jueves, 4 de septiembre de 2008

Duff

MARCA: Duff
MODELO: Duff Pils
ESTILO: Pilsener (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: México

CARACTERÍSTICAS:
Duff para tí
Duff para mí
cerveza Duff
te hará feliz

He aquí una prueba del éxito de la televisión, y de cómo algo tan sencillo como una serie de animación puede llegar a calar en una multitud de personas, hasta el punto de llevar la serie a la vida real. Los Simpsons, serie de dibujos animados creada por Matt Groening, ha tenido uno de los éxitos mayores de la historia de la televisión, hasta el punto de que muchos de los inventos, ideas y estereotipos mostrados en los capítulos, han sido plasmados en la realidad humana.

De esta forma podemos ver cómo el coche que diseña Ho
mer Simpson en uno de los episodios se ha convertido en realidad (en la foto como una maqueta, pero se llegó a construir en tamaño real). Un amigo mío usó otra de las ideas de Homer, la silla de seis patas, consistente en una silla con dos patas con bisagras traseras, que parasen una caída hacia atrás.

Y no podía quedarse fuera el producto que levanta pasiones y que viene homologado como "Cerveza Duff" en la serie de Los Simpsons. Pero por supuesto, los derechos de autor han intervenido siempre, desde que a finales de la década de 1990, Lion Nathan elaborase en Australia la primera Duff Beer real. 20th Century Fox lo denunció por uso indebido de su marca y ganó. Un local de Nueva Jersey, el J.J. Bittings Brewpub de Woodbridge elaboró una cerveza también llamada Duff. La propaganda del local incluía imágenes de Homer Simpson.
En 2006, un mexicano obtuvo la patente de la marca "Duff" para lanza
rla a la venta.
7-Eleven como parte de promoción de Los Simpson: La película puso en venta la cer
veza Duff Y Buzz Cola entre otros; solo que en lugar de ser cerveza o refresco, se trató de una bebida energética de edición limitada.

En agosto de 2008 la cerveza Duff comenzó a venderse en España. La apariencia comercial es igual que la que aparece en cualquier episodio de Los Simpson, y viene de mano de la cervecera belga Haacht.

Sinceramente nunca la había visto, y al reconocerla en la estantería de un videoclub de aquí en Burgos, tuve que hacerme con una por narices. La cultura de masas arrastra a las personas (por muy fuertes que creamos ser), aunque he de decir a mi favor que la compré ante todo por curiosidad, quería saber qué sabor le habían dado. Leer en la etiqueta que venía de Bélgica me añadió aún más curiosidad, porque ya sabemos cómo son estos belgas para las cervezas... No obstante, imaginé que sería una cerveza hecha de merchandising, que poco se alejaría de una normalita (si es que llegaba a saber bien), y sólo sería por la fama de su nombre.


Nunca hubiese imaginado este sabor para la Duff. Tiene un amargor importante desde el primer trago hasta pasados unos minutos, pero la presencia de la malta consigue un resultado nada negativo. Me recuerda levemente a una Voll Damm algo más amarga y suave, aunque no tiene unas características excepcionales que le hagan destacar. No obstante, repito, no está mala.


La cerveza tiene un color quizás demasiado amarillento (hablo desde la comparación con la serie), sobre el que se posa una espuma blanca burbujeante. Lo
s 5 grados de alcohol cobran presencia al terminar la botella, sin resultar pesados.

Sinceramente la había imaginado de otra forma. Es decir, creía que tendría un sabor más artificial, que habrían hecho una copia de Budweiser (que al fin y al cabo es lo que se parodia en la serie). Había imaginado la Duff más parecida a una cerveza tipo caña, de las de bar de toda la vida, aunque a la americana.


NOTA:




martes, 2 de septiembre de 2008

St. Louis Premium Kriek

MARCA: St. Louis
MODELO: St. Louis Premium Kriek
ESTILO: Lambic de Cerezas (3'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS:
La Kriek forma parte de las cervezas de fermentación espontánea. Para su fabricación se ponen cerezas a macerar en barriles de roble donde ya está fermentando lambic. En termino medio, se usan 200 gramos de cerezas por litro. Una nueva fermentación empieza en el barril, provocada por el azúcar de las cerezas.
La Premium Kriek contiene más cerezas, y por lo tanto tiene un aroma más afrutado, un color más profundo a fruta y unos sabores más pronunciados y dulces que las demás Kriek del mercado, por lo que se acerca más a las Krieks originales, donde el elemento fruta era más importante que el elemento alcohol.

"Un refresco, un bitter kas con sabor a cereza", son las palabras que han venido a mi mente en cuanto he dado el primer sorbo (tras temerme el resultado por el olor) de esta "cerveza". Definitivamente el abanico de posibilidades en la fabricación de cervezas es tan extenso como los gustos de los cerveceros, y a mí, esta cosa concretamente, no me gusta.
Este "zumo gaseoso" tiene un color rojizo y una fina capa de espuma blanca. Sus 3'2% de alcohol pasan desapercibidos al gusto por el sabor dulzón y empalagoso que le da el zumo de cereza.

No he podido evitar recordar el análisis y comentario de Embracing de la Mort Subite Extreme Framboise, y es que definitivamente creo que este tipo de cervezas dulces no es que nos entusiasmen demasiado.

NOTA:

viernes, 29 de agosto de 2008

La Ronda #3: Cata de Cervezas

El señor Delirium, de Cervezas y Otras Cosas, se ha levantado de su asiento para invitarnos a todos a una tercera edición de la Ronda, proyecto en común de diversos blogs en español de temática cervecera que parece que está cosechando unos resultados óptimos. En esta ocasión, hace una difícil propuesta, pide que organicemos una cata (por el momento ficticia) de entre 5 y 8 cervezas, para dar a conocer esta bebida a gente sin demasiada experiencia en este campo.

Son muchos los artículos que ya se han publicado, con estructuras muy diferentes, algunos intentando centrarse en los artículos de un solo país, otros acompañando la cerveza con comida, etc, por lo que a estas alturas es difícil innovar. No obstante, yo voy a intentar hacer algo distinto, invitando a los bloggers a una comida en la que todos los platos han sido sustituidos por cerveza, y que además estarán acompañados, lógicamente, por bebida... ¿adivinan cuál?

Empecemos, aprovechando que pega el calor y que los supuestos catadores no son especialmente aficionados a esta ambrosía terrenal, con algo refrescante, ligero y de fácil beber, para que abran boca mientras esperan el entrante. Encaja perfectamente con estos requisitos una Hefe Weizen, y dentro del innumerable abanico de buenas posibilidades que ofrece este estilo, optaría por las más famosas, Franziskaner o Paulaner. Entre estas dos, la más apta para esta ocasión me parece una Franziskaner Hefe-Weiβbier, con su sabor trigal, bastante afrutado, cuerpo ligero y un dulzor no excesivo, que probablemente sorprenderá al catador, por no ser en absoluto parecido a la cerveza que ponen en un bar cualquiera.

