viernes, 5 de noviembre de 2010

Young's Double Chocolate Stout

MARCA: Young's
MODELO: Young's Double Chocolate Stout
ESTILO: Milk Stout con chocolate (5'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: De la fusión en el 2006 de Charles Wells Breweries y Young's & Co Ltd surgió la enorme cervecera, y sin embargo y por fortuna independiente de multinacionales, Wells & Young's Ltd, en la actualidad responsable de la elaboración y venta de algunas de las más famosas y reconocidas cervezas de Inglaterra, como Young's Special o Wells Bombardier, e incluso de otras marcas que jamás se me habría ocurrido atribuirles, como Red Stripe, Estrella Damm, Erdinger Weissbier o Kirin Ichiban.

Los anteriores reuniones de cerveza y chocolate me habían supuesto una hecatombe nuclear, y sin embargo algo me impulsó a comprar esta botella en Líquidos, quizá mi reciente afición a lo británico es en parte responsable. La serví con un poco de miedo, y que el color del líquido ni se inmutase ante la luz me inquieto también un poco, aunque quizá en otro sentido. Sin embargo, que de su cremosa espuma estilo capuccino emanase un olor dulce pero nada empalagoso me permitió tranquilizarme un poco. Se presentaba este como una mezcla de malta torrefacta y caramelo, con suaves toques de café, que termina fundiendose con chocolate con leche para conformar un aroma impecable en el que acaban destacando sobretodo chocolate y toffee por encima de los demás matices.

Sedosa a su paso pero repleta de sabor, comienza con calma con malta torrefacta y caramelo, progresivamente se va introduciendo el chocolate con leche que rapidamente predomina en el trago, acompañado por un suave deje de café, algo de azúcar moreno y té negro. Por supuesto es dulce pero con absoluto control y sin exceso en ningún instante, hasta que al final un amargor moderado, con claras notas de regaliz negro y ligeramente herbal, se interpone. El regusto es suave, largo, de leve amargor continuo, repleto de chocolate que ahora parece más puro que con leche, clara presencia del lúpulo y resquicios del regaliz. Impresionante el empleo del chocolate por parte de estos ingleses, su presencia es evidente en todo momento pero jamás molesta, y la combinación de este con una Sweet Stout es simplemente estupenda. No podría haber quedado más satisfecho, solo me queda disculparme por la desconfianza, y plantearme muy seriamente el lanzarme a probar la de plátano de esta marca.


NOTA:

miércoles, 3 de noviembre de 2010

St. Landelin La Divine

MARCA: St. Landelin
MODELO: St. Landelin La Divine
ESTILO: Bière de Garde Blonde (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS: Con unas cuantas cervezas de las que me traje del viaje al sur de Francia este verano, me vine a la capital a contrarrestar la ausencia de variedad cervecil que esta ciudad ostenta (aunque hace poco he descubierto una cervecería que sin duda será objetivo de mi magnánimo afán consumista).

Entre ellas, otra cerveza de guarda (bière de garde), de una cervecera de la que ya hemos hablado en alguna ocasión: Les Brasseurs de Gayant (la misma que hace la Goudale y la terrible la Bière du Demon). Me iba haciendo falta una buena cerveza, y he quedado algo destemplado con La Divine, una cerveza de expléndida presentación pero de resultado dudoso.

La Divine St. Landelin tiene una botella de cuello grueso, como muchas cervezas de alta fermentación y elevada concentración alcohólica (véase Chimay o Gulden Draak). La Divine sigue ese patrón, con sus 8'5º en volumen y su aroma alcohólico.
Al servirla se aprecia un color dorado ambarino, muy cristalino y con carbonatación media. Una generosa capa de espuma blanca, cremosa y abundante, va desapareciendo poco a poco, dejando su rastro en las paredes del vaso. Su aroma es muy afrutado, con presencia de melocotón y manzana, toque maltoso y un prominente matiz alcohólico que no presagia nada bueno.

En el trago los matices cobran fuerza, con el alcohol encabezando la mezcla, en la que se distingue de nuevo el deje afrutado, la malta y un toque metálico que deshace bastante el encanto. El alcohol, insisto, es persistente y llega a empañar el resto de matices, quedando una mezcla dulzona que sin desarrollarse termina en un final amargo cargado de espuma.

No me han dado muy buena sensación las cervezas de esta casa.

NOTA:

lunes, 1 de noviembre de 2010

Estrella Levante Clásica

MARCA: Estrella Levante
MODELO: Estrella Levante Clásica
ESTILO: Pale Lager (4'8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Desconocía por completo la existencia de esta cerveza hasta que mi compañera de clase María (a.k.a. "La Murciana") me preguntó qué opinión tenía de la cerveza que se vendía por su tierra. Cuando con mi respuesta descubrió que ni la había probado ni había oído hablar de ella, decidió enmendar esta situación y a las pocas semanas ya tenía un sexteto cervecil en mis manos, detalle que le agradezco muchísimo y que será recompensado, quizá con una Sierra Nevada Pale Ale.

