viernes, 15 de junio de 2012

Tienda en Pamplona: La Vinoteca

En mi lista de tareas pendientes llevo arrastrando la reseña de La Vinoteca unos tres años, que fue cuando descubrí este establecimiento en uno de mis frecuentes viajes a Pamplona, pero ya fuese por no llevar la cámara de fotos encima o por cualquier otro motivo siempre acababa dejándola para la próxima ocasión, a pesar de que prácticamente siempre que estaba por la ciudad acababa pasando para comprar algo que amenizase una comida, o simplemente por reponer mi arsenal.

En estos tres años muchas cosas han cambiado en esta tienda; poco a poco fue aumentando el número de estanterías dedicadas a la cerveza (evidentemente es una tienda más centrada en el vino), se pasó de una clara hegemonía belga inicial a un repertorio mucho más variado, empezaron a proliferar actividades del Club Bier, y como la última novedad, que descubrí a los pocos días de instalarme definitivamente en la ciudad, las botellas de cerveza conquistaron gran parte de la planta baja de uno de los dos locales de la empresa, incluyendo entre las referencias cervezas británicas, francesas, alemanas, españolas, checas, etc...

Hace pocas semanas acompañé el resumen de una cata que me invitaron a dirigir con varias fotografías de la misma, en las que se podía intuir la gran atención que le prestan al diseño y la presentación, aspecto sin duda muy importante en un negocio de cara al público. No obstante, no se quedan solo con la imagen sino que es evidente que también se pone empeño en conseguir siempre referencias interesantes, pudiendo encontrar con bastante frecuencia nuevas cervezas, además a precios muy competitivos. Prueba de ello es los 2'5 euros que pagué recientemente por cada una de las St. Peter's que me llevé a casa, por poner un ejemplo.


En cuanto a vinos no podría opinar, pues lo cierto es que no estoy demasiado metido en el tema, pero para los amantes de la cerveza este es uno de los sitios de paso obligado de Pamplona, y personalmente una de las mejores tiendas físicas que conozco. Atención espléndida, surtido variado y de calidad, y precios muy ajustados; poco más se puede pedir.



TIENDA: La Vinoteca
DIRECCIÓN: Calle Esquiroz, 22 trasera / Calle Chapitela, 15
POBLACIÓN: Pamplona
PROVINCIA: Navarra

martes, 12 de junio de 2012

Domus Summa

MARCA: Domus
MODELO: Domus Summa
ESTILO: Brune (7'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Y la última de las Domus que me quedaban por probar, la de mayor concentración alcohólica y que asemejan en ciertas características a algunas cervezas belgas de abadía. Tenía una mezcla de curiosidad y miedo por encontrar en el aroma ese punto desagradable que noté en la Regia y la Aurea. Por suerte esta vez no fue así, lo que me anima a volver a probar estas dos cervezas, por si se hubiese tratado de una tirada en mal estado.

La Summa es de un color marrón oscuro bastante opaco, con brillos rojizos al trasluz y sedimento en el fondo del vaso, muy común en estas cervezas. La espuma forma una capa abundante que al rato se torna más mediana, aunque se mantiene esponjosa hasta el final del trago. Enseguida se puede apreciar un intenso aroma a malta tostada, seguido de notas chocolateadas, de café y de miel en menor medida.

El trago está en esta línea, intensificando el aroma. Sabor intenso a chocolate y café, con recuerdos del torrefacto. El final se torna seco y deja un regusto en boca del todo delicioso. El alcohol, que se encuentra en abundancia (7'2%) no llega a tapar el resto de matices, convirtiéndose en un acompañamiento más que correcto. Podría pasar desapercibida como una Ale Belga al uso, con todas sus consecuencias.

Muy rica, toda una sorpresa después de las otras dos. Ni rastro de este aroma desagradable al rato.

NOTA:





Actualizado por Embracing Darkness

CARACTERÍSTICAS: Tenía bastantes ganas de probar las Domus, motivado sobretodo por lo bien que han hablado siempre de ellas los de Lupuloamansalva, pero no había tenido demasiadas oportunidades de hacerlo. Por eso me alegré mucho cuando recibí de manos de la "navarrica" Carmen una bolsa con las tres primeras botellas que sacaron al mercado, regalo que venía desde la ciudad donde se elaboran, Toledo, y en el que había participado también su novio Miguel, toledano de pura cepa. A ambos les quiero agradecer el detalle y de paso mandarles un abrazo, ahora que tantos kilómetros impiden que nos veamos tan a menudo como antes.

Pese a que no sea lo fundamental, con un diseño tan sobrio y cuidado como este la marca tiene la mitad ganado, al menos a mí me pone en una buena predisposición, y más aún cuando al servirla da una imagen espectacular, con un líquido color bronce, anaranjado, que por la intensa carbonatación parece en plena ebullición, formando una espuma que crece imparable. En la nariz se presenta con complejidad y fuerza, logrando un hábil equilibrio entre malta, caramelo y suave azúcar moreno con melocotón, mandarina y cáscara de naranja, dejando en un plano más discreto miel y levadura belga. Continúa la senda de la fruta el lúpulo, que aporta un soplo de cítricos y flores, ligeramente especiado, que acaba de redondear un aroma exquisito.

En el sabor el dulzor está bastante más limitado, al igual que la fruta, y tiende más hacia los tostados, frutos secos como avellanas o almendras, y más leves caramelo y azúcar quemado. A mitad de trago sin embargo abre hueco para que se insinúen naranja y albaricoque, amable preparación antes de iniciar un final cuesta arriba, con un amargor intenso, enólico, donde hacen acto de presencia lúpulo herbal, frutas oscuras, suaves cítricos y mínimos recuerdos de levadura. Es potente, con mucho cuerpo y un punto de alcohol de esos que dejan cicatriz, pero que no solo no molesta sino que da una calidez que la hacen perfecta como cerveza de sobremesa. Una grata experiencia, tendré que apurarme en probar las otras dos botellas.


NOTA:

jueves, 7 de junio de 2012

Duvel Groen

MARCA: Duvel
MODELO: Duvel Groen
ESTILO: Blonde (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Si tuviese que elaborar una lista de mis cervezas belgas favoritas sin duda Duvel estaría entre ellas, y es que esta diabólica belga es, al menos en mi opinión, una de las rubias más completas que salen de este país, además con una distribución suficientemente extensa como para que sea extremadamente fácil de encontrar. Por desgracia, esto no pasa con los otras cervezas de esta marca y es poco habitual ver en este país su Tripel Hop, su Draught y la que voy a comentar hoy, Groen, que pese a comercializarse unicamente en Bélgica se pudo conseguir durante unos meses en la Península gracias a Zombier.

A simple vista es evidente su diferencia con la Duvel original, esta es mucho más pálida, más transparente, y está cubierta por una espuma de aspecto jabonoso mucho menos consistente. El aroma es algo liviano, centrado sobretodo en malta, cereales y frutas ácidas, como manzana verde y limón, y deja más de fondo uva blanca, levadura y un suave manto de lúpulo herbal y cítrico. Parece una cerveza mucho más comedida, y sin que esto tenga por qué ser algo malo lo cierto es que casi me decepcionó un poco.

El patrón es similar en boca, con una buena base de dulce malta, limón y banana, y suaves notas de uva y miel en un segundo plano. Destaca la intensa carbonatación, cuya efervescencia da a la cerveza una textura achampanada, y que da la impresión de potenciar los cítricos, haciéndola más similar incluso a esta bebida. Por su parte, el lúpulo también tiene una fuerte presencia, bastante mayor de la habría esperado, y acaba formando un amargor intenso, seco, cargado de hierba y especias, que deja de propina un calor enólico en el fondo del estómago. Me ha recordado un poco a Zinnebir de De La Senne, aunque algo más plana y con menos encanto que esta, y si bien me ha gustado también he de decir que la esperaba mucho mejor.

NOTA:

domingo, 3 de junio de 2012

Hofbräu Munchen Oktoberfest

MARCA: Hofbräu
MODELO: Hofbräu Munchen Oktoberfest
ESTILO: Märzen de Oktoberfest (6'3% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Tenía esta botella rondando por casa desde hacía tiempo, regalo de Embracing, y tras descubrir que la despensa de Huesca se ha quedado prácticamente vacía de cervezas, decidí echarle el diente. Esta märzen viene de la casa Hofbräu, de la que hablamos en el post de la Hofbräu Original.

Tiene un color dorado, pálido y muy cristalino, en el que no se aprecian demasiadas burbujas subiendo a la superficie. La espuma es blanca y muy burbujeante, aunque resiste en cantidad apropiada un buen rato. Finalmente forma una fina película blanquecina.

Despide un aroma en el que destaca el punto herbal, sobre todo. En menor medida se percibe la malta, el caramelo y la levadura. No es demasiado intenso, aunque tampoco vaticina un resultado negativo. En boca es suave, con sabor herbal y ligeramente afrutado. Hay unas leves notas metálicas que no llegan a destrozar el trago pero que están ahí. En su final es espumosa, y deja aflorar la malta, para terminar con un toque amargo y seco. El regusto me recuerda a otras cervezas märzen del estilo.

En general no es una maravilla de cerveza, pero para nada una mala opción.

NOTA:





Actualizado por Embracing Darkness

CARACTERÍSTICAS: No son muy habituales las ediciones de Oktoberfest en España, exceptuando las latas  de Paulaner de 1 litro que nos regalaron el año pasado, y por este motivo cuando vi las de Hofbräuhaus en las estanterías del Corte Inglés, a 1'25 euros y en promoción 2 x 1, hice un buen acopio. Han pasado ya 6 meses desde entonces, y pese a que he repartido unas cuantas de las que me llevé entre los amigos, todavía me quedaba esta botella en la reserva, que abrí la semana pasada tras un día de trabajo algo pesado.

No hay que esperar en este tipo de cervezas una complejidad extrema sino simplemente una carga de malta algo mayor, que se muestra ya en su color dorado, algo más oscuro e intenso que en la Hofbräu original aunque igualmente brillante, y en su aroma, bastante más dulce y almibarado. En este, siguiendo lo habitual en este estilo, es la malta la que lleva la voz cantante, con intensos recuerdos de manzana asada y leve limón, que se erigen sobre un nivel más secundario de miel y lúpulo floral, salpicado de clavo. Tanto por el lúpulo como por el manejo de la malta, no cabe la menor duda de que esto es 100% alemán, algo que quizá a algún aficionado a las cervezas más modernas no le emocione demasiado, pero que a mí personalmente me maravilla.

En boca clavan el sabor, mantiene con una fuerza considerable la malta y la miel, pero equilibra su dulzor con manzana, cítricos y lúpulo noble, algo más herbal aquí, consiguiendo reducirlo hasta un nivel que permite que se expresen con holgadez todos estos matices. En los últimos instantes surge una mínima sequedad, durante la cual se potencian las flores, quienes junto con un leve punto de especia protagonizan el delicado amargor final que permite finalizar el trago con calma y suavidad, pero sin escasear el sabor. Es bastante similar a la Oktoberfest de Löwenbräu, quizá algo más sencilla pero yo no me atrevería a calificarla como peor. Ambas son germantásticas.

NOTA:



miércoles, 30 de mayo de 2012

FFdA #1: Samuel Smith's Yorkshire Stingo

MARCA: Samuel Smith
MODELO: Samuel Smith's Yorkshire Stingo
ESTILO: Strong Ale añejada en barrica de roble (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Ante la genial propuesta del señor Birraire de celebrar el primer FFdA (o Finde Fondo de Armario), excusa perfecta para desempolvar esa botella que llevamos un tiempo atesorando en la despensa sin saber cuando estrenarla, no me cupo la menor duda de cual iba a ser mi elección, y es que no muchas cervezas están a la altura de esta joya de Samuel Smith. Las cervezas de esta mítica fábrica británica tienden a llevar la moderación por bandera, y salvo su Imperial Stout la mayoría no alcanzan una graduación alcohólica elevada; sin embargo Stingo supera incluso a esta última, y con sus 8º de alcohol y su más de un año de guarda en barrica de roble se convierte en una de las cervezas más contundentes que salen del condado de Yorkshire.

Sin duda es una Strong Ale bastante señorial, con su líquido color rubí que desprende un aroma dulce y complejo, en el que sobre una base mineral y terrosa establece su imperio la malta, con una fuerte tendencia al caramelo y toffee, acompañada por recuerdos de las frutas más variopintas, entre las que se distingue con mayor claridad manzana, arándanos y cereza picota. No podía faltar el delicado lúpulo inglés, herbal y ligeramente cítrico, sello de identidad que hace imposible obviar su procedencia.

De cuerpo completo, en boca da mucho juego la malta británica, que se combina con notas dispersas de manzana, pera y albaricoque, dejando de fondo leves pinceladas de té negro y azúcar moreno. En seguida penetra una calidez de carácter vinoso, impregnada de la sequedad y la acidez de la barrica que puede rememorar cereza ácida e incluso algo de cacao, para acabar derivando en un amargor intenso, áspero, alcohólico, con algunas similitudes con el ron negro, aunque atrapado en una deliciosa mezcla de lúpulo herbal, suave especia, leves toques de Brettanomyces y fruta. Completísima, con suficientes matices como para perder horas buscando, y ajustada a la perfección en determinados aspectos como carbonatación, alcohol, cuerpo, dulzor. Lo único que se le puede pedir es un precio más moderado, pero no obstante los 7 euros que me costó los volvería a pagar encantado... aunque dentro de un tiempo.


NOTA:

martes, 29 de mayo de 2012

Marston's Old Empire IPA

MARCA: Marston's
MODELO: Marston's Old Empire IPA
ESTILO: India Pale Ale británica (5'7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Despierto de mi letargo aprovechando un momento de tranquilidad. Hacía mucho que no comentaba por aquí, a ver si me topo con una temporada de vacaciones o algo similar, que estos días no ha dado tiempo ni a echar un ojo al panorama cervecil. En fin, volvemos a las andadas.

El otro día me llevé esta Old Empire IPA de la celebérrima Marston's, de la que hemos hablado en profundidad al comentar sus variedades Oyster stout, Strong Pale Ale y Pedigree. Muy buenos resultados, por lo general.

Esta cerveza de elegante etiqueta presenta un color dorado muy cristalino, con una carbonatación muy baja. Forma una apa de espuma de color blanco poco abundante, pero sedosa y duradera. La primera impresión me dejó algo desconcertado, ya que no me pareció para nada una IPA, sino más bien una pilsener al uso. En el aroma se distingue una nota herbal, pero no tiene ese toque lupulizado de las IPAs. En menor medida se percibe la malta y la levadura, y una nota cítrica muy apagada.

Es en el trago cuando se sale de dudas. Aunque suave, deja entrever notas lupulizadas sedosas y agradables, que se funden con la málta, el punto cítrico, un leve afrutado y para terminar notas especiadas, que le dan un toque ligeramente picante. En segundo término, la levadura y algo de caramelo. El final es seco y amargo, pero muy ligero. Da ganas de volver a tomar otro trago para estar seguro de que has tomado el anterior.

No es una maravilla de cerveza, pero tampoco está mal. La foto esta vez la ha sacado mi colega Edu.

NOTA:

domingo, 27 de mayo de 2012

Cata "Bier Chrome" en la Vinoteca

Hace unos meses nos llegó al correo del blog una invitación por parte del Club Bier de La Vinoteca para dirigir una cata de cervezas en su establecimiento de la calle Esquiroz, en Pamplona. Gracias mis contínuas idas y venidas a esta ciudad conocía de sobras esta empresa, de hecho era junto con Manneken Beer uno de mis sitios cerveciles predilectos de Navarra, y no me habría importado desplazarme desde Zaragoza para ello, pero si encima tenemos en cuenta que estaba a apenas unas semanas de trasladarme a vivir a la capital navarra no había excusa posible para no aceptar participar activamente en este evento.