Y por fin llega el entrante, una ensalada vegetal... que inmediatamente convertimos en una cerveza ecológica, elaborada al 100% con productos naturales, sin ningún tipo de aditivo. En la primera que pensé, para no complicar mucho la cosa ya en el inicio, fué en una 4 Elements, pero recordé otras marcas con un sabor más herbal, entre ellas la más común es Riedenburger Brauhaus Pils. Al igual que la Franziskaner Hefe, esta Pilsener está sin filtrar, pero en ella se aprecia fácilmente un inicio más ácido que contrasta con el final especiado, manteniendo un amargor suficientemente moderado como para no molestar al que la está disfrutando y así se pueda recrear con matices herbales/florales que esta marca posee.

Una vez terminada, tenemos otro modelo que seguro que, gracias a ser una Ale inglesa(estilo minoritario por estos lares) y a su peculiar sabor debido a las aguas sulfuradas de Burton upon Trent, no dejará indiferente. Se trata, por supuesto, de una Marston's Pedigree, una excelentísima Bitter Ale con un cuerpo medio, y de sabor duradero, amargo pero equilibrado, que entretendrá a nuestro invitado con sus múltiples matices mientras espera la llegada del primer plato.

Dejemos una cosa clara, no me gustan demasiado las comidas frugales, siempre he preferido que el primer plato sea contundente, y el segundo más contundente aún. Por supuesto, esta cata, aparte de enseñar lo variado del mundo de las cervezas, es acorde a mis gustos, así que el primer plato es fuerte, tanto como la endiablada Duvel. El completísimo cuerpo de esta Ale belga será inesperado debido al color dorado, facilmente confundible con el de una lager ramplona, aunque probablemente se lo huela (literalmente) instantes antes de saborearla. Notará un sabor perfectamente equilibrado, algo afrutado, con especias al final del trago, y realmente intenso en comparación con las anteriores que ha probado. Pensé también para primer plato en una Grimbergen Cuvée o en una Chimay Tripel, pero al final me acabé decantando por esta.

Llegamos a la parte más dura de la cata, cervezas de sabor más agresivo y con mayor graduación. Como segundo plato, y el equivalente en fuerza a un chuletón bien especiado, propongo una Gulden Draak, una Ale Oscura de complejísimas características, empezando por un intenso olor a malta, grano tostado, acompañado por la presencia de frutas y un picor moderado. El sabor es también muy diferente a la anterior Ale belga, recuerda al café, muy caramelizado, donde se reconoce facilmente el alcohol y, sin embargo, no me parece que estropee en absoluto el sabor de la cerveza. También se notarán matices afrutados, pero no como protagonistas en el trago, que durará mucho tiempo en el paladar.

Como no, la carne tiene que ir acompañada por un buen vino, pero como no soy muy de vinos y, aparte, esta es una cata de cervezas, propongo a la estrella más brillante de la muestra, Trappistes Rochefort 10. Como su nombre indica, es una Ale de denominación trapense, con 11'3º de alcohol, la más alta graduación de la cata, con un olor especialmente intenso y que, sin embargo, no se hace molesto gracias a su dulzor. El sabor también es potente, llena la boca, con notas caramelizadas, muy afrutado, a bayas quizá, uva e incluso se le pueden encontrar características más propias del vino. Excelentísima, aunque reconozco que puede resultar algo fuerte para un recién iniciado, aunque a mí tampoco se me hizo especialmente agresiva, todo lo contrario. (en caso de que parezca difícil de encontrar, sustituir por una La Trappe Quadrupel)

Ya llena la tripa, solo queda una pregunta muy típica. ¿Postre, café? Suponiendo que la respuesta sea doblemente afirmativa, servimos primero el postre, algo de fruta. Barajaba como posible una Lambic Frambozen, pero finalmente me he decantado por otra cerveza donde la fruta juega un papel muy importante: Hoegaarden Verboden Vrucht. Es una Ale belga, muy afrutada y dulce, con carbonatación muy alta y, por supuesto, un amargor especialmente ligero. Además, es de agradecer el que tenga un final de trago algo especiado y muy refrescante. Tras dos pesos pesados como Trappistes Rochefort y Gulden Draak, esta se hará fácil de beber.

Por último, como café solo cabe una posibilidad, una Stout. Pensé como primera opción en un modelo excelente, Old Rasputin, pero entre que lo probé por casualidad hace mucho tiempo y tan apenas la recuerdo, y que por aquel entonces era incluso menos capaz que ahora de apreciar una buena Stout, serviré una más común, que critiqué recientemente: Beamish Irish Stout. Carbonatación muy ligera, olor a grano tostado, cuerpo ligero y sabor cremoso, amargo, con claras reminiscencias a cafe. Ideal para terminar una comida y, en este caso, para terminar una cata.

jueves, 28 de agosto de 2008

Stella Artois

MARCA: Stella Artois
MODELO: Stella Artois
ESTILO: Pale Lager (5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica


CARACTERÍSTICAS:
Stella Artois, la número uno en Bélgica, muy conocida en todo Europa, y que yo pocas veces pido, y no será porque no me gusta y porque no es común en bares y cervecerías. El lema "Anno 1366" que aparece en el logo de la marca se refiere a la fecha en que comenzó la tradición de preparación de la cerveza en la ciudad de Leuven, de donde es originaria.

Tras deschaparla, un olor refrescante envuelve la sala. Su color rubio sostiene una espuma blanca y burbujeante, que tarda poco en desaparecer. El sabor es amargo, muy refrescante y bastante "gaseoso", ya que sigue creando espuma dentro de la boca. La botella refresca con sólo mirarla.
Es una cerveza que entra muy fácilmente, y que se hace un hueco entre las cervezas ideales para tomar cuando hay sed. Además, sus 5'2 grados no llegan a ser un peligro, aunque si hay sed, podrías ponerte hasta arriba de Stella sin ningún problema.

La Stella Artois es una genial elección para la charla y el disfrute de música o películas. En mi opinión proporciona todo lo que tiene que tener una buena cerveza como tal (muy lejos de las exquisiteces cerveciles de mayor graduación y variadas composiciones).

NOTA:

domingo, 24 de agosto de 2008

Weltenburger Hefe-Weiβbier Hell

MARCA: Weltenburger
MODELO: Welterburger Hefe-Weiβbier Hell
ESTILO: Hefe-Weiβbier (5'4% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania


CARACTERÍSTICAS: El monasterio de Weltenburger, de la orden Benedictina, fue fundado por monjes irlandeses o escoceses a orillas del Danubio, en el municipio alemán de Kelheim, en el año 620, por lo que puede presumir de ser el que más tiempo ha durado de cuantos siguen en pie en la región de Bavaria.

Los monjes y sacerdotes pertenecientes a este se han dedicado a la elaboración de cerveza desde el año 1050, siendo así la segunda cervecera más antigua del mundo. Este proceso se sigue realizando en las mismas salas que hace 300 años, cuando fue la abadía fue construida por la familia Asam (que dan nombre a uno de los modelos de esta marca con mayor reconocimiento)

Nada más abrir la botella nos sorprenderá un muy fuerte aroma a plátano, mezclado con el del trigo, que se puede percibir a gran distancia. Notaremos también la presencia de especias, que da ese ligerísimo picor tan característico en la nariz. Al servirla podremos ver una bebida de color amarillo turbio, intenso, con abundante espuma, aunque algo menos que las mayoritarias de este estilo.

Tiene un cuerpo ligero/medio, con un importante énfasis en el trigo y no tanto gusto a plátano como sugería el olor, aunque por supuesto mantiene su normal relevancia en el inicio del trago. El gusto en el paladar es intenso, muy refrescante y agradable, y es en el fondo del mismo donde la alta carbonatación ataca de forma directa. El final del trago es más frutal, a cítricos (sobretodo naranja) con su consiguiente acidez, quedando un amargor suave en la garganta. Ciertamente, una degustación que me encantaría repetir.

Se podría considerar Weltenburger como una excelente representante dentro de las Weizen, muy equilibrada, especialmente refrescante, y que a partir de ahora será una de las opciones que baraje cuando me apetezca una buena cerveza de este estilo.

NOTA:

lunes, 18 de agosto de 2008

Beamish Irish Stout

MARCA: Beamish
MODELO: Beamish Irish Stout
ESTILO: Dry Stout (4'1% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Irlanda

CARACTERÍSTICAS: La cervecera Beamish and Crawford fue fundada en 1792 por William Beamish y William Crawford en Cork, la segunda ciudad de Irlanda por número de habitantes. Solo 13 años después ya se había convertido en la fábrica número 1 de Irlanda, y la tercera en tamaño de toda Gran Bretaña, y desde entonces no ha parado de crecer, aplicando las nuevas tecnologías a los procesos de fabricación de sus cervezas, permitiéndole en la actualidad competir con marcas gigantes como sus compatriota Guiness y Murphy's.

Tuve la suerte de encontrar recientemente en Pamplona un bar en el que tenían esta marca en barril, y no dudé en pedir una pinta para experimentar, puesto que nunca la había probado. Me sorprendió tanto el color, negro que a primera vista parecía opaco, pero que al trasluz despedía unos llamativos reflejos rubí; como el olor, muy intenso y fresco, a malta pero sobretodo a grano tostado, y realmente agradable. Como parece obvio, no estoy demasiado experimentado en lo que a Stout se refiere, por lo que probablemente no pudiese apreciar importantes matices de esta Beamish, pero aceptaré de buen grado (como siempre) cualquier corrección/colleja que me toque recibir.

El cuerpo era muy ligero, suave y cremoso, con un relevante toque de café y, por supuesto, bastante amargo. El sabor, poco duradero, deja un regusto no muy fuerte a malta en el fondo de la garganta, y más ligeramente a café. La pinta baja a un ritmo considerable, y el amargor se intensifica un poco a medida cuando ese descenso llega a sus últimas etapas, por lo que me resultó algo más áspera que Guiness, aunque me gustó bastante más, me pareció que tenía mas carácter. Es, la verdad, entretenida de beber, no es especialmente refrescante pero deja a uno satisfecho, lo cual me hizo acordarme inmediatamente de las "cervezas de sesión" del Filósofo, y proponer a Beamish como una buena candidata para esas ocasiones.


NOTA:

domingo, 17 de agosto de 2008

Duvel

MARCA: Duvel
MODELO: Duvel
ESTILO:
Ale Dorada Fuerte (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN:
Bélgica

CARACTERÍSTICAS: Brouwerij Duvel Moortgat es una importante cervecera de tradición familiar, que fue fundada en 1871 por Jan-Leonard Moortgat en la villa belga de Breendonk, al norte de Bruselas, y muy cerca de Grimbergen, otra población muy bien conocida por los amantes de la cerveza. Su cerveza estrella fue bautizada como Victory Ale, en conmemoración del final de la Gran Guerra en Europa, aunque posteriormente se la renombró definitivamente como Duvel, a raíz del comentario de un amigo de Albert Moortgat que la calificó como “nen echten Duvel” (un verdadero diablo)

He de reconocer que el aspecto exterior de este modelo no crea demasiada expectación, puesto que la presentación es bastante sencilla, una botella marrón de grosor considerable y una etiqueta blanca con el nombre en letras rojas (donde tengo entendido que hay escondidos un ángel y un demonio, aunque nunca los he encontrado). Sin embargo, algo que se aprende en seguida en el mundillo de las cervezas es que no tiene por qué haber concordancia entre el diseño de la botella y el líquido del interior (de hecho, no pocas veces sucede el fenómeno contrario y la disparidad no puede ser mayor), y es exactamente esto lo que le pasa a Duvel.

Esta Ale tiene un color amarillo, a medio camino entre pálido y dorado y, ojo, esta especialmente carbonatada debido al azúcar que se le añade previo al embotellado, con lo que si no se sirve con cuidado nos podemos encontrar con la copa llena de espuma, pero sin tan apenas nada que beber. Por supuesto, la espuma será abundantísima y, además, es muy duradera, aunque poco compacta. Al ir a beber por primera vez empecé a arrepentirme de haber prejuzgado a esta marca debido a que nada más acercar la copa a los labios mi nariz fue invadida por un olor intenso y refrescante donde la fruta marca el ritmo, con aromas de manzana y pera, acompañado por suave malta dulce y mínimo toffee, un firme recuerdo de miel y un soplo de lúpulo floral y picante.

Esa agradable sensación culminó al paladear la bebida y poder apreciar una cerveza con un cuerpo que llena completamente la boca, pero que no resulta ni suave ni ligero, sino simplemente perfecto. Además, controla sin problema alguno los 8'5º de alcohol que tiene mediante su complejo sabor, en el que compite el gusto a manzana con el de la malta, mientras un toque de cítrico matiza el conjunto, para liberar alcohol, amargor y picante justo al final, quedando así una cerveza agresiva pero en absoluto desequilibrada. El sabor que se percibe en la boca, en el paladar y en la garganta es estupendo, con un amargor justo y encima fácil de beber. Sin duda una cerveza excelente.

NOTA:





El pasado sábado, Embracing me recibió en su casa con un ejemplar de su tan querida Duvel, que me obligó a beber. Estoy seguro de que si le hubiese dicho que no, me habría golpeado con el mando de la Wii repetidas veces.

La Duvel me pareció una cerveza completísima, sin llegar a ser (en mi opinión) el roce de la perfección. Un sabor intenso con una mezcla curiosa de distintos aromas, que se mantiene minuto tras minuto después de dar un sorbo. Cuerpo contundente y sabroso, y espuma duradera con gran cantidad de matices. Una cerveza que me supo exquisita de principio a fin, y que no dudaré en comprar.

Eso sí, como ya ha sido dicho, su etiqueta la deja muy al margen a la hora de encontrarnos con una estantería repleta de cervezas. Una joya líquida que sabe esconderse muy bien.

NOTA:



viernes, 15 de agosto de 2008

San Lorenzo

Encontrándonos casi a finales de las fiestas de San Lorenzo, en Huesca, me parece oportuno hacer un comentario sobre la cantidad (ingente) de bebida que ha tenido presencia a lo largo de estos días. Habiendo sido muy comunes los whiskys, rones y demás parafernalia alcohólica, pero encontrándonos en un blog de cerveza, pues eso, vamos a echarle un vistazo a estas señoras.
He de decir que tan sólo puedo considerar el primer día de fiestas (el 9) como un día asombrosamente cervecil, esto es, donde ha habido más cerveza que cualquier otra cosa. Y esto se debe, como no, a que fue el día en que Embracing Darkness vino a hacernos una visita a Huesca, con todas sus consecuencias.

Había preparado junto a unos amigos la ocasión con una reserva de alcoholes distintos, como he dicho antes, pero preferimos atiborrarnos de cerveza este día, así que en cuanto entramos por la puerta del local donde ha transcurrido el 70% de nuestro tiempo en fiestas, las caras de alegría fueron mayúsculas.

Echando mano de lo barato, disponíamos de dos packs de 24 latas de Steinburg clásica, la característica del mercadona. Una cerveza muy del montón, pero también bastante barata.
Para la ocasión también cayeron dos packs de 6 botellas de Voll Damm, bebida algo más selecta e interesante, que ayudó a tomar con un poco más de gusto las Steinburg, ya que esas entraron después de las Voll Damm, cuando ya nos encontrábamos con algo más de ligereza mental...
Fue entonces cuando Embracing se dió cuenta de cómo iba a desembocar la cosa y sacó una sorpresa. Me dijo: "antes de que estés tan borracho que no sepas diferenciar sabores, prueba esta, que con casi total seguridad no la volverás a probar nunca, ya que es de la tienda de cervezas biológicas y me dijeron que era la última, que no van a volver a traer".
Me presentó una Müller Lagerbier, de la cual haré el comentario en su entrada (tomé unas misteriosas notas en el movil sobre su sabor, para no olvidarlo con lo que nos venía encima).
Y por supuesto se había traído una cerveza curiosa más, una cerveza de cannabis que probamos en el momento en el que empezaba a moverse todo peligrosamente.

Más adelante, tras comer y dormir en un cesped, volvimos a la carga, esta vez agenciándonos también alguna Budweiser (American Bud) de los compañeros, anteriormente criticada por nosotros... pero teníamos sed. Las Steimburg seguían corriendo y nos permitimos probar el whisky de 10 años que había comprado otro amigo para la ocasión.
Más tarde me encontré con una lata en la mano, de la que estaba bebiendo. Le hice una foto, pues en el nombre yo leía Embracing y me hacía mucha gracia. Por cierto, era la Emdbräu, que personalmente no había probado hasta entonces. No recuerdo el sabor, por supuesto.
Es una pena el no haber sacado más fotos del día, pero verdaderamente no estábamos en condiciones de enfocar nada.
La fiesta se remontó hasta altas horas de la madrugada, y como llevábamos en marcha desde las 10 de la mañana, pues decidimos terminar haciendo todos una pelea de cesped y tierra. Al día siguiente me desperté con una de las resacas más notables de los últimos tiempos, y con tierra en mis oídos.

Absolutamente genial. Que por cierto, asombroso también el no haber bebido ni una gota de Ambar el primer día, estando donde estábamos.

martes, 5 de agosto de 2008

Coronita

MARCA: Coronita
MODELO: Coronita
ESTILO: Pale Lager (4'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: México

CARACTERÍSTICAS:
Ayer aparecí por el supermercado de la zona, ya que hacía unos días que tenía pensado preparar una comida mexicana en toda regla (basándome en los estereotipos, por supuesto). Al acercarme a la zona de bebidas para comprar el pack de Ambar reglamentario me entró la duda: "¿Por qué no acompañar con una cerveza mexicana?". Ya que hacía siglos que no la probaba, y en ese momento era la única mexicana que había, me hice con un pack de seis Coronitas. Muy a regañadientes.

Fabricada por el grupo Modelo, y llamada en México Corona, es la marca líder en el mercado nacional y la cerveza mexicana de mayor venta en el mundo. Actualmente se exporta a 154 países en los cinco continentes, líder en el segmento de importadas en más de esos países.

La defino como un refresco, una cerveza nada fuerte, que en solitario no dice nada y se hace aburrida, pero que acompañando una maratón de productos picantes se hace de beber. Pero vamos, que sus 4'6 de graduación de alcohol no parecen notarse, al igual que su sabor. En mi opinión, una sustancia burbujeante y refrescante sin muchas características especiales, pareja a la Sol.

Bien en conjunto con la comida, pero como ya digo, ayer tomé una sola y me pareció una completa tontería de cerveza. (Dejaré las mexicanas por un tiempo).

NOTA:



domingo, 3 de agosto de 2008

La Trappe Quadrupel

MARCA: La Trappe
MODELO: La Trappe Quadrupel
ESTILO: Quadrupel (10% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Países Bajos

CARACTERÍSTICAS: No muy a menudo se puede comprar una cerveza de este calibre por menos de 3 euros, así que cuando la ví en Makro no me lo pensé ni un instante, al igual que tampoco tuve duda alguna de con quien iba a disfrutarla: todas las papeletas las tenía mi compañero de blog Sir Asf, que decidió venir a hacerme una visita a Zaragoza. La Trappe es otra de las 7 marcas de cerveza Trapense, y además la única con esa denominación que no se encuentra en Bélgica. Goza de un merecido prestigio entre los cerveceros de todo el mundo por lo que, a pesar de ser la primera vez que probaba el modelo Quadrupel, sabía que la cata iba a ser realmente agradable.

La presentación ya da una buenísima primera impresión, con esa botella tan similar a las de vino (no fueron pocos los conocidos que, al encontrarlos de camino a casa con la botella en la mano, me preguntaron a dónde iba con ese vino), tapón de corcho y una etiqueta en tonos morados. Al abrirla, un intenso aroma a malta te golpea en la cara, un olor algo dulzón y especialmente penetrante. Se puede apreciar al servirla una espuma similar a la de las demás trapenses, moderada y que desaparece pronto, dejando nucleos en el centro de la copa. El color es marrón oscuro, cobre, con reflejos rojizos al trasluz, y junto con los demás aspectos externos de la bebida hace que te olvides de que ese líquido esconde 10º de alcohol, mucho más que la gran mayoría de las cervezas.

Y llega el esperado momento de saborear esa cerveza de lujo, con un cuerpo completo que abarca tanto boca como orofaringe, un gusto ligero a regaliz al principio y un intenso sabor a malta muy caramelizado, quizá con matices que recuerdan a melocotón, que dura largo rato, permitiendo así disfrutar de la bebida no solo durante el trago, sino varios segundos después. Posee un dulzor leve, que además es de agradecer, y participa en la difícil tarea de enmascarar su alta graduación, cosa que consigue a la perfección, resultando así una buenísima cerveza, de sabor especialmente equilibrado.

(Finalmente he conseguido hacer una fotografía de esta cerveza de una calidad más o menos aceptable. Hasta el momento empleábamos la del compañero Catador del blog Buena Cerveza, al que le agradezco el préstamo)

NOTA:

jueves, 31 de julio de 2008

Müller's Lagerbier

MARCA: Brauerei Pinkus Müller
MODELO: Müller's Lagerbier
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Por casualidad ví esta cerveza en una pequeña tienda de Zaragoza, e instantáneamente me hice con ella, puesto que no es nada fácil de encontrar. Es uno de los modelos, quizá el menos destacable, de una pequeña cervecera alemana situada en el noroeste del país, muy cerca de Holanda. Según he conseguido descifrar de su página web, la familia lleva 5 generaciones transmitiendo la tradición cervecera de padre a hijo, y manteniendo viva así durante 200 años esta modesta marca. Como dato importante, apuntar que es una fábrica biológica, es decir, que utilizan para la elaboración de sus productos materia prima cultivada de forma 100% natural. (como mis conocimientos del idioma no son todo lo extensos que quisiera, dejo aquí el link, y aceptaré de buen gusto cualquier apunte o corrección que se quiera realizar: PÁGINA OFICIAL)

A primera vista, la etiqueta ya nos sugiere la procedencia: campos verdes, casas típicas rurales europeas, etc... es más, incluso nos podríamos atrever a imaginar un poco el sabor de la bebida y no andaríamos demasiado desencaminados. Nada más abrirla, percibimos un intenso olor dulce, fresco, campestre, con fuerte presencia de malta y algo herbal, que se acentúa al servirla. Una vez hecho, veremos al trasluz una cerveza dorada, algo pálida, y especialmente poco turbia si tenemos en cuenta que no está filtrada. La carbonatación es extremadamente baja, y produce poca espuma.

Müller's entra de forma especialmente suave, es muy fácil de beber, en parte por la escasa carbonatación y el reducido amargor, pero no obstante es más que disfrutable. Su cuerpo es ligero, con un sabor algo floral, quizá con toques de miel, pero poco duradero, aunque persiste un regusto a flores en el fondo de la garganta. Ciertamente, no es nada del otro mundo esta cerveza, sobretodo en comparación con los demás modelos de Pinkus, pero como experiencia está bien, e incluso para repetir de cuando en cuando.

NOTA:

martes, 29 de julio de 2008

Desperados

MARCA: Desperados
MODELO: Desperados
ESTILO: Pale Lager con tequila (5'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Francia

CARACTERÍSTICAS:
Nos encontramos ante una cerveza que por su aspecto engaña al tratar de situarla geográficamente. Con una botella similar a las Sol o Coronita mexicanas, tiene un color y una espuma parecida a ellas, no obstante, se trata de una cerveza francesa, de la temporada en la que pegó fuerte la cultura tex-mex y las cervezas mexicanas en Europa. Se lanzó el producto en plenos juegos de invierno, en Francia, 1995, con el eslogan: "DESPERADOS, más peligrosa que un mexicano en esquís".
Portando el rótulo de "Tequila", pretendía llamar la atención del consumidor. Y lo consiguió.
Hacía tiempo que no bebía esta cerveza, ya que no me parecía extremadamente interesante. Pero al verla en la estantería del super, dije: "¿por qué no?".

La cerveza se bebe en botella, y en sí tiene como característica destacable el tequila que incorpora en su composición. No contiene tequila, como parece presumir a primera vista, sino un aroma de tequila (se puede leer en la letra pequeña).
Tras deschapar la botella el aroma me recordó al olor de un cuarto en el que un grupo de personas ha pasado horas bebiendo todo tipo de alcohol. El sabor tiene los evidentes rasgos del aroma de tequila, y quizás algo de sabor a lima; la espuma es blanca, similar a la de las cervezas mexicanas. Entra bastante rápido, y teniendo un 5'9 % de alcohol, en una reunión de bebedores puede ser un sustituto... "aceptable" de bebidas mayores.

No sé, como cerveza de paso no me ha refrescado tanto como lo hizo la Sol (quizás fue lo mejor de esa), y el sabor es más apropiado para una reunión de amigos en plena fiesta que para tomar tranquilamente en casa. El precio quizás es lo peor, ya que aunque no llega a la altura de las importadas belgas o alemanas, vale sus casi dos Euros en supermercado, en mi opinión, hinchado por ese "prestigio" que se le ha querido dar.

No he salido muy convencido, la verdad.

NOTA:

viernes, 25 de julio de 2008

Records cerveciles

Navegando por la superautopista de la información he encontrado una serie de records relacionados con el mundo de la cerveza del todo geniales. He elegido los que más me han gustado:

1. La mayor selección de cerveza en un bar:

En el año 2002, Dave Alexander, del Brickskeller, recibió un Record Guinness certificado por poseer la mayor selección de cerveza del mundo, un total de 1.072 cervezas distintas.

2. Mayor cantidad de cervezas seguidas:

Andre "el Gigante" se bebió 119 cervezas (de las estándar) en un tiempo record de 6 horas. De seguido, equivale a una cerveza cada tres minutos, sin parar. Después de la hazaña se colocó en el pasillo de un hotel y por alguna razón nadie pudo moverlo.

3. La mayor colección de cerveza:

A Ron Werner, de USA, le fue otorgado un certificado en 2002 por su colección de 11.644 botellas diferentes de cerveza, acumuladas desde 1982. Incluye 7.128 que aún están cerradas. En la colección hay 1.704 marcas.

4. El litro más rápido:

El 22 de Junio de 1977, Steven Petrosino batió el record del mundo bebiendo un litro de cerveza en 1,3 segundos, en el Gingerbreadman, en Carlisle, Pensylvania. Batió la marca de Peter Dowdeswell, del Reino Unido, que bebió un litro en 2,3 segundos.

5. Mayor cantidad de cerveza en 5 minutos:

Eric Lean, de Crowley (Reino Unido), tiene el Record Guinness por beberse 7,75 pintas imperiales de cerveza en 5 minutos. Equivale a 12 latas de cerveza. El record se estableció en Enero de 2003. Un record con posibilidades de ser batido, creo yo.