Cuatro de estas botellas volaron durante un par de excursiones nocturnas al Parque Grande, y lo cierto es que no me desagrado, más bien al contrario. Tema aparte fue cuando le dediqué un poco de tiempo en la tranquilidad de mi casa, solo con el aroma, que al haber bebido antes directamente de la botella pasé por alto, ya me desencanté, puesto que además de su extrema ligereza daba la impresión de ser muy artificial, con notas de malta dulce y cereales, y mínima presencia de lúpulo.

El sabor tampoco da para mucho, es de comienzo dulzón muy maltoso, como sirope, con un gusto claro a cereales y un deje cítrico. Un poco densa, presenta algo de cuerpo, sin embargo es demasiado dulce para mi gusto, tanto que incluso en el final predomina este sabor, con más malta, un levísimo amargor y se intuye lúpulo ligeramente frutal. Bastante sencilla y lineal, más melosa de lo que me gustaría, sin embargo tampoco es imbebible, solo que si se le presta atención los defectos se evidencian rápido.

NOTA:

miércoles, 27 de octubre de 2010

DouGall's Tostada

MARCA: DouGall's
MODELO: DouGall's Tostada
ESTILO: Dark Ale (6'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Cuando tienes dos cervezas distintas de una compañía y la primera que te tomas resulta ser espantosa, a la hora de probar la otra quieras que no vas predispuesto a no encontrar nada interesante, y un poco arrepentido de haber gastado el dinero en esas botellas en vez de haber cogido alguna de otra marca. En el caso de DouGall's me pasó a la inversa, me gustó mucho la Rubia que probé pero en vez de comprar también la Tostada me había gastado los cuartos en una Weihenstephaner Vitus, así que asumí que por el momento me quedaría sin comprobar si ambas son tan buenas.

Por suerte, la musculosa Ana se ofreció a traerme un par de botellas más de Pamplona, una de ellas la regalé y la otra la abrí la semana pasada. La serví en copa y pude observar una cerveza de color marrón ébano, muy turbia, protegida por una cremosa y densa espuma beige que se redujo al rato, quedando aún así un buen remanente. En cuanto al aroma, la verdad es que cuesta diseccionarlo por su ligereza, pero finalmente se acaba distinguiendo malta tostada y caramelo como notas dominantes, mínimo chocolate y suaves frutas maduras y, como me sucedió con la otra DouGall's, aparecen inesperados matices que recuerdan a lichi o piña en almibar. Esta característica definitivamente no es habitual en este tipo de cervezas, pero no me molestó lo más mínimo, al contrario.

En boca el tueste se demuestra más intenso de lo que cabía presumir, bastante cercano al torrefacto, lo que le da bastante carácter. A esto le acompañan notas de caramelo bastante claras y chocolate más secundario, se acoplan con suavidad frutas dulces, uva y piña/lichi que pierden fuerza hacia el final y se tornan manzana ácida. El final es también agresivo, deja la boca seca, con una acidez considerable y un amargor marcado, que no desequilibrado, para dejar un regusto un poco alcohólico y cítrico, con recuerdos de pomelo. Lo cierto es que la disfruté mucho, es una cerveza algo áspera pero en mi opinión muy bien hecha, quizá me gustó algo menos que la Rubia pero de todas maneras bebería ambas de nuevo de muy buena gana (y probablemente lo haga). A ver si acaban embotellando la de trigo y tengo la ocasión de probarla.


NOTA:

lunes, 25 de octubre de 2010

The 4 Elements

MARCA: The 4 Elements
MODELO: The 4 Elements
ESTILO: Pale Lager Biológica (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Y para terminar con la "exquisita" selección de cervezas salvavidas del Corte Inglés, la 4 Elements, cerveza biológica alemana de gran renombre y cuyas características no había tenido interés de comprobar hasta ahora, o al menos se me habían pasado bastante desapercibidas.

The 4 Elements lleva una gran campaña de marketing a sus espaldas, ensalzando su cualidad biológica, elaborada con ingredientes naturales, que además vienen a ser los cuatro elementos aristotélicos de la naturaleza: agua, fuego, tierra y aire (sin olvidar que el 5º elemento eres tú mismo); y ensalzando también la famosa Reinheitsgebot, la Ley de Pureza alemana, a partir de la cual está elaborada. Toda una declaración de intenciones que finalmente no deja de quedarse en la palabrería que es.

The 4 Elements es de botella transparente (más bonita llena que vacía), y viste una etiqueta jeroglífica que se lleva la vista. Tras deschaparla se aprecia un aroma intenso a malta, un presagio de las características que preveía encontrar. En el vaso (que por cierto tiene la forma que presume en la foto) luce un color amarillo limón muy cristalino, un caldo en el que durante unos segundos permanece una fina espuma blanca.