Ya establecido en Pamplona quedé con Rubén, la persona que había contactado con nosotros, para conocer más detalles sobre la cata, y a medida que me fue explicando mi interés crecía de forma exponencial. Tras una anterior temporada dedicada a las diferentes categorías cerveciles, llamada "Style Fighter", en este "Bier Chrome" su intención era comparar cervezas del mismo color pero distintos estilos, pretendiendo resaltar así lo distintas que pueden llegar a ser por muchas similitudes que tengan en apariencia.

En esta primera ronda iba a ser el turno de cervezas negras de estilos que tirasen más hacia la sequedad, hacia el torrefacto, es decir Porter, Stout, Schwarzbier, etc, y las marcas elegidas para este fin fueron:

- Brewdog Zeitgeist (Schwarzbier)
- Anchor Porter (Porter)
- Samuel Smith's Imperial Stout (Russian Imperial Stout)
- Flying Dog Gonzo (Baltic Porter)
- To Øl Black Ball (Porter ¿extralupulada?)
- Southern Tier Mokah (Imperial Stout con café y chocolate)
- De Molen Rook & Vuur (Rauchbier)

Así, este pasado Jueves 24 a las 20:15 se celebró la cata. Reconozco que al principio estaba algo nervioso, me olvidé de algunas cosas de las que quería hablar y me precipité en otras, y es que había acudido mucha más gente de la que esperaba. No obstante ni siquiera habíamos terminado la primera cerveza, una rica Zeitgeist, y ya me sentía como en casa, las palabras salían solas. No soy quien para juzgar si fue ameno o interesante, eso más bien le corresponde a los asistentes, pero la verdad es que yo me lo pasé bien, y a pesar de que cuando ya ibamos por las últimas cervezas se desmadró un poco, daba la impresión de que la cosa estaba funcionando.

La selección de cervezas por parte de La Vinoteca me pareció realmente buena, quizá en el caso de la Schwarzbier o de la Baltic Porter habría optado por ejemplos más clásicos, pero estos hicieron el papel a la perfección y además eran más exóticos que una Kostritzer o una Baltika 6, que se puede encontrar en cualquier supermercado. Sobretodo fue muy interesante el poder probar la To Øl y la Southern Tier, marcas que no se ven todos los días, y De Molen Rook & Vuur, que pese a que quizá no tuvo una gran aceptación por los asistentes fue una de las que más me gustó de toda la cata. También quedé muy satisfecho con la organización: el orden y la presentación eran exquisitos, con 7 copas de cristal alineadas sobre un mantel, al que iban llegando cada poco rato tanto botellas como pequeños "pintxos" para llenar un poco el estómago y que no acabásemos todos por los suelos, y un modesto micrófono con el que poder hablar cuando la voz empezaba a fallar.

Así, entre charla, cervezas y algunas bromas fue pasando el tiempo y antes de que me diese cuenta ya habían pasado las 10 de la noche y era hora de ir recogiendo. Y si ya estaba contento por cómo había salido todo, me quedé absolutamente maravillado cuando, antes de que me fuese, apareció Rubén con un par de cajas que transportaban las 7 botellas que habíamos catado y una Tactical Nuclear Penguin, que querían regalarme en agradecimiento por haber aceptado su invitación, con las que me fui a casa pensando en la de cervezas que iba a poder disfrutar en mi nuevo lugar de residencia. Solo me queda, para acabar este resumen, dar las gracias por todo a los asistentes, a La Vinoteca en general, y a Rubén en particular. 


PD: Se me había olvidado decirlo, pero las fotografías no son mías, sino un prestamo de los responsables de La Vinoteca. Gracias también por eso.