Interesante recopilación de curiosidades cerveciles, que nos demuestra una vez más, que la cerveza levanta pasiones... y ganas de retar al sentido común.

jueves, 24 de julio de 2008

Sol clara

MARCA: Sol
MODELO: Sol clara
ESTILO: Pale Lager (4'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: México

CARACTERÍSTICAS:
La leyenda cuenta que una mañana de 1899, que en el interior de la que fuera una pequeña fábrica de cerveza, ubicada en las cercanías del Distrito Federal de nombre "El Salto del Agua", después de elaborar algunas formulaciones, un maestro cervecero alemán observó que un rayo de sol caía sobre la ola de conocimiento. El fenómeno llamó fuertemente su atenciñon y en honor a esta experiencia, a su nueva cerveza la bautizó como "El Sol". "El Sol surge pensando en la clase trabajadora, ofreciéndole una cerveza más refrestance, acorde a los momentos de descanso.
Grandísima decisión la mía al comprar esta mañana esta cerveza. Hoy está siendo uno de los días más calurosos de lo que llevamos de verano, y sólo faltaba que la cerveza no me echase una mano para sobrevivir a tan altas temperaturas. Por suerte, ha sido un hallazgo interesante, y aunque algo previsible, bastante bueno.
La cerveza Sol es muy refrescante. Ya en la estantería del supermercado la he confundido con la coronita (cerveza que no me gusta demasiado), pero al mirar mejor he visto que se trataba de una marca a la que no había prestado nunca atención. Estando así y con el calor que hacía, he decidido comprarla.
Tiene un sabor amargo suave bastante característico, que recuerda a la ya nombrada Coronita. No obstante, no sé si por el calor o porque realmente es así, me ha sabido más rica de lo que pensaba en un principio. Refrescante, repito, bastante "gaseosa", con un color amarillo claro y una espuma blanca espesa; recomiendan echar el reglamentario trocito de limón (aunque a mí no me ha gustado nunca hacer eso).
Por lo que he leído, es una de las más consumidas en su país natal, México. Se puede encontrar también una variedad de Sol, en lata, con sal y limón.

Rápida recomendación a los sedientos. Seguramente la pruebe con unos burritos de chili con carne la próxima vez, seguro que eso sabe a gloria.

NOTA:

lunes, 21 de julio de 2008

Erdinger Weiβbier

MARCA: Erdinger
MODELO: Erdinger Weiβbier
ESTILO: Hefe-Weiβbier (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Erdinger Weiβbräu se fundó en 1886 en la ciudad alemana de Erding, en la región de Bavaria, famosa precisamente por el producto estrella de esta cervecera, la cerveza de trigo. Sin embargo, no se la conoció por su actual nombre hasta 1949, año en el que lo adoptó definitivamente. En el presente, es una de las marcas más conocidas, además una de las mayores compañias del mundo dedicadas a la producción de cerveza de trigo, hasta el punto de permitirse el lujo de autocalificar a Erdinger Weiβbier como la mejor cerveza de este estilo (cosa que, según mi punto de vista, dista muchísimo de la realidad)

A primera vista, parece compartir las propiedades de las cervezas de trigo: color dorado; carbonatación alta; espuma abundante y duradera, de aspecto cremoso; y olor a trigo, algo frutal aunque en este caso es excesivamente ligero y en absoluto excepcional. Luego, en otros aspectos, tiene algunas diferencias, pero para nada destacables.

El inicio del trago es interesante, con bastante cuerpo y que recuerda a frutas maduras, aunque no tanto a plátano como es habitual en las Weizen alemanas, sino algo más picante. Seguidamente, el sabor se diluye, parece aguarse, persistiendo un suave regusto ácido en el paladar, y que deja su presencia muy reducida. Para mi gusto, es demasiado ligera y, por lo tanto, bastante menos interesante que otras marcas.

En resumen, es bebible, entra con mucha facilidad, pero no obstante, por su precio, prefiero mil veces comprar una Franziskaner o una Paulaner y disfrutar de verdad. De todas maneras, en caso de encontrarme comiendo en Bavaria mientras un alemán me cuenta los diferentes métodos e ingredientes de elaboración de las bratwurst que estamos a punto de devorar, no le haría ascos a una Erdinger Weiβbier bien fresquita.

NOTA:

jueves, 17 de julio de 2008

La Ronda II: ¿Cerveza o cervecería?

Volviendo a este genial meme cervecil iniciado por el Filósofo Cervecero, desde Hipos Urinatum vamos a seguir participando en él. Esta vez ha sido el turno de Chela para proponer una pregunta, y ha recurrido a un filosófico dilema que seguro que más de uno se ha planteado alguna vez:

¿Está la cerveza hecha para disfrutar en la intimidad de nuestros hogares tomando el protagonismo absoluto o más bien es una bebida social que se engrandece cuando se toma al calor del bar acompañada de tu gente favorita? En otras palabras, ¿para vosotros que es primero la cerveza o la cervecería?En otras palabras ¿qué destacaríais más vosotros como cerveceros la cerveza o la cervecería?
He de admitir que es una pregunta de difícil respuesta, por mi parte no puedo mostrarme fiel a una u otra opción, por múltiples razones:

Son cosas distintas, prácticamente el dilema se centra en "el tomar la cerveza sólo o acompañado", ya que ambas cosas son posibles en una cervecería o en tu hogar.

La cerveza es el comienzo, es el elemento, es la razón por la que estamos ahora reunidos ante un juego. Es una bebida mágica, refrescante y deliciosa con una tradición y variedad enorme. Por suerte, actualmente es un elemento habitual y fácilmente adquirible, encontrando marcas tradicionales y propias según la zona geográfica en comercios de primera mano, y también algunas importadas de otros lugares, en ocasiones remotos, en tiendas especializadas.
Por otro lado, la cervecería, un lugar de reunión, un ambiente distinto al de otros establecimientos de tertulia. En la cervecería venden cerveza, obviamente, pero además recibes algo que en ningún otro lugar puedes encontrar, que en ocasiones no lo notas hasta que estás fuera del recinto, probablemente al volver a tomar cerveza en tu casa. Es la sensación indescriptible de estar en un lugar que vive de la cerveza, en el que quienes trabajan saben lo que sirven y cómo servirlo.

Hay cervezas que requieren una atención extra, que tienen propiedades muy finas y selectas. Normalmente, tomar una cerveza en una cervecería implica estar con amigos, charlando, jugando a algo, dejando a la bebida (sin quererlo realmente) en un segundo plano.
Personalmente dividiría las cervecerías en dos tipos de establecimientos: por un lado lugares especializados, cervecerías propiamente dichas; y por otro, bares, cafeterías, locales de bebida y comida.
En el segundo tipo la cerveza suele ser estándar, sin propiedades muy llamativas, pero con todo el sabor de una buena cerveza. Durante la estancia sólo adquieren protagonismo cuando pides otra ronda o entras a compararlas con otras cervezas más selectas.
Sin embargo, en el primer tipo de establecimiento, la cerveza cobra importancia. La variedad de zumo de maltas es más amplia, y la conversación suele desembocar en lo rica/mala que está la cerveza, que bastantes veces suele ser nueva para tu paladar. No obstante, sigue estando en un segundo plano.

La cerveza que se toma en casa tiene un 100% de atención por tu parte (porcentaje que experimentará una disminución inversamente proporcional al número de actividades que realiza tu mente a la par). Apreciar las tonalidades en el sabor, la intensidad de los amargos y los tintes de los dulces, es más sencillo, es una parte importante de beber esa cerveza. Además te encuentras en un lugar conocido, en el que cualquier contratiempo puede ser solucionado y olvidado, algo que seguramente no pasaría en una cervecería.
Pero al terminar la cerveza y decir "qué buena estaba, maldita sea", te lo guardas para tí mismo. Es algo que no me parece del todo mal, ya que se trata de conocer cada vez más un tipo de cerveza, la cuál puedes descubrir más adelante a tus amistades en una cervecería.

Tema a parte es el del dinero, aunque no teniendo dificultades económicas muy serias, puedes permitirte de vez en cuando una señora cerveza en una cervecería, con lo que a fin de cuentas es una variable no muy importante. Las cervezas que bebes en casa son más baratas... te las vas a servir tú en tu vaso, y te vas a sentar en tu sofá.

Finalizando el tema, diré que son dos opciones del todo interesantes y geniales. Con cada una se aprende algo más acerca de las cervezas, y se experimentan diferentes sensaciones. Y como ya he comentado, son perfectamente compatibles, por lo cuál no dudaré en responder que ambas soluciones son igualmente válidas, cada una a su manera.

Espero haberme expresado con bastante claridad en estos párrafos algo filosóficos, y desde aquí, repito, apoyamos esta iniciativa de "La Ronda", y seguiremos participando en ella mientras podamos (y se nos deje, jeje).

martes, 1 de julio de 2008

Orval

MARCA: Orval
MODELO: Orval
ESTILO: Blonde Trapense (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS:
La trucha y el anillo
Hacia 1076, la soberana de OrvalL era la condesa Mathilde, también duquesa de Toscana. Estando sentada en el borde de una fuente de claras aguas, por un descuido, dejó caer en ella su anillo nupcial, recuerdo de su difunto marido. Desesperada por haber perdido esta joya, la condesa rezaba a la Virgen María con gran fervor. De pronto, apareció una trucha en la superficie del agua, devolviéndole su preciado bien. Extasiada por el milagro, la soberana gritaba entonces: "¡He aquí el anillo dorado que estaba buscando!, ¡Bendito sea el valle que me lo devolvió!, ¡A partir de ahora y para siempre, quiero que sea llamado Val d'or!".
El símbolo de Orval "la trucha y el anillo de oro " ha conservado el recuerdo de esta leyenda. El agua de la fuente, su altivez, todavía alimenta el monasterio y su cervecería.

El monasterio de Orval fue fundado en 1070 y se integró en la orden Cisterciense en 1132. Destruido durante la revolución francesa, resurge de sus ruinas a partir de 1926.

La cerveza Orval tiene denominación de origen Trapense, una graduación de 6,2°, y es de alta fermentación, con dos fermentaciones en botella.
Orval no tiene otro envase que la botella de 33 cl en forma de bolo, que llamó mucho mi atención y sobre todo mi lado rolero, al recordarme a los dibujos de las pócimas mágicas y demás parafernalia. La forma de la botella ha sido especialmente diseñada para ofrecer la posibilidad de servir una cerveza transparente y brillante, dejando el poso de levadura en la botella al momento de servirla. Este poso, rico en vitamina B, se puede consumir posteriormente. Justo antes del embotellado se añade una pequeña dosis de azúcar líquido y levadura fresca.

El sonido de la apertura de la botella se hace notar, dejando un primer aroma dulzón y curioso. Tiene un sabor fuerte y robusto, con una combinación de amargos y dulces muy interesante. La espuma es blanca y abundante, densa, como si fuese nieve. Me parece que podría permanecer así, sin descomponerse, años. El color de la cerveza es entre ambar y caramelizada. No tiene un olor característico, pero lo dice todo con el sabor: una señora cerveza. Se merece una visita al monasterio, en Bélgica, donde los monjes trapenses preparan un menú de queso, pan y cerveza Orval que hace las delicias de todo viajero.

NOTA:




CARACTERÍSTICAS: Como ya ha dicho Sir Asf, el presentación de Orval es bastante peculiar, debido principalmente su botella de forma redondeada... pues pasa un poco lo mismo con la bebida en sí, puesto que pese a ser de denominación trapense, no comparte las propiedades de las otras marcas.


Al igual que en Chimay o La Trappe, lo presencia de matices afrutados es clara, pero mientras estas tienden hacia un gusto más dulce, melocotón, albaricoque, con fuerte relevancia del caramelo, en Orval predomina la acidez, pudiendose descubrir ya desde el primer momento un aroma cítrico intenso, espeso, que recuerda a naranja, manzana verde, suaves frutas tropicales, aderezado con cilantró y especias, que se desliza por las fosas nasales y las abarca por completo, eso sí, acompañado en todo momento por la malta que queda en un segundo plano, pero es perfectamente perceptible. Completa el conjunto intensos perfumes de lúpulo floral y cítrico, con un deje que recuerda bastante a las cervezas añejadas en barrica, como de vino blanco. El aspecto externo sí que será más similar, de color marrón claro con reflejos anaranjados, y cubierto por una espuma cremosa, muy blanca y abundante.


Tiene uno de los gustos más completos que he probado, que ha convertido a Orval en una de mis cervezas predilectas, con un cuerpo medio, muy adecuado, que permite que la cerveza entre con suavidad. El sabor es, por supuesto, frutal, algo esquivo entre la espuma para alcanzar finalmente la boca en toda su complejidad, con intensos matices a limón, más secundaria naranja ligeramente dulce y suave malta perfectamente acoplada. Las especias picantes se combinan con el gusto avinado en una mezcla sublime, para terminar nuevamente con cítricos, flores y la delicada calidez del alcohol en un largo y sabroso final. Con esta descripción, recuerda a las Faro belgas y bueno, a pesar de que obviamente no pertenece al estilo, tampoco es descabellado decir que tiene cierto parecido.


Este altísimo nivel se mantiene todo el rato, llegando finalmente a un regusto espectacular donde la fruta se permite dar el punto y final a una combinación de acidez y amargor ante la cual no cabe otra cosa que la admiración. No sé si Orval será una cerveza perfecta, pero si una de las mejores.


NOTA:


viernes, 27 de junio de 2008

La Ronda I: La Peor Cerveza de mi Vida

Hemos recibido una invitación por parte de la Compañía Asturiana de Amigos de la Cerveza para participar en una iniciativa llamada "La Ronda", propuesta por el Filósofo Cervecero, consistente en realizar una publicación común al final de cada mes sobre el tema a tratar. Desde Hipos Urinatum participaremos gustosamente, quizá incluso varias veces por mes, puesto que somos varias personas las que colaboramos en este blog. Sin más dilaciones, esta es La Ronda correspondiente al mes de Junio:

Cuál fue la peor cerveza que han tomado en su vida? No me refiero a los sospechosos de siempre, ni a una mala partida/botella/tirada de una cerveza que nos gusta. Me refiero a esa cerveza que una vez probaron por primera vez y les resultó simplemente repugnante. Quiero saber cuál fue la ocasión, que hicieron con la cerveza y si alguna vez la volvieron a probar para ver si de hecho se trataba de una mala partida/botella/tirada?

Ciertamente, he tenido la oportunidad de probar muchas cervezas con evidentes carencias, e incluso las he bebido y las bebo con asiduidad... hay ocasiones en las que es el bolsillo el que manda y, como estudiante que soy, estas ocasiones no son poco comunes. Sin embargo, la peor cerveza de mi vida no la bebí, por desgracia, en una de estas ocasiones, ya que me costó un buen dinero.

Tengo la suerte de vivir en un barrio donde la inmigración, ya sea del Este, de África Subsahariana o de Sudamérica, tiene una fuerte presencia. Esto me permite conseguir con facilidad cervezas del extranjero, que de otra forma se me haría casi imposible. Hace algunos años pasé por delante de una tienda de alimentación y llamaron mi atención unas botellas de cerveza de marcas que nunca antes habia visto. Sin pensarlo dos veces, entré a preguntar por ellas y le pedí consejo al dependiente sobre cual comprar. Y, también sin pensarlo dos veces, me ofreció una de África, con la botella fabricada en Camerún (aún me acuerdo de esto), llamada Castel Beer.

La llevé a casa y fué darle un sorbo y comprobar como una especie de agua amarga me inundaba toda la boca. No es que tuviese poco cuerpo, ¡es que no tenía en absoluto! La única parte buena es que estaba fresca, así que le pegué varios tragos más, pero fuí incapaz de acabármela entera (para ponerlo aún más difícil, la botella era de 0'5 l) No he vuelto a probarla y, la verdad, no sé si me atrevería a volver a hacerlo.

sábado, 21 de junio de 2008

Newcastle Brown Ale

MARCA: Newcastle
MODELO: Newcastle Brown Ale
ESTILO: Brown Ale (4'7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Se dice en que fue en la ciudad de Newcastle donde por primera vez se fabricó cerveza en Inglaterra. Leyendas aparte, lo que sí que es cierto es que Newcastle Brown Ale, también conocida como "Newkie" en el sur de Inglaterra o como "Broon" o "Dog" en su ciudad natal (por el eufemismo "voy a pasear al perro", popularizado gracias a un anuncio en la década de los 80), es una cerveza líder en ventas en ese país desde sus inicios en 1927 en Newcastle Upon Tyne. No obstante, su fama no se limita a las islas británicas, pues su símbolo, la estrella azul, es reconocido en muchos lugares del mundo.

Newkie es una Brown Ale que, como la mayoría de las de su estilo, deberemos servir fresca, pero no fría. Al hacerlo, veremos una espuma escasa, poco duradera, sobre un líquido marrón castaño, cobrizo, con una carbonatación media. El olor es dulce, de intensidad media, una mezcla de malta tostada y caramelo con suaves frutos secos, agradable al olfato aunque algo artificial.

Al beber nos encontramos con una cerveza poco compleja, fácilmente disfrutable, pero ni de lejos excelente. Tiene un cuerpo ligero, con un sabor dominado por el grano tostado, algo acaramelado, con recuerdos de cacao y nueces, para al final aparecer un amargor medio que deriva en un final algo seco donde se aprecian con facilidad los matices herbales aportados por los lúpulos ingleses, además de un leve regusto metálico que por suerte no llega a estropear el conjunto. El principal inconveniente que le veo a esta cerveza, y que hará que no la compre muy a menudo, es que 2'40 euros por botella me parece excesivo para el producto que se ofrece. Sin embargo, de encontrarla más barata no tendría inconveniente en tomar alguna de cuando en cuando.

NOTA:


sábado, 14 de junio de 2008

Perlenbacher Premium Pils

MARCA: Perlenbacher
MODELO: Perlenbacher Premium Pils
ESTILO: Pale Lager (4'7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Cerveza alemana, muy popular en nuestro país por ser la marca que distribuyen los supermercados Lidl, además a buen precio, rondando los 0'50 euros la botella de medio litro. Personalmente, es una cerveza que no me desagrada en absoluto, durante la adolescencia su pack de 6 botellas era mi elección cervecil fija para los fines de semana y ahora, pese a que la compro mucho menos a menudo, no me parece mala opción para ciertas ocasiones.

La cerveza en sí no tiene nada de especial, sigue el patrón clásico de una Pils alemana ramplona, de color dorado brillante, filtrada, con un dulce aroma a malta y cereales, notas de pan, leve deje cítrico y lúpulo floral muy extendido, con quizá un toque metálico.

Como cabía esperar, en boca ninguna sorpresa, en su sabor dulce se aprecia bien la malta de cebada entre la cual se introducen notas de pan y cereales, con un trago robusto, en absoluto aguado. Se encuentran también notas de limón bastante moderadas que ganan algo de fuerza hacia el final mientras el dulzor va siendo moldeado por el lúpulo floral, compensándolo con un cierto amargor que junto con la acidez forma un frente común contra este, a lo que se suma un mínimo regusto metálico, pero nada molesto. No es una cerveza maravillosa ni mucho menos, pero en mi opinión es más que aceptable y, eso sí, calidad-precio inmejorable.

NOTA:

jueves, 12 de junio de 2008

Delirium Tremens

MARCA: Delirium
MODELO: Delirium Tremens
ESTILO: Blonde (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS:
El delirium tremens es un síndrome grave, potencialmente letal, que ocurre en aproximadamente el 5% de los pacientes que siendo alcohólicos incurren en abstinencia súbita de alcohol. Tiene una morbilidad cercana al 10%. Su aparición se sitúa, generalmente, a las 72 horas de haber tomado la última copa de alcohol. Sin embargo, el delirium tremens puede desarrollarse sin que haya habido un cambio en el patrón de bebida.
Desde 1654 ha habido, sin duda, algún tipo de actividad cervecera en la "Appelhoek" en Melle. A lo largo del tiempo esta cervecería cambió de nombre, hasta 1985, año en que la producción de cerveza pilsen tradicional fue conmutada a la de las cervezas de alta fermentación. Por primera vez, se consideró la posibilidad de exportar. El 5 de julio de 1985, la cerveza "Artevelde" se introdujo en el mercado. En el 89, nace la famosa 'Delirium Tremens'. Su embalaje original, que se asemeja a una colonia en cerámica, y la colorida etiqueta, contribuyeron a que tuviera un éxito abrumador. La etiqueta muestra el famoso elefante rosa, que recuerda a aquella celebérrima escena de Dumbo.

NOTA: