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martes, 21 de abril de 2015

Ayinger Celebrator Doppelbock

MARCA: Ayinger
MODELO: Ayinger Celebrator Doppelbock
ESTILO: Doppelbock (6,7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Y para cerrar esta cata en fases de las cervezas que me tocaron del obsequio de Cervecita en Casa, vamos con una espumosa de renombre, un peso pesado del plantel cervecero alemán. Hace tiempo pude probar esta cerveza en Berlín y guardaba muy buen recuerdo de ella, como de un buen festín lujoso entre platos caros y botellas pequeñas.

Esta cerveza viene de la localidad alemana de Aying, cuya cervecera fue fundada en 1878. Enseguida y a lo largo del tiempo fue ganando multitud de premios que ensalzaron su nombre. Actualmente cuenta con más de 15 cervezas distintas. 

Cuando me quiero dar cuenta la espuma se ha volatilizado, dejando un anillo finísimo de color beige alrededor del caldo, y una membrana sedosa de burbujas grandes en el centro. El color es marrón oscuro, opaco y brillante, con tintes rubís al trasluz. No se aprecia carbonatación, por lo que se intuye una textura densa y fuerte.

El aroma está presente desde el principio y a la distancia, destacando la malta tostada, el café y el caramelo, seguido de notas de lúpulo y un fondo ahumado muy ligero, que en boca se hará más presente. El trago impacta con fuerza, descargando matices intensos de malta torrefacta, café y caramelo, en continuidad con su aroma. Es dulzón, pero poco a poco va mostrando caras más amargas. Se perciben notas de nueces, bizcocho y una bocanada alcohólica que culmina un trago fuerte y contundente. Hacia el final del trago aparece un toque ahumado muy ligero que pone la guinda (pese a que todavía no soy demasiado amigo de las cervezas ahumadas).

En conjunto todo un cervezón. Es un estilo bastante especial, con igual número de amantes que de detractores, por lo que para poder disfrutarla al máximo ha de caerte en gracia, y más con un desfile de matices semejante. ¡Muchas gracias a Cervecita en Casa por el detalle!

NOTA:

miércoles, 25 de marzo de 2015

Aecht Schlenkerla Rauchbier Urbock

MARCA: Aecht Schlenkerla
MODELO: Aecht Schlenkerla Rauchbier Urbock
ESTILO: Bock ahumada (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Otra de las cervezas estacionales de Schlenkerla, además de Eiche, es Urbock, disponible desde principios de Octubre hasta el mes de Enero. (aunque en barril se agota mucho antes) Se trata de una Bock de 6'5º de alcohol madurada durante los meses de verano en bodegas de piedra bajo la ciudad de Bamberg, y que ha sido merecedora de varios galardones por su alta calidad, entre ellos el de mejor cerveza del Amsterdam Bokbier Festival. Hasta este año era una de las pocas cervezas de esta marca que me quedaba por probar, pero gracias a una remesa que llegó a La Vinoteca pude al fin desquitarme y disfrutar de otra de las elaboraciones de esta fantástica fábrica.

Luce un bonito color marrón roble, mate y bastante opaco, con algún destello naranja apagado. Forma una abundante y densa espuma beige, muy apetitosa, que mantiene su posición en la jarra durante largo tiempo. Su aroma es intenso, dominado por un dulce ahumado, cremoso y jugoso, como de carne asada, sobre un fondo de malta, caramelo y frutas maduras, entre las que destacan ciruelas, uvas pasas y algo de dátil. Acaban de redondear el perfume toques de té inglés, azúcar moreno y suaves flores del lúpulo, consiguiendo un conjunto realmente fino y bien ajustado.

La entrada en boca es fresca y especiada, y en absoluto tan pesada como esperaba, pasa con agilidad. Comienza con caramelo, dulce malta tostada, dulces frutas maduras, de entre las que no dejo de identificar el dátil, y leves notas de té negro y azúcar moreno. En seguida el ahumado se acopla, gana con facilidad el protagonismo pero dejando espacio al resto de matices, y conduce a un final de amargor marcado, herbal y cítrico, con humo, barbacoa, dejes de tabaco y chocolate puro que quedan en el larguísimo regusto. Siempre que tomo una Schlenkerla me sorprende la delicadeza de sus elaboraciones a pesar de emplear maltas francamente agresivas, y es lo que sucede en esta Bock; consiguen una cerveza compleja y sabrosa, pero a la vez de trago largo y que no satura en absoluto. Bastante similar a su Märzen aunque algo más contundente, este es otro ejemplo de una gran Rauchbier.

NOTA:

domingo, 8 de febrero de 2015

Aecht Schlenkerla Eiche

MARCA:
Aecht Schlenkerla
MODELO: Aecht Schlenkerla Eiche
ESTILO: Doppelbock ahumada (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Una de las cervezas de Schlenkerla más solicitadas es sin duda Eiche, una Doppelbock ahumada con madera de roble, en vez de madera de haya como suele ser habitual en este estilo, que únicamente se produce durante los meses de invierno. Dentro de las cervezas de esta marca, yo le tengo un especial cariño no porque me parezca superior a su fantástica Märzen, (cosa que tampoco me atrevería a afirmar) sino por lo mucho que la disfruté en el segundo viaje que hice a Colonia, en esa ocasión sin acompañantes, tras una maratoniana jornada por la ciudad con los termómetros por debajo de 0ºC en todo momento. Entonces me pareció una cerveza muy apropiada para sobreponerse del frío del invierno, ya en el calor del hogar, y este ha sido el uso que le he dado este año a las botellas que me he agenciado.

Cuando me planté en el sofá con un libro y la botella delante fue el mejor momento del día. Al abrirla vi un líquido pardo rojizo, con bastantes burbujas que ascendían desordenadas hasta la espuma amarillenta cremosa y consistente, ayudando a que mantuviese un volumen perfecto. Al olfato ataca el perfume inconfundible de una cerveza de Bamberg, con una gran cantidad de humo que recuerda a la carne ahumada acompañado de un mínimo toque de carbón. No es, ni mucho menos, una cerveza monodimensional, sino que el ahumado se apoya en una contundente base de malta dulce con un ligero tueste, caramelo, suave melaza y miel de brezo, y delicada fruta madura entre la que destacan los higos. De fondo se intuyen mínimos recuerdos de madera, y algo de lúpulo floral.

En boca lo primero que me llamó la atención fue la carbonatación, algo superior a lo que me esperaba aunque sin pasarse. De cuerpo consistente, inicia el trago el dulce, con malta, caramelo, higos, melaza, y leves melocotón y pera, pero progresivamente se va introduciendo el ahumado hasta ocupar la mayor parte del espectro, adornado por la suave aspereza de la madera, recuerdos de castañas y medido alcohol. Termina con un amargor claro, de carácter cítrico y floral, ligeramente cálido y con un punto especiado. El regusto, dominado casi por completo por el humo, persiste durante largo tiempo en la boca, reduciendo al mínimo el espacio libre entre trago y trago. Se trata de otra fantástica elaboración de esta marca, imprescindible para los amantes del humo. Para mí esta cerveza evidencia que a la hora de elaborar una buena Rauchbier no basta con añadir malta ahumada entre los ingredientes, sino que exige un manejo preciso del resto de los granos para conseguir un equilibrio que dote a la cerveza de complejidad... y en esto en Schlenkerla son maestros.

NOTA:

domingo, 15 de diciembre de 2013

Augustinerbräu Maximator Starkbier

MARCA: Augustinerbräu
MODELO: Augustinerbräu Maximator Starkbier
ESTILO: Doppelbock (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Tengo la costumbre de tomar los distintos estilos de cerveza con el clima que mejor le acompaña, no por ser un maniático sino más bien por cuestión de apetito: a 40ºC a la sombra, cuando el asfalto se empieza a derretir, soy incapaz de tomarme una Imperial Stout de 12º de alcohol, al igual que si nieva lo último que me planteo es una Witbier. Como ventaja, disfruto una barbaridad cada cerveza, pero tiene también un pequeño inconveniente, que es que en ocasiones acabo guardando algunas botellas más de lo que me gustaría. Es lo que me ha sucedido con esta Doppelbock de la legendaria Augustinerbräu, que estuvo varios meses en mi despensa hasta que la llegada del frío a Pamplona me animó a abrirla. Por supuesto, no es la primera vez que me topo con esta cerveza, pero me pareció interesante guardar una para una breve reseña en este blog. 

Viste un hermoso color rojo rubí, sorprendemente transparente para este estilo, adornado por una carbonatación media que alcanza medio dedo de cremosa espuma beige. Repta por el vidrio un dulce y apetitoso aroma de malta, caramelo, trazas de toffee y pan negro, en conjunción con frutas oscuras, entre las que predominan ciruelas, higos, delicado dátil y mínimos recuerdos de cereza. El lúpulo, por su parte, no resulta demasiado evidente, aunque con un poco de imaginación se puede intuir su presencia en forma de cítricos. Es un perfume cálido y compacto, clara advertencia de lo que podemos esperar del sabor.

En boca es densa, contundente, con un cuerpo entre medio y completo. Predomina el dulzor de la malta tostada y el caramelo, compensado no obstante por una leve aspereza regada de nueces, almendras y pan integral. Totalmente integradas en el núcleo están de nuevos las frutas maduras antes mencionadas, con dátil algo más escondido, acompañadas de toques de cacao y azúcar moreno. Final algo amargo y seco, se potencian los frutos secos y el cacao, e irrumpen además lúpulo noble y un medido soplo alcohólico, reforzado por el caramelo. Por lo general me gustan las Doppelbock más dulces y pesadas, mientras que ésta está posiblemente entre las más secas y amargas; no obstante creo que es un ejemplo de muy buena calidad.

NOTA:

domingo, 24 de noviembre de 2013

Augustinerbräu Heller Bock

MARCA: Augustinerbräu
MODELO: Augustinerbräu Heller Bock
ESTILO: Maibock (7% ABV) 
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Las cervezas tipo Maibock me apasionan, me parece la mezcla perfecta entre una Bock y una Münchner Hell, por lo que siempre que tengo una al alcance de la mano procuro hacerme con ella. Si tenemos en cuenta que también soy incondicional de los productos de Augustiner, parecía casi asegurado que su representante de este estilo, tan esquiva en nuestro país, no me iba a defraudar. No obstante, si alguien tenía dudas, ya le anticipo que mereció la pena cargarla durante todo el trayecto Munich - Bilbao - Pamplona, acompañada de otras 19 compatriotas, para poderla disfrutar en el calor del hogar poco tiempo después. 

Sirviéndola en su jarra correspondiente, me dio la impresión de que era algo menos oscura de lo que esperaba, de un dorado brillante con un halo blanquecino. Tan discreta como su espuma, de la que apenas persiste medio dedo en superficie, es su aroma, aunque resulta de todas formas muy agradable. Combina dulce malta, contundente, con cereales, pastel de manzana y leves recuerdos de crema, adornados con un deje cítrico y especiado. Una mezcla de flores y miel envuelve con suavidad y delicadeza el conjunto, aunque a medida que reposa la cerveza van ganando en presencia. 

Su perfume es el preámbulo perfecto para un paso por boca cremoso y denso, expectativas que se cumplen sin duda alguna. La malta es omnipresente en el sabor, acompañada de nuevo por suave crema y caramelo, adherida a intensas notas de manzana asada, plátano y dejes cítricos, que sin ser demasiado potentes son exacerbados por la carbonatación. A medida que avanza el trago gana en presencia la acidez, con una efervescencia en el fondo de la lengua que queda cerca de hacerse excesiva, para al final desembocar en un amargor considerable para una cerveza bávara, con medidas recuerdos enólicos y especiados sobre un fondo de miel y flores. Quizá esperaba algo excepcional, a lo que en mi opinión no llega, posiblemente por un exceso de gas y menos calidez de la que me habría gustado, pero a pesar de esto no me ha decepcionado en absoluto; me parece una cerveza sólida y a la altura del nivel exigible a esta fantástica fábrica.

NOTA:

miércoles, 28 de marzo de 2012

Engel Bock Hell

MARCA: Engel
MODELO: Engel Bock Hell
ESTILO: Maibock (7'2%)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: La cervecera Engel, fundada en en 1783 en Crailsheim, en el Oeste de Alemania, es desde 1877 propiedad de la familia Fach. Elaboran en la actualidad, si no he contado mal, 21 cervezas distintas, todas ellas selladas con tapón de rosca, entre las que destacan por sus sorprendentes denominaciones varias como su Weißbierpils, su Kellerbier dunkel o su cerveza femenina First Lady, las cuales me encantaría probar aunque solo fuese por calmar mi curiosidad.

Cuando la vi en el supermercado el tapón de rosca me hizo dudar, pero al final me decidí a probarla reservándola para una tarde relajada, que llegó esta misma semana cuando la elegí como acompañante de una buena película. Es de color miel, apagado, casi transparente, y forma al servirla una espuma que en un inicio parece cremosa y abundante pero que casi antes de terminar esta operación demuestra ser escasa y porosa, similar a la del detergente. Sorprende lo discreta y sencilla que es para el olfato, apenas unas pinceladas de grano, malta y casi imperceptibles cítricos, con un toque metálico que recuerda a las temidas eurolager, lo que a priori no es en absoluto positivo.

En boca intenta enderezar, aunque en mi opinión tampoco acaba de acertar. Al principio el dulzor, con un núcleo de malta y miel escoltado por suaves notas de melocotón y manzana, resulta excesivo y empalaga un poco. Se va moderando de forma progresiva, pero a cambio va ganando terreno el alcohol, que llena de especias un final de amargor inexistente, impregnado de miel, cítricos y lúpulo floral, de intensidad moderada. No es una cerveza que merezca ser tirada por el desagüe al primer sorbo, pero el exceso de azúcar y alcohol me cansa rápido y acabo perdiendo el interés.

NOTA:

jueves, 15 de marzo de 2012

Pinta Jak W Dym

MARCA: Pinta
MODELO: Pinta Jak W Dym
ESTILO: Bock ahumada (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Polonia

CARACTERÍSTICAS: La cervecera polaca Pinta, fundada por Grzegorza Zwierzynę y Marka Semlę en el 2011, comenzó, al igual que muchas otras marcas, llevando a cabo la elaboración en las instalaciones de otra empresa, en su caso en las de Browar Na Jurze, una pequeña fábrica situada en Zawiercie, en el Sur del país. No cabe duda de que una trayectoria que ni siquiera alcanza el año es extremadamente corta, sin embargo esta falta de recorrido no les ha impedido arrasar en los premios de la cerveza polaca del pasado año ganando 7 de las 10 categorías, además de los premios a la "Mejor Cerveza" y la "Mejor Fábrica", hecho muy significativo incluso aunque se trate de un país con una tradición cervecil no tan extendida como otros.

Toda esta información la he recopilado estando ya en España y, puesto que la cerveza la tomé en Polonia, antes de atacar lo único que conocía era su aspecto, negro con reflejos rubí, cubierto por una espuma compacta pero poco persistente. El aroma resulta rarísimo, sobretodo si no sabes por donde van los tiros: sobre la dulce base de malta surgen intensas notas de moras, pasas y cerezas negras, con un suave punto de hierba y madera, pero acompañadas por un perfume algo desconcertante que recuerda al bacon, levemente teñido de humo. A estas alturas, quedaba claro que no podía ser otra cosa que una interpretación de una Rauch, aunque con el ahumado no tan potente como el de una Schlenkerla.

En boca es igualmente peculiar, a su paso resulta densa y cremosa, claramente inclinada hacia el dulce aunque sin desequilibrar la balanza, dominada de nuevo por malta tostada y frutas oscuras, con azúcar quemado, café y ahumados expresandose también con fuerza pero en un segundo plano. Termina con un final relajado de amargor ligero, bien provisto de humo, dejando un regusto mínimamente herbal y alcohólico. Es una cerveza a todas luces sorprendente, quizá un poco pasada de dulce pero no obstante suficientemente agradable como para no cansarse con la botella de medio litro. (lo cual no es poco)

NOTA:

martes, 7 de febrero de 2012

La Trappe Bockbier

MARCA: La Trappe
MODELO: La Trappe Bockbier
ESTILO: Bock Trapense (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Países Bajos

CARACTERÍSTICAS: La legislación antieclesiástica que se impuso en Francia a finales del siglo XIX, y que amenazaba a distintas órdenes religiosas, provocó la salida del país de Sebastian Wyart, uno de los monjes del monasterio francés de Sainte-Marie-du-Mont, en busca de refugio en el extranjero. Lo encontró en el Brabante Septentrional, cerca de Tilburg, y allí en el año 1881 fundó la Abadía de Nuestra Señora de Koningshoeven, en el seno de la cual dio sus primeros pasos la que es actualmente la única cervecera Trapense fuera de Bélgica. Exactamente 120 años después, en el 2004, vio la luz su Bock, primera cerveza de este estilo de origen Trapense a la que le voy a dedicar la reseña de hoy.

De color rubí negruzco, es imposible no ver la mano belga en esta cerveza puesto que al servirla forma una capa de espuma beige amarillenta de una solidez difícil de ver en este estilo alemán. Al olfato es cuanto menos curiosa, de su previsible base de malta oscura y caramelo emerge un llamativo perfume de frutas tropicales, naranja de sangre, leve cacao, y un afilado toque de clavo y aromático lúpulo floral, que si bien no es incompatible con las Bock sin duda le da una originalidad importante.

Un cuerpo consistente dirige el trago, cargadísimo de malta e intensas notas de cacao, bien respaldado por ciruelas, té negro y suave melocotón y naranja. A medida que avanza se va secando, el dulzor de las frutas maduras se difumina y gana en presencia el cacao, con recuerdos de café de fondo, para terminar con un amargor no especialmente intenso aunque sí áspero y muy largo, salpicado de hierba, cacao y especias picantes. Muy interesante interpretación belga del estilo, algo más sólida y menos frutal de lo habitual, con determinadas características que delatan su origen, pero pese a mi pasión por lo clásico creo que es una cerveza realmente buena a la que merece la pena darle una oportunidad.

NOTA:

jueves, 22 de diciembre de 2011

Neuzeller Bock

MARCA: Neuzeller Kloster-Bräu
MODELO: Neuzeller Bock
ESTILO: Bock (6'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Ya hablamos un poco de la marca en el post de la Schwarzer Abt de Neuzeller, cerveza que Embracing elogió por todo lo alto (no). Un poco a ciegas deslicé una botella de Neuzeller Bock en mi última visita al Corte Inglés que me serviría para, por qué no, sacar unas primeras conclusiones de esta marca.

Luce un color ambar cristalino muy transparente, como achampanado, acompañado de cientos de burbujas. La espuma es blanca y burbujeante, y no tarda en desaparecer, dejando una fina membrana sobre el caldo. Inmediatamente me desorientó esta presentación, que la asemeja más a una eurolager del montón.

El aroma no es demasiado intenso, destacando la malta y los toques afrutados y herbales. En boca no se presenta con demasiada fuerza. Notas de malta torrefacta muy ligera, levemente afrutada, con toque de caramelo y final amargo. Se hace aguada, y el alcohol no tiene nada de presencia en el trago.

Bastante aburrida, muy al nivel de la cerveza de supermercado que se puede encontrar en cualquier lado. Nada más reseñable, ¿alguien la ha probado?

NOTA:

domingo, 4 de diciembre de 2011

Guineu Rocaters

MARCA: Guineu
MODELO: Guineu Rocaters
ESTILO: Bock (6'4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Tras unas semanas de descanso sigo con las Guineu que gané en el concurso de Cervezalandia, en esta ocasión con su Rocaters, en teoría una Bock. Digo en teoría porque si hay una pega que ponerle a las cervezas de esta marca es lo crípticas que son sus botellas, es bastante complicado saber a qué atenerse al destapar una de ellas sin tener que indagar por Internet previamente, problema que además sería muy sencillo de solucionar. Tampoco es que sea muy grave, peor sería que sus cervezas fuesen de mala calidad, (cosa que indudablemente no son) pero sí que es cierto que fue lo primero que pensé cuando vi por primera vez las botellas en una estantería de Líquidos.

Servida en copa luce un hermoso color pardo anaranjado, resplandeciente, con apenas 2 mm de espuma beige pero que aguanta el tipo bastante bien. Exhibe un aroma dulce, tan frutal que resulta incluso chocante que estemos ante una lager, donde en un núcleo de malta y caramelo se infiltran sin dificultad melocotón y naranja maduros, bien acompañados por canela, lúpulo floral y un leve toque de levadura.

En el sabor insiste en la fruta, destacando sobre el conjunto un llamativo gusto a mandarina, y es en mi opinión donde esta cerveza tropieza al centrarse en este aspecto en detrimento de la malta, impidiendo así que pueda desplegarse de forma óptima. Poco a poco desarrolla un suave amargor floral, con un toque de hierba y cítrico, que deja un regusto relajado, ligeramente astringente, con el que tampoco se consigue llamar demasiado la atención. A diferencia de las otras tres de esta marca que he tomado, Riner, Coaner y Montserrat, esta no me acaba de convencer, la veo un poco plana y su bajísima carbonatación acentúa más aún lo que para mí son carencias. No obstante no creo que sea una mala cerveza, simplemente no la veo a la altura de los otros productos de Guineu.

NOTA:

miércoles, 20 de julio de 2011

Anchor Bock Beer

MARCA: Anchor
MODELO: Anchor Bock Beer
ESTILO: Bock (5'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Esta es, si no me equivoco, la única Lager que se produce en la americana Anchor, y además de las pocas de esta marca disponibles en España que todavía me quedaba por probar. Uno no puede saberlo todo, y he de reconocer que antes de encontrarmela por pura casualidad no tenía ni idea de la existencia de esta cerveza, lo que me llevó al cada vez más habitual acto compulsivo de comprarla en el mismo momento e ir corriendo a casa a probarla. (aunque al final se ha pegado casi dos meses en el trastero... la psicología humana es un misterio)

Una vez servida me encontré con una cerveza realmente oscura, cubierta por una tupida capa de espuma marronácea, dando un aspecto más propio de una Porter, lo que hizo plantearme nuevamente la duda que me rondaba por la cabeza en el momento de la compra: "¿sabrán adaptarse a un estilo tan clásico de Alemania, o harán una interpretación libre del mismo?" Pues no estoy del todo seguro, hay mucha malta y toffee en el olfato, pero se acerca a aromas típicos de cervezas más oscuras, con gran protagonismo de cacao en polvo, ligeras notas de café y frutos secos, limitando así mucho el dulzor propio de una bock.

El sabor es un calco del aroma, repleto de malta tostada y cacao, ejerciendo este último un dominio claro, más secundario caramelo y recuerdos de almendras, y al igual que antes el dulzor no llega a desarrollarse. A medida que avanza el trago estos matices se van confundiendo con un claro gusto a café solo, que acaba siendo el actor principal en un final de amargor marcado, acompañado por suave regaliz negro, ligeras notas de torrefacto y ahumado, y mínimo picante. Me ha gustado sin duda alguna, pero ni la veo a la altura de las demás de Anchor ni me acaba de convencer como cerveza de este estilo, veo forzado el tostado. Cuestión de gustos, supongo.


NOTA:

miércoles, 23 de marzo de 2011

Weltenburger Kloster Asam Bock

MARCA: Weltenburger
MODELO: Weltenburger Kloster Asam Bock
ESTILO: Doppelbock (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: La última cerveza que me quedaba de la Feria de Alimentación Internacional no era, ni mucho menos, una desconocida sino que estaba elaborada por una empresa por la que siento desde hace tiempo una especial predilección: Weltenburger. La vi en el Corte Inglés del centro de Madrid, mientras curioseaba con Sir Asf el fin de semana que fui a hacerle una visita a la capital, y pese a que ya iba a volver a mi ciudad cargado con las botellas que les compré a los siempre geniales Lúpulo A Mansalva no pude resistir la tentación de repetir con una de mis Doppelbock favoritas, cosa que mis lumbares no me agradecieron.

Hacía ya varios años que no tomaba esta cerveza, y mientras la servía me pregunté si tras tanto tiempo y tantas buenas marcas probadas mi opinión sobre ella se habría mantenido tan alta; por lo que viene a continuación se puede deducir que sí. En el vaso, con la luz atravesando el líquido, se veía de color rubí, con cierta turbidez, coronada por una espuma beige muy oscura, casi marrón. Frente a un aspecto inmejorable, los matices que desprendía seguían este nivel de perfección, una cantidad brutal de malta tostada, caramelo y chocolate con leche, con cantidades ingentes de fruta que se presentan con mucha profundidad, destacando sobretodo los dátiles y recuerdos de higos y ciruelas negras, todo ello aderezado con notas claras de canela, té negro y un mínimo recuerdo de ron. Extremadamente denso, dulce aunque no empalaga, y si bien el lúpulo pasa desapercibido lo cierto es que no se le echa de menos.

Me costó seguir el protocolo habitual puesto que llevaba salivando desde que subí la botella del trastero, por fín llegó el momento de atacar y mi satisfacción fue absoluta en el primer instante. La intensidad se mantiene en el sabor, da comienzo una base de malta y caramelo, el cacao acompaña aunque con algo menos de presencia, y toda esta mezcla viene empapada por frutas maduras, nuevamente destacan los dátiles incluso con más fuerza, y un punto de azúcar quemado y té negro. De cuerpo completo, el trago es muy espeso y se mantiene así hasta el final para amortiguar los casi 7º de alcohol, quedando una reminiscencia de estos que se junta con un marcado deje especiado, suaves recuerdos de ron y caramelo, y el lúpulo que se manifiesta por fin con un leve toque herbal. El regusto no frena, es intenso, agresivo, algo alicorado, y por suerte se mantiene en boca largo tiempo permitiendo disfrutar de esta cerveza algunos segundos más. Completísima cerveza, una opción que nunca defraudará cuando se busque un peso pesado para calentar una tarde fría.

NOTA:

viernes, 4 de marzo de 2011

Doppel-Hirsch Allgäuer Doppelbock

MARCA: Hirschbräu
MODELO: Doppel-Hirsch Allgäuer Doppelbock
ESTILO: Doppelbock (7'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: A estas alturas son pocas las cervezas de Hirschbräu que me quedan por probar, y para ser sincero solo hay un par de ellas que me molestaría en volver a probar; las demás, sin llegar estar mal, tampoco me da la impresión de que merezca la pena esforzarse para encontrarlas. No obstante, dada mi pasión por el genial estilo que son las Doppelbock, tenía muchas ganas de probar esta cerveza y fui de propio a la feria del Corte Inglés a por ella, incluso previa reserva, cosa que no dice mucho a mi favor.

Pocos días después la saqué del trastero y sin siquiera hacer un alto en el frigorífico la serví con la intención de disfrutarla mientras me deleitaba con una de las películas de Hitchcock que más me gustan: Vertigo. El color se ve bastante bien en la fotografía, marrón caoba con algunos reflejos rubí, cubierto por una espuma beige densa, muy estable. La primera impresión no fue demasiado halagüeña, no tanto por la composición del aroma en sí sino más bien por su suavidad, había que esforzarse algo para apreciarlo. En él llamaban mucho la atención dátiles y chocolate con leche, y más de fondo malta tostada, caramelo y frutas maduras, con leves recuerdos de té negro, azúcar moreno y un mínimo toque de canela. También hay que decir que el conjunto era agradable pero por algún motivo me temía que iba a encontrar mi primer ejemplo de una Doppelbock sosainas.

Afortunadamente no fue así y, sin ser la más densa o compleja que he probado del estilo, lo cierto es que me pareció bastante buena. Mientras que en el aroma el dulzor llegaba incluso a recordar a dátiles, en el sabor es mucho más moderado, probablemente debido a la influencia de las especias y el lúpulo herbal que irrumpen con fuerza a mitad del trago. Por lo demás, malta tostada y caramelo, y en un segundo plano chocolate con leche y frutas oscuras conforman la base, adornada con delicados puntos de té y canela. Una cerveza bastante bien apañada, de esta marca sigo prefiriendo su Maibock pero esta tampoco está a demasiada distancia.


NOTA:

lunes, 7 de febrero de 2011

Pfaffen Bock Bier

MARCA: Pfaffen
MODELO: Pfaffen Bock Bier
ESTILO: Bock (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Pese a que en Düsseldorf hice paradas en la mayoría de las cerveceras del Altstadt, no quería dejar pasar la ocasión de tomar también alguna Kölsch en su lugar de producción en la ciudad de donde es originario el estilo. Con esta intención entré en el brewpub de Pfaffen, situado en el casco antiguo de Colonia, sin embargo el ver que por pura casualidad había llegado en la única época del año en la que estaba disponible su Bock me hizo cambiar de opinión, puesto que si no es demasiado probable que vuelva a la ciudad, lo es mucho menos que lo haga en invierno otra vez.

El día frío y húmedo era especialmente adecuado para esta cerveza, y por acabar de germanizar el final de la tarde decidí acompañarla con un "Halver Hahn", un plato típico de Colonia que, para evitar confusiones, aclararé que no es medio pollo sino pan de centeno con queso Gouda. Desde el primer momento tuve la impresión de que había acertado de pleno con la elección, al olfato era realmente buena, compleja, un intenso aroma a malta dulce y miel, más secundarios caramelo y toffee, con una fuerte presencia floral que parecía cubrir por completo el conjunto, un suave toque de picante y canela, y entremezclándose de forma muy sutil leves notas de melocotón en almíbar. Y charlando un rato con el camarero, él mismo me comentó que en su opinión esa era la mejor cerveza que hacían.

Muy satisfecho quedé con el maridaje de esta cerveza con el "Halver Hahn", la textura cremosa y el cuerpo no cedían ante la fuerza de la comida, y el sabor era lo suficientemente intenso como para soportar al Gouda. Sobresalen nuevamente malta dulce y miel, esta última incluso más prominente, adornados con moderado caramelo, toffee y melocotón, mientras el lúpulo floral gana en presencia, aunque el amargor final es irrelevante. En este se acentuan las especias y las flores mientras la cerveza baja muy relajada por la garganta, pudiéndose beber varias jarras de medio litro casi sin darse cuenta, lo cual no quiere decir que la cerveza sea aburrida o con poco sabor, más bien todo lo contrario. Yo quedé muy contento con esta cerveza, no tengo más remedio que darle la razón al camarero.

NOTA:

lunes, 27 de diciembre de 2010

Samichlaus Classic

MARCA: Samichlaus
MODELO: Samichlaus Classic
ESTILO: Doppelbock de Navidad (14% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Austria

CARACTERÍSTICAS: Si hay una cerveza navideña por excelencia esa es Samichlaus, la cerveza de San Nicolás, que se produce únicamente durante el día de este santo, el 6 de Diciembre, y se madura durante 10 meses antes de embotellarla. La encargada de esta labor es Eggenberg, la cervecera emplazada en el castillo austriaco que le da nombre, en activo desde el siglo XVII. Por si estas peculiaridades no fuesen ya suficientes, posee además una altísima graduación, llegando a alcanzar un ABV de 14%, lo que la convierte en una auténtica bomba.

No soy demasiado partidario de cervezas de tan alta graduación, quizá por malas experiencias anteriores, no obstante no había oído más que elogios acerca de Samichlaus, lo cual, junto a su curiosa historia, me hizo decidirme a adquirirla. Supongo que es por la cantidad de alcohol, pero nada más servirla la espuma desaparece por completo y por el líquido marrón rojizo no se ven casi burbujas, lo que le da un aspecto algo terrorífico, sin embargo el aroma, al ser bastante más ligero de lo esperado, tranquiliza bastante. Consiste en una mezcla de malta tostada dulcísima y mucho caramelo, con notas muy intensas de pasas y dátiles, azúcar moreno y té inglés más secundario, y un soplo importante de alcohol, muy evidente.

Me temía ya que mucho no me iba a gustar y así fue, aunque me esperaban algunas sorpresas. En boca es también extremadamente dulce, con malta dulce, dátiles, ciruelas pasas, azúcar quemado y caramelo desde el primer instante y con mucha fuerza, acentuando sobretodo las frutas, pero sin ser tan pesada y compleja como suponía, al contrario se bebe con relativa facilidad. El alcohol se va introduciendo de forma progresiva, curiosamente sin ser demasiado prominente en ningún momento, y forma un intenso regusto junto con dátiles, abundante picante y fruta madura, calentando la garganta. Para mi gusto es demasiado dulce y junto con la falta de carbonatación hace que parezca sirope, por otro lado controla bien el alcohol y pasa con facilidad... no repetiría, aunque tampoco me parece una mala cerveza.

NOTA:

sábado, 27 de noviembre de 2010

Andechs Doppelbock Dunkel

MARCA: Andechs
MODELO: Andechs Doppelbock Dunkel
ESTILO: Doppelbock (7'1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Muy cerca de Munich se encuentra la abadía benedictina de Andechs, famosa por ser en su capilla donde descansan los restos del célebre compositor Carl Orff y también por dar su nombre a las cervezas que allí se elaboran. Hacía bastante tiempo que no veía por Zaragoza ninguna Doppelbock aparte de Paulaner Salvator y EKU28, y esta última no la soporto por lo que mi capacidad de elección dentro de este estilo era nula, así que en cuanto tuve un par de botellas a mi alcance no tuve que pensármelo demasiado.

La primera fue Buronator de Aktien Brauerei, de la que no tengo queja posible, la verdad es que no estaba nada mal, y me reservé esta para comentarla aquí por ser una marca no tan conocida. De color marrón pardo con reflejos anaranjados, algo turbia, daba la impresión de ser una cerveza muy densa por las escasas burbujas que ascendían hacia la superficie, y el intensísimo y dulce aroma no hizo sino confirmarlo. El núcleo de este lo conforman toneladas de caramelo y azúcar moreno, acompañados por malta algo tostada y bizcocho, a lo que se suman ciruelas, pasas, té negro, recuerdos de dátiles que parecen destacar un poco por encima del conjunto, más leves notas de chocolate con leche, un mínimo toque de picante, y cierto frescor que aporta el lúpulo, aunque sin modificar demasiado el aroma.

Feliz por encontrar semejante complejidad, le di un sorbo y mi primer pensamiento fue "esto no es líquido". Presenta desde el inicio un cuerpo impresionante, a rebosar de malta e incluso aún más caramelo, con fuerza también acompañan frutas oscuras y dátiles, marcadas notas de azúcar moreno, té negro y bizcocho, y más de fondo cacao, todo esto mezclandose de forma sublime. Es muy dulce, sin duda, pero este sabor es controlado a la perfección por un medido amargor algo herbal, que sin interrumpir el ritmo conduce a un regusto larguísimo, para dejar en boca caramelo y dátiles. El único temor que tenía era que la presencia del alcohol fuese excesiva, sin embargo este se ve absorbido por completo por la malta, consiguiendo así una Doppelbock tan compleja, densa y a la vez equilibrada que no puedo sino considerarla mi favorita del estilo. Además, en botella de 50cl, ¿qué más se puede pedir?


NOTA:

viernes, 11 de septiembre de 2009

Taybeh Beer Dark

MARCA: Taybeh Beer
MODELO: Taybeh Beer Dark
ESTILO: Bock (6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Palestina

CARACTERÍSTICAS: Un color negro totalmente opaco, que parece que no solo no deja pasar la luz sino que la absorbe, y una considerable capa de espuma blanquecina hacen la presentación del segundo modelo de la cervecera Taybeh, cerveza que no es en absoluto fácil de encontrar, de hecho la ví por casualidad en un restaurante de Beit Sahour cuando ya llevaba más de 15 días en Palestina.

¿Qué estilo de cerveza es? Pues en un principio yo daba por supuesto que sería una Dunkel Lager, o con un poco de suerte una Schwarzbier, acerqué la nariz y... olor consistente, dulzor medio, malta torrefacta marcando el paso, intensas notas de frutas maduras, sobretodo ciruelas, y anís suave aderezado con puntos de tabaco fugaces. Agradable, interesante, y algo peculiar para una Dunkel. Solo quedaba probarla, y ese fué el siguiente paso.

Apareció un sabor intenso aunque tan breve como en la Golden, dulce, con el grano abrasado, algo de hierba y un toque de tabaco que le daba un gusto levemente ahumado, muy rico. El final era totalmente seco, con un amargor suave, y durante todo el trago se apreciaba un equilibrio espléndido, dejando una muy buena sensación y ganas de otra. Y tanto Michael, el estudiante alemán, como yo tuvimos una conclusión igual de inesperada para ambos: esto es una Bock.

NOTA:

viernes, 15 de mayo de 2009

Maibock Helles Bockbier

MARCA: Hirschbräu
MODELO: Maibock Helles Bockbier
ESTILO: Maibock (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Viendo la cantidad de modelos que comercializa la cervecera alemana Hirschbräu, se podría decir que no hay estilo con el que no se atrevan sus maestros cerveceros, y es que 352 años de existencia, contando a partir de su fundación por Hans Papst en 1657, permiten experimentar mucho. Me sentí muy tentado por la Doppelbock, pero como en Maibock tengo menos experiencia decidí arriesgarme con esta.

A simple vista parecía una lager del montón, de color dorado ambarino con escasas burbujas gruesas que ascienden lentamente hasta una capa de espuma considerable que en escasos segundos disminuye mucho de tamaño. Sin embargo, con el aroma empieza a pintar bien, bastante dulzón pero sin empalagar, dominado por la malta y con importantes notas de miel, a lo que hay que sumar matices especiados subyacentes, y quizá el lúpulo, aunque eso sí, escondidísimo.

El sabor comienza con un dulzor similar, pero la malta y los matices mielizados intercambian sus papeles, quedando estos últimos en un plano principal y ocupando casi toda la boca, acompañados en todo momento por notas florales. Cada trago entra con mucha suavidad gracias a la poca carbonatación y a lo adecuado del cuerpo, y su intensidad hace un poco de fuerza en la garganta, donde quedará un regusto a miel, algo nasal. Termina con la misma tranquilidad con la que empieza, va desapareciendo la miel y entran muy suavemente entonces ciertas notas a lúpulo. Una rica cerveza, que al instante me sugirió un sitio perfecto para disfrutarla, en el monte junto a un buen libro. Muy recomendable, ciertamente.

NOTA: