MARCA: PetrusMODELO: Petrus Oud Bruin
ESTILO: Flanders Oud Bruin añejada 20 meses en barril de roble (5'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica
CARACTERÍSTICAS: Esta botella, regalo post-navideño de Sir Asf, estaba guardada en mi trastero desde hacía casi 3 meses a la espera de su gran oportunidad que finalmente le brindé una noche de la semana pasada. Se enfrentaba a un reto complicado, que era la comparación con la anterior cerveza de este estilo que había tomado, la maravillosa Oerbier Reserva de De Dolle, gesta de la que no es fácil salir airoso; no obstante yo estaba con una actitud bastante optimista a este respecto, cosa que quizá facilitó el enfrentamiento.
Es de color marrón oscuro con brillantes reflejos rubí al trasluz, demostrando entonces su moderada turbidez, cubierta por una discreta capa de espuma beige, muy cremosa pero que desaparece con rapidez. En el olfato el añejado en roble se nota al instante, junto con la malta dulce se aprecian intensos aromas avinados, de frutas del bosque, algo medicinales, que consiguen equilibrar el conjunto en un punto muy adecuado entre el dulzor y la acidez, a lo que un leve toque de lúpulo herbal le pone la guinda. No tan chocante ni complejo como la supuesta contrincante, no obstante me pareció muy correcto.
En boca comienza con una acidez muy frutal, recuerda a fresas silvestres, cerezas, con intensas notas de vino tinto, y más en segundo plano la malta. Rapidamente tiende hacia el dulce, aparecen frutas maduras, sobretodo uvas y frambuesas, dando una sensación que recuerda al sidral. Al final conforma un amargor medio, donde se aprecia un toque herbal que casa muy bien con el vino, para terminar de forma seca dejando el regusto de la barrica. Tanto en cuerpo como en carbonatación la cerveza está clavada, no cambiaría ni un ápice; si a esto se le suma un sabor agradable y de suficiente complejidad, como es el caso, es evidente que el resultado es satisfactorio. Mil gracias Sir Asf :)
Es de color marrón oscuro con brillantes reflejos rubí al trasluz, demostrando entonces su moderada turbidez, cubierta por una discreta capa de espuma beige, muy cremosa pero que desaparece con rapidez. En el olfato el añejado en roble se nota al instante, junto con la malta dulce se aprecian intensos aromas avinados, de frutas del bosque, algo medicinales, que consiguen equilibrar el conjunto en un punto muy adecuado entre el dulzor y la acidez, a lo que un leve toque de lúpulo herbal le pone la guinda. No tan chocante ni complejo como la supuesta contrincante, no obstante me pareció muy correcto.
En boca comienza con una acidez muy frutal, recuerda a fresas silvestres, cerezas, con intensas notas de vino tinto, y más en segundo plano la malta. Rapidamente tiende hacia el dulce, aparecen frutas maduras, sobretodo uvas y frambuesas, dando una sensación que recuerda al sidral. Al final conforma un amargor medio, donde se aprecia un toque herbal que casa muy bien con el vino, para terminar de forma seca dejando el regusto de la barrica. Tanto en cuerpo como en carbonatación la cerveza está clavada, no cambiaría ni un ápice; si a esto se le suma un sabor agradable y de suficiente complejidad, como es el caso, es evidente que el resultado es satisfactorio. Mil gracias Sir Asf :)
NOTA:
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