MODELO: Moritz
ESTILO: Pale Lager (5'4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España
CARACTERÍSTICAS: Parece que hay algún tipo de interés en disimular que es La Zaragozana la que está al cargo de la producción de los dos modelos de esta marca, puesto que ni en la página web ni en la etiqueta de la botella se menciona, supongo que motivos de marketing. Lo curioso es que como se comercializa exclusivamente en Barcelona, tuve que esperar a ir hasta esa ciudad para poder comprar una cerveza que se elabora a escasos kilómetros de mi casa, cosa que me fastidió aún más al comprobar que estaba bastante buena.
Su aspecto no es diferente de cualquier otra lager, quizá la gasificación es algo más pobre que de costumbre, pero el aroma ya empieza a destacar por su fuerza, repleto de malta de dulzor medio, muy directo, con cereales, pequeños apuntes cítricos, y de fondo los matices florales aportados por el lúpulo Saaz, quizá con algún recuerdo momentáneo y muy suave de mantequilla, y un leve soplo herbal.
De cuerpo consistente, muy sabrosa, marca el ritmo la malta fresca con ese punto dulce que parece ser común a las cervezas de esta compañía, y se perciben como complementos notas de limón y cereales principalmente y un deje de lúpulo. El final es largo e intenso, en él se manifiesta el dulzor mucho más cítrico, lupulado, con un destacable amargor residual. Adecuada para mi gusto, me ha gustado más que varias de La Zaragozana, y vuelvo a lamentar no poder acceder a ella más fácilmente.
Su aspecto no es diferente de cualquier otra lager, quizá la gasificación es algo más pobre que de costumbre, pero el aroma ya empieza a destacar por su fuerza, repleto de malta de dulzor medio, muy directo, con cereales, pequeños apuntes cítricos, y de fondo los matices florales aportados por el lúpulo Saaz, quizá con algún recuerdo momentáneo y muy suave de mantequilla, y un leve soplo herbal.
De cuerpo consistente, muy sabrosa, marca el ritmo la malta fresca con ese punto dulce que parece ser común a las cervezas de esta compañía, y se perciben como complementos notas de limón y cereales principalmente y un deje de lúpulo. El final es largo e intenso, en él se manifiesta el dulzor mucho más cítrico, lupulado, con un destacable amargor residual. Adecuada para mi gusto, me ha gustado más que varias de La Zaragozana, y vuelvo a lamentar no poder acceder a ella más fácilmente.