El aroma viene capitaneado por la malta, con un leve toque herbal del lúpulo y lo que se vislumbra como un matiz entre meloso y amargo. El trago es refrescante, pero no va más allá de una bocanada maltosa, algo afrutada, que finaliza en un amargor singular y muy plano, dejando un regusto agrio. No tiene las grandes cualidades que anuncia, aunque se deja beber, sin pena ni gloria.

Sigo quedándome con Neumarkter Lammsbräu como biológica de cabecera.

NOTA:



sábado, 23 de octubre de 2010

Samuel Smith's Old Brewery Pale Ale

MARCA: Samuel Smith
MODELO: Samuel Smith's Old Brewery Pale Ale
ESTILO: Pale Ale (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Pocas cerveceras británicas se pueden considerar tan legendarias como Samuel Smith, fundada en Tadcaster 1758 y todavía activa, produciendo más de 10 cervezas distintas, todas de una calidad más que respetable. Ultimamente, entre el viaje a Londres y la Imperial Stout que me ayudo a mejorar una ya de por si magnifica tarde, he tenido bastante contacto con esta marca, y hace un par de días decidí continuar con esta racha sacando por fin de mi trastero la Pale Ale que llevada unas semanas guardando.

En copa presenta un aspecto estupendo, bastante transpartene, de color marrón algo anaranjado protegido por una capa de espuma casi blanca no especialmente gruesa pero que se mantiene durante todo momento. Emite un aroma discreto, muy delicado, en el que destaca principalmente el caramelo en una base compuesta también por dulce malta tostada, toques de nuez y azúcar quemado. Notas de frutas maduras muy moderadas, con un mínimo deje de naranja, y un soplo de lúpulo acaban por completar una muy buena presentación.

Ninguna sorpresa en el sabor, es de un clasicismo impecable, comienza con suavidad con una mezcla de caramelo y malta tostada, con toques de toffee y galleta, en la que aprecian medidos recuerdos frutales, perfectamente acompasados con el caramelo, con un leve gusto a naranja y uva al final. El regusto ofrece una sensación un poco seca, dominado por completo por fruta madura y lúpulo floral, con un controladísimo amargor y un casi imperceptible soplo picante. Una cerveza no especialmente compleja pero 100% efectiva, su cuerpo medio y su baja gasificación la convierten en una perfecta candidata a cerveza de sesión.


NOTA:

martes, 19 de octubre de 2010

Achel Bruin 8º

MARCA: Achel
MODELO: Achel Bruin 8º
ESTILO: Dubbel Trapense (8% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Llevaba un tiempo planteándome el revisar alguna de las reseñas de cervezas Trapenses que hice en los primeros tiempos de este blog, más que nada porque considero que ahora las podría realizar bastante mejor, sin embargo por pura casualidad se me puso a tiro una botella de la cervecera más pequeña de las siete Trapenses que hay en el mundo y me pareció mucho más interesante comentar esta primero y dejar las correcciones para más adelante. La abadía que elabora esta cerveza se fundó en el S. XVII en Flandes, fue destruida durante la revolución francesa y vuelta a construir por monjes de la abadía de Westmalle en 1844, lo que propició que al poco tiempo empezase su actividad cervecil. Por desgracia, el instrumental que utilizaban para este fin fue confiscado y fundido por los alemanes en la Primera Guerra Mundial (si, suena absurdo sacrificar cervezas para construir armas pero así sucedió) así que la fábrica produjo sus últimas cervezas en 1914... o casi, porque gracias a la colaboración de monjes de las abadías de Westmalle y Rochefort las cervezas de Achel volvieron a ver la luz en el 2001, para deleite de los amantes de esta bebida.

Es de un sorprendente color pardo casi rojo, mucho más alejado del marrón de lo que viene siendo habitual en las Dubbel, y de turbidez más limitada. De su fina capa de espuma beige emana un intenso aroma con una base de malta dulce, caramelo y azúcar quemado, que se entrelaza con una mezcla de melocotón, naranja y más leve manzana, que destacan ligeramente por encima de dicha base. Todo esto queda adornado por un moderado picante levaduroso y suavísimo alcohol, que le dan una discreta agresividad que le sienta muy bien.

Es sabor es igualmente potente, de cuerpo medio, repleto desde el primer momento de malta tostada y caramelo con un comienzo dulce y no tan frutal como esperaba, se suma un fondo de chocolate con leche y moderadas notas de manzana y pera, melocotón más secundario, y para completar el trago un medido toque de alcohol y especias picantes. También resulta peculiar en el final, más amarga que la mayoría de las Dubbel e incluso algo refrescante, con recuerdos de chocolate, frutas (resalta pera), picante y alcohol, este último muy evidente y que persiste hasta el último momento. Una buena cerveza, no tan densa y compleja como esperaba pero no me he quedado en absoluto insatisfecho.

NOTA: