MODELO: De Struise Cuvée Delphine
ESTILO: Imperial Stout envejecida en barrica de bourbon (13% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica
CARACTERÍSTICAS: Siguiendo la línea de mi última entrada sobre De Struise continúo presentando más versiones de su afamada Black Albert. En este caso la popularidad de la protagonista es como mínimo equivalente, puesto que se trata de su reputada Cuvée Delphine, envejecida durante 12 meses en barrica de bourbon 4 Roses, que se elabora desde el año 2008. Su nombre es un homenaje a Delphine Boël, hija extramatrimonial del rey Alberto II de Bélgica, que tras años reclamando su origen este fue reconocido en el año 2020, lo que le supuso adquirir el título de princesa Delphine de Bélgica.
Este clásico moderno es de un color azabache, imperturbable por la luz. Genera una espuma más marrón que beige, de burbuja microscópica, que se limita a un anillo pegado a la copa. En nariz es una bomba, es predominantemente dulce y se puede encontrar lo que se quiera: malta, cacao, tarta de chocolate, torrefacto, frutos secos caramelizados o café bombón, con una base de frutas del bosque y vainilla, y algún deje de nuez moscada y humo. La barrica de bourbon no pasa desapercibida en absoluto, pero está perfectamente integrada, y tiene además un curioso frescor aportado por el lúpulo americano que le quita pesadez.
En boca tiene una textura oleosa que desafía su definición como bebida. Tiene un paso lento por boca, casi sin carbonatación, llenando de sabor todo lo que toca. Empieza dulce, y recuerda un poco a un Pedro Ximénez, con intensas notas de malta muy tostada, sirope de chocolate, café, cacao, arrope, regaliz negro y frutos negros, sobretodo moras, arándanos y uvas pasas. La evolución es lenta, pausada, poco a poco va surgiendo un amargor, se asoma el calor del alcohol, y aparecen recuerdos de bourbon, notas de vainilla, unos toques de especia picante y un leve frescor del lúpulo. El broche final es un regusto largo, aterciopelado, donde está la barrica, los tostados, el cacao y un punto licoroso con la calidez del alcohol. Complejidad tan extrema como su armonía, Cuvée Delphine es una cerveza impecable que quien no la haya probado debería hacerlo.
NOTA: