.

Desde hace ya un tiempo tenía planeado hacer una visita a esta tienda la próxima vez que fuese a la ciudad, y el pasado fin de semana surgió la ocasión. Así, me acerqué una mañana del Sábado con la idea de llevarme alguna botella de las que había visto en su página de facebook, siempre en función del precio al que estuviesen. Entre el repertorio encontré prácticamente de todo, desde clásicos de diversas procedencias hasta cervezas de marcas modernas de gran renombre, como Moor, Brooklyn, Stilwater, De la Senne, Moylans, Anchor, Rogue, Brewfist, De Molen, etc, e incluso alguna rareza, como unas artesanales eslovenas cuyo nombre soy incapaz de evocar. Había además una estantería dedicada casi en exclusiva a referencias aragonesas y/o nacionales, mostrando así el fuerte interés del dueño en potenciar el consumo local, y una modesta recopilación de material de homebrewing.

Me gustó comprobar al charlar con su dueño como, al igual que yo, no entiende la cerveza de calidad como un producto dentro del mundo "gourmet" sino más bien una como bebida popular, y por ello intenta mantener los precios tan bajos como le resulta posible. En este aspecto hay que reconocer que, salvo las Cantillon, que estaban algo caras para lo que se suelen encontrar en España, las demás cervezas estaban bien de precio aunque, eso sí, sin demasiadas diferencias respecto al resto de tiendas físicas nacionales.

Tras decidirme por un par de botellas de De La Senne me despedí, volviendo a casa con una sensación bastante buena. Quizá no sea la tienda que más me ha gustado hasta el momento pero tiene cosas que valoro mucho: calidad, honestidad y buen ambiente. Volveré sin dudarlo cuando pase de nuevo por la ciudad.




TIENDA: Cervezorium
DIRECCIÓN: c\ Braulio Lausín, 4
LOCALIDAD: Zaragoza
PROVINCIA: Zaragoza

lunes, 15 de septiembre de 2014

Tienda en Pamplona: Oso Blanco

 NOTA IMPORTANTE: Esta tienda cerró durante el verano del año 2015.

Uno de los vicios que he adquirido desde que me trasladé a Pamplona es comprar fruta, verdura y carne en comercios de barrio. Desde luego es una práctica que tiene muchas ventajas: la calidad de los productos es mejor, o al menos esa es mi impresión, sale mejor de precio y encima apoyas a la economía local... sin embargo, también me supone perder más tiempo en comprar porque, por algún motivo que no acabo de comprender, me he encariñado con tiendas que me pillan un poco lejos. Pues bien, esta manía me permitió detectar hace un par de semanas una tienda de productos del Este que de otra forma jamás habría encontrado, pues no habría tenido ningún otro motivo para pasar por la calle del barrio de San Juan en la que recientemente abrieron sus puertas.

Su nombre, Oso Blanco, le resultará familiar a algunos habitantes de esta ciudad porque hasta hace unos meses adornaba el rótulo de una pequeña tienda de alimentación emplazada en Travesía Bayona, también regentado por los mismos dueños. Recuerdo haber echado algún vistazo al pasar por delante, cuando todavía estaba abierta, sin que ninguna cerveza llamase la atención; sin embargo, cuando vi lo que se escondía tras el escaparate de su nuevo local en la calle Monasterio de Irache ¡casi me saltaron los ojos de las órbitas!

Las botellas de cerveza apiladas tras el cristal son sólo el anticipo de las más de 20 marcas distintas de varios países del Este de Europa que se pueden encontrar dentro de su nevera, entre ellos Rusia, Ucrania, Bielorrusia, Polonia o Lituania, aparte de otras tantas en las estanterías y algún ejemplar de kvass. Por supuesto, y al igual que la mayoría de los comercios de este tipo, no venden exclusivamente cerveza sino que también cuentan con refrescos variados de diferentes orígenes y licores, con especial énfasis en el vodka. En cuanto a la parte de alimentación, en comparación con otras tiendas de Pamplona como Nash Delikatessen la oferta es algo menor en lo que se refiere a carne y charcutería, aunque no se echan en falta productos de otro tipo.

Hacía tiempo que no me resultaba tan interesante la oferta cervecil de una tienda de este tipo; el día que la descubrí salí fascinado, y más todavía al volver un par de semanas después y comprobar que gran parte de las botellas que había visto en la primera ocasión habían cambiado. Los precios además no podrían ser más económicos: salvo excepciones todas están por debajo de 1'30 , e incluso alguna ni siquiera llega a 1 . Por último, el amable dependiente muestra en todo momento una gran disposición a asesorar al cliente, lo que puede ser muy útil para todos aquellos que no estamos muy familiarizados con la gastronomía de Europa Oriental. Recomendadísima.


TIENDA: Oso Blanco
DIRECCIÓN: Calle Monasterio de Irache, 35
LOCALIDAD: Pamplona
PROVINCIA: Navarra

domingo, 7 de septiembre de 2014

Baias Ambar

MARCA: Baias
MODELO: Baias Ambar
ESTILO: Amber Ale (4'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Con agua del macizo del Gorbea, entre Álava y Vizcaya, elaboran sus productos desde el año 2007 una de las cerveceras nacionales que se pueden empezar a considerar veteranas, Baias Garagardotegia. Su fábrica está emplazada en Oiardo, un pueblo oculto en una zona privilegiada de los montes de Euskadi, y además muy cercana a la cuenca del río que da nombre a la marca. Hacía tiempo que tenía ganas de probar algún producto de esta marca, principalmente por las buenas referencias dadas por un sabio en materia cervecil como Chela, de la C.A.A.C, y aprovechando que tengo una buena amiga vitoriana le pedí que me trajese un par de botellas... dos semanas antes de que las incorporasen a las referencias del supermercado de debajo de mi casa. En fin, cosas que pasan, lo que no quita que le tenga que agradecer a Alejandra el haberme conseguido estas cervezas, además de alguna cosilla especial que se vendía en la tienda Birrak de la capital de Euskadi. ¡Eskerrik asko!

Ésta que comento hoy fue la primera referencia que salió al mercado, una Amber Ale de apenas 4'5º de alcohol. Es de color pardo anaranjado, con reflejos rojizos al trasluz, y produce al servirla una abundante espuma beige, de burbuja gruesa y aspecto cremoso. El aroma evoca a las Ale belgas, con un importante dulzor compuesto por malta, denso y pegajoso caramelo, y notas de azúcar candy, completado mediante abundante fruta madura, entre las que predominan melocotón en almíbar, plátano, y más leve manzana asada y níspero. Tras el ataque inicial se empiezan a notas dejes levadurosos, notas de miel muy bien ensambladas y lúpulo floral, terminando de redondear un perfume que sin duda tiene al dulce, pero capaz de conservar el equilibrio.

El sabor sigue una linea similar, aunque sin duda es más plano. Predomina el dulce, de nuevo dirigido por malta levemente tostada, toffee y fruta madura, con algo más de énfasis en los cítricos, sobretodo naranja, y algo de albaricoque. El trago pasa fugaz por boca, con una efervescencia algo excesiva que apaga un poco el sabor, para terminar en un final de amargor comedido, cítrico y herbal, y ligeramente astringente. Quedan en el largo regusto recuerdos de lúpulo floral y notas fenólicas, muy representativas de lo percibido hasta el momento. Esperaba más de esta cerveza, a tenor de los comentarios que me habían llegado, y la verdad es que no me parece que llegue a romper. Los principales problemas que le veo es que, si bien en nariz es compleja y variada, carece de cuerpo y expresividad en boca, (en parte por culpa del exceso de gas) quedando una cerveza que sin ser desagradable tampoco es capaz de mantener la atención. De todas formas, me da la impresión de que, si esos aspectos se corrigen, el resultado podría ser bastante bueno.

NOTA:

domingo, 31 de agosto de 2014

Thornbridge Jaipur India Pale Ale

MARCA: Thornbridge
MODELO: Thornbridge Jaipur India Pale Ale
ESTILO: India Pale Ale americana (5'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: A pesar de ser un país con un buen número de fábricas en funcionamiento desde hace varias décadas, superando algunas incluso el siglo de actividad, hay algunas cerveceras jóvenes que están recibiendo mucha atención estos últimos años. Entre ellas estaría sin duda Thornbridge Brewery, una fábrica fundada en el año 2005 en Thornbridge Hall, una casa de campo del condado de Derbyshire cuyos orígenes datan del siglo XII. Inicialmente eran Stefano Cossi y Martin Dickie quienes estaban al cargo de la elaboración, pero 2 años más tarde el segundo abandonó la empresa para crear junto a James Watt la archiconocida Brewdog, por lo que fue sustituído por Kelly Ryan. En los años siguientes se fueron incorporando otros profesionales, contando en este momento con más de 30 trabajadores que han conseguido situar a esta cervecera en lo más alto del panorama británico actual.

La que voy a comentar hoy es posiblemente su elaboración más representativa, una India Pale Ale llamada Jaipur, galardonada con múltiples premios desde su creación. Es una cerveza de color dorado mate, ligeramente pálida, con alguna burbuja aislada que asciende con rapidez a través de un líquido de leve turbidez. De su consistente espuma blanca jabonosa escapa un aroma profundo, con un fondo de malta dulce, galleta, suave miel y algún toque de cereal, cubierto por una generosa ración de fruta fresca, entre la que destacan limón maduro, naranja de sangre, suave manzana, y en una capa superior melocotón y maracuyá. Llama la atención la presencia de trigo crudo, poco habitual en este estilo de cervezas, que se entrelaza con marcado lúpulo floral y toques de clavo y cilantro.

Este perfume tan plácido no es otra cosa que el anticipo de un sabor también relajado, con un paso por boca denso y sedoso. Empieza dominando la malta, acompañada de cereales y trigo crudo, y progresivamente se va sumando la fruta, aunque con un dulzor mucho más limitado que en nariz. Se detectan con facilidad limón, pomelo, uva blanca y arándanos, mientras que notas de naranja amarga y manzana verde son algo más esquivas. Durante todo el trago mantiene un perfil ácido, lo que sirve para que el amargor final, bastante marcado, resulte menos estridente. En este campan a sus anchas los cítricos, junto con una buena dosis de hierba y pino, y un leve deje medicinal y mineral que delata su origen británico. Es una IPA sobria y elegante; lejos de los extremismos del nuevo mundo, aunque más fresca y frutal que la mayoría de los ejemplos británicos. La verdad es que siempre me ha parecido una elaboración sensacional, muy completa y trabajada, y que no desmerece en absoluto a su reputación.

NOTA:

domingo, 24 de agosto de 2014

Emelisse Innovation Series: Smoked Rye IPA

MARCA: Emelisse
MODELO: Emelisse Innovation Series: Smoked Rye IPA
ESTILO: India Pale Ale de centeno ahumada (6'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Países Bajos

CARACTERÍSTICAS: Con lo mucho que acostumbran a gustarme las cervezas de Emelisse, cuando vi en mi tienda habitual una botella de sus Innovation Series sentí ganas de colaborar con esta fábrica en la experimentación. De esta gama tenía fichada desde hace tiempo su Crème Brûlée Stout, una cerveza cuyo nombre no podría resultar más apetitoso, pero por desgracia la que estaba en las estanterías no era ésta, sino una IPA de centeno con malta Rauch, una mezcla bastante peculiar y, por qué no decirlo, peligrosa, a la que me enfrenté con ciertas dudas acerca de lo que podía encontrar. Lo que sí que tenía claro es que, fuera como fuese, el resultado merecía por lo menos un post aquí para relatar la experiencia.

El color que me iba a encontrar era todo un misterio, aunque por el centeno se podía deducir que iba a tener un tinte algo oscuro; así fue, y al servirla en copa me encontré un líquido color bronce anaranjado, de aspecto turbio. De su compacta espuma gris emanaba un llamativo aroma, inicialmente copado por bayas, uvas, cítricos, hierba y más leves recuerdos florales, quedando un perfume quemado en segundo plano. En cuanto reposa la cerveza este último emerge y le gana la mano al lúpulo, al envolverlo en un ahumado marcado, con toques de carbón, bajo el cual subyacen malta dulce, frutos secos y un mínimo punto tostado.

En boca el orden se invierte. Lo primero en aparecer es la dulce malta, acompañada por suave caramelo, especias picantes y fruta madura, destacando uva blanca, naranja dulce y algo de albaricoque, para dejar después paso al ahumado, con un fondo de cítricos y hierba. Éste se potencia en los últimos instantes, extendiendo intensos recuerdos de pomelo, limón, pino, hierba y mínimo jengibre que se combinan con el amargor final, mientras un dulzor maltoso impregnado de centeno y humo constituye el fondo. Para lo rara que es la combinación el resultado es bastante bueno, y tanto la agradable textura como el equilibrio con el que se presentan todos los matices son prueba fehaciente de que detrás de esta elaboración hay una mano habilidosa y experimentada. No obstante hay algo que me molesta, posiblemente el humo, y que me hace no tener especial interés volver a tomar esta cerveza. Supongo que es a lo que se exponen los experimentos.

NOTA: